—¿El discípulo más fuerte de la Secta del Cielo del Trueno? Esto promete ser interesante —murmuró alguien.
En la arena.
No había ni una pizca de tensión o aprensión en el rostro de Yun Xing.
En su lugar, había una sonrisa burlona.
—¿Qué crees que pasaría si yo, un discípulo clasificado quinto en la Secta de la Espada del Cielo Azul, le diera una paliza al discípulo más fuerte de tu Secta del Cielo del Trueno? —Yun Xing miró a Mon Tianran, su corazón ya estaba ardiendo.
Derrotar al discípulo más fuerte de la Secta del Cielo del Trueno frente a una audiencia de más de cien mil era sin duda una excelente oportunidad para que Yun Xing ganara prestigio.
—Entonces puedes intentarlo —La expresión de Mon Tianran fue indiferente de principio a fin.
Una sonrisa astuta apareció en la esquina de la boca de Yun Xing.
—Técnica de Espada del Cielo Azur, Primer Movimiento: ¡Jiao Dragón Chu Hai! —Contra Mon Tianran, Yun Xing se esforzó al máximo desde el principio.
