Ryan retiró sus manos de mi hombro instantáneamente mientras yo apretaba los labios para evitar gritar de dolor. Después de unos minutos, cuando el dolor desapareció, abrí los ojos y me sequé las lágrimas. Esperaba que Ryan me mirara con preocupación o miedo, pero en cambio, cuando lo miré, estaba en el suelo sobre sus rodillas, agarrándose el pecho y los restos de su camisa estaban en el suelo... {parecía que el rey intentaba tomar el control de él}
—¿Estás bien? —me preguntó mientras aún inclinaba la cabeza.
—Sí, ¿y tú? —lo cuestioné de vuelta, y después de unos segundos, se levantó y asintió hacia mí. No sé por qué pero parece agobiado.
—¿Qué pasó? —lo volví a preguntar.
—Entender al rey es cada vez más difícil —murmuró Ryan en voz baja y se frotó su duro pecho desnudo—. ¿También sentiste ese dolor? —me preguntó, y asentí mirando su torso sexy.