—No conseguiras nada si sigues resistiendo .Ya te di dos tiros, acepta tu destino.
—Yo… *cof* *cof*… Kira ya no podia más, esas dos balas lo habian dejado arrodillado en el suelo y con un dolor insoportable.
'¿Cómo fue que esto sucedió?... Yo no quería terminar así. Solo... quería una vida normal como cualquier adolescente. Una vida en la que pudiera jugar y divertirme con amigos, tal vez tener intereses amorosos o incluso...'
Los ojos de Kira se abrieron y una expresion vacia se reflejo en sus ojos.
Flashback- 1 mes atras-
—¡Hermano! ¡Por fin volviste! ¡Te extrañé tanto! exclamó Laila con una sonrisa radiante y unos ojos llenos de ilusión al ver a su hermano regresar tras un largo viaje.
Kira apenas pudo esbozar una pequeña sonrisa en su rostro cansado.
Laila, sin embargo, se detuvo bruscamente. La alegría en su expresión se desvaneció como si nunca hubiera estado allí.
Kira no dejó de sonreír, incluso cuando vio la preocupación reflejada en el rostro de su hermana menor.
—Hermanito... tú... —susurró Laila, con la voz temblorosa.
—Tranquila, rubia, no es grave. Estoy perfectamente bien —respondió él, intentando restarle importancia.
Aunque estas palabras parecieron calmar un poco a Laila, su disgusto por las heridas de su hermano era evidente.
—Prométeme algo, Kira. —Su tono cambió repentinamente, y sus ojos, normalmente llenos de alegría, ahora estaban serios.
Kira se quedó sorprendido ante el inusual cambio en su hermana.
—¿Qué cosa?
—Nunca más vas a dejarte lastimar por otros... Hazlo por mí.
Kira asintió. Lo que Laila no sabía era que esas palabras cambiarían su vida para siempre.
Fin del flashback-situacion actual-
'No... no puedo romper mi promesa...'
Con este pensamiento resonando en su mente, Kira se levantó del suelo, a pesar de las heridas y el charco de sangre en el que yacía. Sus ojos se encendieron con una determinación ardiente mientras miraba a su oponente.
—¡¿CÓMO ES POSIBLE?! ¡TE DI DOS TIROS! gritó el enemigo, retrocediendo unos pasos, incapaz de comprender cómo Kira aún podía ponerse en pie.
'Sé que es el mejor soldado de su generación, pero esto... esto sigue siendo imposible...' pensó el hombre, con el horror reflejado en su rostro.
—Tú... murmuró Kira con una voz firme y helada. —Te vas a la tumba conmigo. Quieras o no.
Sin dudarlo , Kira se lanzó hacia él a una velocidad impresionante .Extendiendo su mano hacia una daga escondida debajo de su chaleco.
¿Qué...?
Ese fue el último pensamiento del enemigo antes de que Kira enterrara su daga profundamente en el pecho del hombre
despues de esto ambos cuerpos cayeron al suelo, inmóviles.
'Rubia… lo siento, no pude cumplir mi promesa' Con esto los ojos de kira se cerraron, Aunque la vida de este adolescente habia terminado ,un deseo seguia en pie.
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Un pequeño niño, de apenas tres años, estaba sentado en una de las caras talladas de los Hokages. Desde lo alto, observaba el pueblo que se extendía bajo él, sus pequeños pies balanceándose al borde de la roca. Su rostro reflejaba la tranquilidad propia de un niño.
Sin embargo, algo cambió de repente. La luz en sus ojos se apagó, y su expresión se tornó vacía. Como si un recuerdo lejano y desconocido hubiera despertado en lo más profundo de su mente.
El niño parpadeó, desconcertado. Su mano tembló ligeramente mientras tocaba su frente, tratando de entender qué estaba ocurriendo. Imágenes y emociones que no eran de este lugar lo invadieron sin aviso.
—¿Qué... está pasando? —murmuró con voz débil, como si se hablara a sí mismo
Entonces, los recuerdos llegaron como una ola imparable: el sonido de la guerra, el frío acero en sus manos, las promesas hechas y rotas. Todo era tan vívido que por un momento olvidó dónde estaba.
—Kira... ese es mi nombre —susurró el niño, casi en un estado de trance.
Esas palabras resonaron en su mente como un eco lejano, pero lo suficiente para traer claridad. El niño miró sus manos una vez más, intentando recordar.
Fragmentos de su existencia anterior comenzaron a tener sentido, como piezas de un rompecabezas que, por fin, comenzaban a encajar. La memoria le vino con una rapidez abrumadora: recordaba la infancia, los días felices y despreocupados, y luego los momentos más oscuros, cuando su vida cambió para siempre.
Pasó de ser un niño sin preocupaciones a un joven marcado por la guerra. La lucha constante, las heridas, las batallas que había librado... Todo eso vino de golpe, como si el peso de su vida anterior hubiera caído de nuevo sobre sus hombros. Cada recuerdo tenía su propio rostro, su propia historia, y entre ellos, una sombra más profunda: la promesa hecha a su hermana, Laila.
¿Era posible que este niño, con sus ojos grandes y asustados, fuera el mismo guerrero que una vez conoció el sufrimiento y la derrota? No podía ser un error, no podía ser solo un sueño. Kira sabía quién era.
—Soy… Kira. Repitió, esta vez con más firmeza.
El niño cerró los ojos, buscando algo de paz, algo que le permitiera entender lo que estaba ocurriendo. 'Este cuerpo es joven, pero mi mente... Pensó. Mi mente está llena de años de experiencia. ¿Qué hago aquí? ¿Por qué estoy en este lugar?'
Se quedó quieto, absorto en sus pensamientos, mientras el viento acariciaba su rostro.
En su mente, el niño y el adolescente que alguna vez fue se entrelazaban, pero ninguno de ellos tenía respuestas claras. Lo único que sabía con certeza era que no podía olvidar lo que había sido, lo que había vivido, y la promesa que aún debía cumplir, aunque este cuerpo no pudiera hacerlo.
El niño se quedó en silencio, mirando el paisaje frente a él. El aire fresco acariciaba su rostro, pero no era suficiente para despejar las nubes que se habían formado en su mente.
'¿ Esta es mi vida real?¿O acaso todo lo que viví antes fue solo un sueño?'
Los recuerdos de su vida anterior seguían vivos en su mente. Pero ahora, aquí, era solo un niño, con la fragilidad de un ser que Aún no había experimentado el dolor de la vida. ¿Era esta su verdadera existencia? ¿O simplemente otra ilusión, otro ciclo que había comenzado?
'Quizá...Quizás mi verdadero yo ya no existe más.
¿Qué soy? ¿Quién soy? ¿Esta es mi oportunidad para empezar de nuevo, o solo es un sueño?¿me apodere de este cuerpo o, solamente no podia recordar esto?'
El estres que kira estaba manejando en este momento era preocupante. El hecho de haber reencarnado lo asustaba mucho
Su pecho subia y bajaba como una montaña rusa. Desafortunadamente, el cuerpo de este niño no pudo soportarlo , y se desmayo.
Nota:
La verdad es que es mi primera vez esforzándome en un capitulo
Si les gusto, haganmelo saber en los comentarios
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