—Las personas alrededor aspiraron aire en shock —dijo alguien—. Qin Hao no está mostrando ningún respeto hacia el Grupo Ruixing en absoluto.
Luo Feng estaba justo a su lado, y las palabras de Qin Hao también lo desacreditaban a él.
—Luo Feng miró a Qin Hao inexpresivamente —continuó el narrador—. Qué arrogante advenedizo, despreciando completamente a uno experimentado como él.
—La cara de Luo Ze se tornó embarazosa —agregó otro personaje—. Qin Hao, no seas demasiado arrogante.
—Qin Hao lo miró con desdén —respondió él—. Mejor resuelve primero el asunto con mi guardaespaldas.
—Leng Xuan dio un paso adelante —dijo alguien más—. Pide disculpas a mi compañía.
No solo necesitaban diversas habilidades sino también cursos sobre política corporativa, lealtad a la compañía y lealtad a Qin Hao.
El honor corporativo era primordial, y todos tenían que defender el honor y la dignidad de la compañía.