El eco de sus pasos resonaba en la sala, pero Takuya Yagami no los escuchaba. Su mente estaba atrapada en una espiral de recuerdos: la fría derrota, un análisis muy meticuloso de cada movimiento fallido, la manera en que Ayanokōji había derrotado.
Había sido una humillación que no olvidaría. Y entonces, el pasillo se ilumina de un blanco cegador, uno intenso fuera de lo normal para una sala, la sala blanca sus ojos cansados, mejor dicho sus ojos se cerraron y al abrirlos a la fuerza se encontró con al parecer un cielo algo inusual.
-esto dónde se ubica acaso es....- mientras mental mente repasaba los escenarios conocidos en su cabeza no concordaba ninguna.
Por lo que no coincidía con el techo blanco de la sala blanca o las paredes de la sala blanca, sino una alegre y bulliciosa en su alrededor con toques más antiguo algo medieval.
Para ser Japón o ser otro país en la época.
La voz que surgió en su lado fue--significa que... ¿¡Me transportaron a un mundo paralelo!?--
mientras el grito se extendió en medio de esta tal parece una plaza.
Takuya Yagami lo analizo y estaba claro que esa vestimenta no concordaba con la época saliendo muchas conclusiones en su cabeza este es otro igual a su situación, ser una persona loca y mucho más .
Mientras se daba cuenta que su presencia no concuerda con los de aquí, lo agarro al joven para entablar un a conversación.
Mientras más miraba a su alrededor gente con rasgos animales caminando por las calles como si fuera normal se le hacía más extraño al punto de preguntarse de un escenario así como era posible ya estaba teniendo una idea pero no lo convencía.
---t..u tu me invicaste...--- decía el chico vestido con un chandal con rayas naranja o de forma deportiva anque ver su estado estaba claro que no asistía a clases por la forma de comunicarse.
--es..pera quien eres tu-- la voz sonaba muy sincera como de asombro para el muchacho pelinegro.
--No lo sé. Creo que me perdí en el camino.---
Subaru se rió, una risa que parecía sincera, pero Takuya estaba acostumbrado a que las cosas nunca fueran tan simples. La forma de hablar del joven, sus gestos, su modo de vestir, todo parecía muy sincera pero devia observarlo.
No lo jugaría rápido pero para takuya este individuo era más uno fácil de tratar a simple vista, no se confiaría rápido está vez.
Al callejón que se ubicaron estaba tranquilo, lejos del bullicio de la plaza principal. Era un lugar discreto, ideal para que ambos extraños intercambiaron palabras sin el escrutinio de miradas curiosas.
Sabes amigo es algo vergonzoso ni siquiera sé tu nombre. Yo soy Subaru Natsuki. —Se señaló con el pulgar, luciendo una sonrisa amistosa—. Un chico común y corriente que estaba en el lugar equivocado en el momento equivocado.
Takuya lo observo con detalle, notando la informalidad en su tono y el modo despreocupado que se presentaba el chico llamado Natsuki Subaru,era transparente, tal vez demasiado para su propio bien.
Un gusto conocerte, Natsuki-san —respondió Yagami con una leve inclinación de cabeza, su voz suave y perfectamente modulada. Su expresión era cálida, casi desarmante—. Mi nombre es Takuya Yagami. —Hizo una pausa, como si eligiera cuidadosamente sus palabras Antes de continuar—. Soy… bueno, un estudiante destacado de una escuela bastante exigente. Algunos incluso me consideran un líder entre mis compañeros, aunque no lo veo como algo tan impresionante.
Mientras pensaba en como presentarse antes un senpai por lo obvio que era la apariencia de Natsuki anque aparentemente es alguien que se ejercita para un estudiante sería decir menos si no fuera así pensaría que es alguien vago.
Subaru arqueó una ceja, sorprendido por la humildad aparente en el tono de Yagami.
—¿Líder, eh? Suena impresionante para mí. ¿Qué clase de escuela era? —preguntó Subaru con genuina curiosidad.
—Era una escuela... especializada. Nos enseñaban a sobresalir en todo lo que hiciéramos, desde lo académico hasta lo físico. Digamos que la competencia era feroz. —Su tono era tranquilo, casi melancólico, como si intentara transmitir una mezcla de nostalgia y humildad.
Enserio ya pide mucha información pero solo lo desviare o no diré mucho completó en su mente, manteniendo esos pensamientos ocultos tras su sonrisa.
Subaru asintió lentamente, impresionado por lo mencionado.
—Vaya, yo no era tan impresionante en la escuela. Apenas lograba aprobar los exámenes, y ni hablemos de deportes. —Soltó una carcajada ligera, aunque con un toque de autodesprecio que no pasó desapercibido para Yagami.
Este chico es increíblemente franco con sus debilidades, pensó Yagami, casi desconcertado. ¿Es un intento de ganar simpatía o simplemente carece de orgullo?
Anque antes de seguir con su conversación de ambos.
----¡Por fin llegaste! Chica guapa que me invocó...---antes de que se borrará la sonrisa de Subaru al notar otras tres presencias que no formaban el aspecto de una chica.
El más bajo respondió con molestia--qué tanto dices---mientras su compañero el de aspecto sombrío y mal vestido se metió.
--Si no quieren ser lastimados suelten todo lo que tenga--lo decía amenazante acercándose poco a poco a ellos.
Subaru frunciendo el ceño da un paso adelante como queriendo enfrentarlos.
-no creo que tengamos nada que les interese.-
El hombre delgado chasqueó la lengua, dejando ver una chispa de burla en su mirada.
—No seas modesto, chico. Esas ropas, esos zapatos… algo valdrán. Y tú, —añadió, señalando a Yagami—, pareces alguien importante. Tal vez tengas algo más escondido.
Yagami, que hasta ahora había estado observando en silencio, finalmente dio un paso al frente, interponiéndose entre Subaru y los ladrones. Su expresión seguía siendo calmada, casi despreocupada, y su voz resonó con una gentileza desconcertante.
—¿Importante, dices? —preguntó, inclinando la cabeza ligeramente—. Bueno, creo que es un poco pronto para hacer ese juicio, ¿no? ¿Por qué no hablamos antes de sacar conclusiones apresuradas?
Subaru lo miró con incredulidad.
—¿Hablar? ¿En serio? ¡Estos tipos claramente quieren robarnos! —susurró, aunque lo suficientemente alto como para que lo escucharan.
El hombre pequeño soltó una carcajada, mientras el musculoso simplemente gruñía.
—¿Ves? Este chico lo entiende —dijo el hombre bajo, señalando a Subaru.
Pero Yagami no se inmutó. Sus ojos se fijaron en el hombre delgado, el aparente líder. Él es quien toma las decisiones. Los otros dos lo siguen. Si puedo manipularlo, esto podría resolverse sin necesidad de pelear, pensó.
—Robar es una palabra tan... drástica —continuó Yagami, su tono suave y casi amistoso—. Estoy seguro de que ustedes son hombres razonables. Tal vez podamos encontrar una solución que nos beneficie a todos.
El líder arqueó una ceja, intrigado por la tranquilidad de Yagami.
—¿Una solución, eh? —preguntó, cruzando los brazos—. ¿Qué tienes en mente?
Subaru, que había estado observando con creciente nerviosismo, dio un paso adelante.
—¿Qué estás haciendo, Yagami? ¡No podemos negociar con estos tipos! ¡Además solo son matones como en los videojuegos!—dijo, mirando al grupo con desconfianza.
—Confía en mí, Subaru-san —respondió Yagami, girando levemente la cabeza hacia él, sin apartar la mirada del líder. Su voz estaba cargada de una autoridad sutil pero inquebrantable—. A veces, las palabras son más poderosas que los puños.
El líder soltó un suspiro exagerado.
—Está bien, listo para escuchar tu gran idea. Pero si no me gusta, mi amigo aquí —señaló al gigante— se asegurará de que lo sientas.
Yagami sonrió ligeramente, como si no tomara la amenaza en serio.
—Entendido. Pero primero, permíteme hacerte una pregunta: ¿realmente vale la pena arriesgar tanto por lo que tenemos? —dijo, señalando sus ropas con un gesto elegante—. Subaru y yo acabamos de llegar a este lugar, y créeme, no cargamos nada de valor real. —Su tono era calmado pero convincente, diseñado para sembrar dudas en el líder.
El delgado frunció el ceño, claramente evaluando las palabras de Yagami. Esto no es mentira del todo, pero tampoco la verdad completa, pensó Yagami. Siempre es más fácil persuadir cuando hay una base de verdad.
—Además —continuó, dando un paso hacia adelante con las manos levantadas en un gesto de paz—, si de verdad estamos tan mal equipados, ¿no sería más inteligente dejarnos ir? Al final, un enfrentamiento aquí podría atraer atención no deseada. Y estoy seguro de que no querrán problemas con la guardia local.
El musculoso gruñó nuevamente, pero el líder levantó una mano, indicándole que se detuviera. Su mirada se encontró con la de Yagami, buscando algún signo de debilidad. Sin embargo, todo lo que vio fue confianza inquebrantable.
Finalmente, el líder resopló.
—Tienes suerte de que no estemos de humor para lidiar con la guardia hoy. Pero la próxima vez, no habrá charlas. —Hizo un gesto a sus compañeros, y los tres se alejaron, desapareciendo en las sombras del callejón.
Subaru exhaló un suspiro de alivio, pero no pudo evitar mirar a Yagami con incredulidad.
—¿Cómo demonios lograste eso? ¿Y por qué estabas tan tranquilo? Pensé que estábamos acabados.
Yagami giró hacia él, ajustándose la chaqueta con una sonrisa serena.
—En situaciones como esta, mantener la calma y apelar al razonamiento siempre será más efectivo que recurrir a la fuerza. —Luego, sus ojos brillaron con una pizca de malicia oculta—completando en sus pensamientos la frace Además, un poco de actuación nunca está de más.
Subaru lo miró en silencio por un momento antes de soltar una risa nerviosa.
—Eres un tipo raro, Yagami. Pero tengo que admitir que funcionó. Gracias por eso.
Yagami asintió cortésmente, aunque en su mente ya estaba analizando cada detalle del encuentro. Esto solo confirma que necesito más información sobre este mundo. No puedo depender solo de la persuasión todo el tiempo. Pero, por ahora, esto es suficiente.
Antes de poder descansar de lo que pasó desde el otro extremo del callejón, una figura ágil y menuda pasó corriendo que brillaba en su mano un color carmesí en su mano.
—¡Retírense! —gritó la joven mientras escalaba con destreza el muro que bloqueaba el callejón, desapareciendo en segundos por encima de él.
Subaru la miró boquiabierto.
—¿Viste eso? ¡Fue como una ninja o algo así!
Yagami, en cambio, frunció el ceño, observando el lugar por donde había escapado la misteriosa chica.
—Esa reacción… No es normal que alguien huya así a menos que tenga algo que esconder.
Antes de que pudieran procesar lo ocurrido, apareció una figura al otro lado del callejón, claramente en busca de algo —o alguien.
—¡Deténganse! —exclamó una voz femenina, clara y firme. Una joven de cabello plateado y apariencia etérea apareció corriendo, con una mirada decidida. Sus ojos de color diamante morado se posaron en los dos jóvenes.
La chica, ahora algo menos tensa, los observó con más detalle antes de hablar.
—Disculpen, pero necesito saber si han visto a alguYagami, manteniendo su expresión tranquila, dio un paso adelante.
—Si se refiere a una joven rubia y ágil, pasó por aquí hace unos momentos —dijo, señalando el muro por el que Felt había escapado—. Subió y se marchó en esa direcciónien pasar por aquí. Es muy importante.
La chica pareció aliviada al principio, pero su rostro pronto se oscureció.
—Eso significa que… ¿ella tiene mi insignia?
—¿Insignia? —preguntó Subaru, inclinando la cabeza.
Antes de que ella pudiera responder, el pequeño espíritu flotante se acercó juguetonamente a Subaru, girando a su alrededor.
—Es un objeto muy importante para Lia. Si no lo recuperamos, habrá problemas… ¿verdad, Lia?
La chica, visiblemente incómoda con la atención, asintió.
—De todos modos, no podemos quedarnos aquí. Necesitamos encontrar a esa chica y recuperar la insignia.
Subaru dio un paso adelante, con una sonrisa decidida.
—Entonces, ¡déjanos ayudarte!
—¿Por qué? —preguntó la chica de pelo plateado, sorprendida.
—Porque es lo correcto —respondió Subaru con una simplicidad desarmante—. No puedo quedarme de brazos cruzados cuando alguien necesita ayuda.l
La chica lo miró en silencio, sus ojos reflejando una mezcla de sorpresa y confusión ante la sinceridad de Subaru. Finalmente, Puck rompió el momento con una risa suave.
—¡Qué chico tan peculiar! Lia, creo que puedes confiar en él.
La chica suspiró y asintió.
—Está bien, pero ten cuidado.
Yagami, que había permanecido en silencio, decidió intervenir.
—Si no te importa, me gustaría unirme. Cuatro cabezas piensan mejor que dos, y parece que esta búsqueda no será fácil.
La chica llamada lía lo observó con cierta desconfianza, pero la lógica de sus palabras era clara. Además, había algo en su porte y tono que inspiraba confianza, aunque no pudiera explicarlo.
—De acuerdo, pero les advierto: no podemos perder tiempo.
—Entendido —respondió Yagami, con su característica sonrisa tranquila.
Subaru, emocionado por la oportunidad de seguir a la chica, alzó un puño en señal de determinación.
—¡Entonces pongámonos manos a la obra!
Mientras los tres se alejaban, Yagami no pudo evitar reflexionar sobre sus nuevos compañeros. Subaru actúa por puro instinto y emoción. Emilia parece desconfiada, pero eso es natural considerando la importancia de lo que perdió.
La chica lía no se presento anque la ropa que lleva puesta mostraba cierto estatus si hablamos de términos de este mundo que no vió a gente vestido así con esa ropa si era noble entonces le daría ideas de como progresar en este mundo no ayudaba por caridad sino pediría algo después ayudarla y la otra parte no se negaría.
El grupo caminaba por las calles de Lugunica en busca de pistas sobre la ladrona. Las voces de los comerciantes y el bullicio de los transeúntes llenaban el aire, haciendo que la búsqueda fuera aún más complicada. Yagami se mantenía atento a cada detalle, mientras Subaru seguía a la chica de pelo plateado claramente más interesado en su presencia que en la misión.
A mitad del recorrido, un sonido suave llamó la atención de lía .Giró la cabeza hacia un rincón cercano y vio a una niña de cabello verde corto, de pie junto a un puesto de frutas. Su rostro mostraba miedo y apunto de los llantos.
—Oh no, parece que está perdida deberíamos ayudarla—dijo lia con preocupación.
Subaru, al escuchar esto, alzó una ceja.
—¿En serio? ¿Ayudarla? No es que no me importe, pero… ¿y tu insignia? Esto podría hacernos perder tiempo valioso.
Lía lo miró con un leve fruncimiento de ceño, claramente decepcionada.
—Si no quieres ayudar, está bien. Pero yo no puedo ignorar a alguien que necesita ayuda.
—No es eso, solo… —Subaru dudó, rascándose la cabeza mientras buscaba las palabras correctas.
Antes de que la conversación se intensificara, Yagami intervino, con su tono habitual calmado.
—Subaru tiene un punto válido sobre el tiempo, pero lía -san también tiene razón. Si ayudamos a la niña ahora, no solo hacemos lo correcto, sino que también podríamos obtener información útil de alguien más. Después de todo, estamos en una ciudad llena de ojos y oídos.
Emilia asintió, agradecida por el apoyo de Yagami. Subaru, aunque un poco molesto, suspiró y levantó las manos en señal de rendición.
—Está bien, está bien. Pero si esto nos mete en problemas, no digan que no lo advertí.
Emilia se acercó con cuidado, inclinándose ligeramente hacia la niña.
—Hola, pequeña. ¿Estás bien?
La niña levantó la mirada, feliz al principio, pero la apariencia de lía pareció asustarla y empezo a llorar.
Antes de que se altere más la niña Subaru interviene--lo que tenemos aqui es una moneda antigua de 10 yenes.
-- ahora lo sostendré con fuerza . Mientras hacia lo que decía repitiendo cada vez .
-fuerte,fuerte,fuerte,fuerte.... Y ahora que sorpresa . La mano de Natsuki estaba vacia y mostrando un sonrisa ingenua.poniendo su mano en su cabeza.
-- y aqui se escondía la moneda- ¡Ha! Mirándolo si se podía quedar con el objeto.puedes quedarte lo dijo Subaru mientras la niña agradecía
—Bueno, vamos a buscar a tu mamá. Pero primero, ¿recuerdas dónde la viste por última vez? —preguntó Yagami, manteniendo su tono amable.
Subaru hablo -Está chica y yo y mi amigo te ayudaremos a buscar a tu mamá
Al hacer esto ... La gente pensaría que somos una pareja con su hija ¿No?. Que vergüenza
Lía respondió - a lo mucho nos veríamos como su hermano mayor.
—¡¿Hermano mayor?! Pero, lía -tan, no tengo pinta de ser tan viejo. ¿Cuántos años crees que tengo?
—Quizá veinte… —respondió Emilia, con una sonrisa traviesa.
—¡Ay, me has herido en el alma! ¡Soy un joven adolescente lleno de energía y sueños! —protestó Subaru, mientras lía reía suavemente.
Yagami, que había estado observando en silencio, sacudió la cabeza ligeramente. Es interesante cómo Subaru parece adaptarse a cualquier situación con un optimismo irreal. Lía, en cambio, tiene una forma sutil pero efectiva de calmar tensiones. Definitivamente puedo aprender algo de ambos mientras evaluo este mundo.
La niña giró rápidamente hacia el sonido y vio a una mujer con cabello verde corriendo hacia ella.
—¡Mamá! —gritó
La madre la atrapó en un abrazo apretado, lágrimas de alivio cayendo por su rostro. Lia observó la escena con satisfacción, mientras Subaru se cruzaba de brazos, murmurando algo sobre "hacer una buena acción del día".
Yagami, mientras tanto, observó a lia con más interés que antes. Tiene un fuerte sentido de la justicia, pero no parece hacerlo por reconocimiento. Es genuina… algo que será útil para sus planes.
Gracias, muchas gracias por encontrar a mi hija —dijo la mujer, inclinándose profundamente ante el grupo.
—No fue nada —respondió Emilia con una sonrisa gentil.
Subaru, incapaz de resistirse, señaló hacia sí mismo con un pulgar.
—¡Puedes agradecerme especialmente a mí!
Yagami rodó los ojos discretamente mientras el grupo se preparaba para continuar con su búsqueda, ahora más motivados que nunca.
Mientras estaban en la terraza los 4,subaru recostado hablo
-estaba seguro, pero es una ciudad grande... Par encontrar a alguien tan pequeña.
Mientras lía miraba al horizonte --es la capital de lugunica ¿Ni siquiera sabes eso? Puk interrumpió Eh... Cierto no nos presentamos.
Puk respondí otra vez
-¿-lo hacemos?
-Cierto entonces me presentaré
Soy Natsuki Subaru ... No sé nada y no tengo dónde caer muerto mucho gusto dándole la mano Y este tipo serio es mi compañero de aventuras, Takuya Yagami.
Yagami asintió con cortesía.
—Un gusto conocerte, lía así te llama tu ¿amigo?
La chica, visiblemente incómoda con la atención, asintió.
—Sí. Lo siento, no me he presentado. Mi nombre es Emilia solo Emilia, y este es Puck.
--Subaru básicamente desperdicias tu vida ,¿verdad?
Subaru con un rostro afligido estaba--eres la última que quiero que me digas eso.
--pero no eres un mal chico
--¿y por qué me trates como si fuera menor? Dudo que me lleves con más años.
Antes de que esto valla a mal y peor takuya Yagami interviene continúan la búsqueda anque en susurro le dice Subaru algo que es inaudible para emilia .
El grito de la niña se escucho cuando estaban serca de un puesto de frutas --¡Señor!
La madre de la niña vuelve a agredecer cuando vio a los chicos los vio raro hasta la niña se acerco y le regalo algo a emilia un broche de flor
-aceptelo porfavor es su forma de agradecer -comento la madre para que acepte .
-gracias
Emilia se puso el broche en su lado izquierdo mientras escucharon un ronquido serca era el dueño de frutas.
-ayudaron a mi hija así que quiero agradecerles que quieren un par de mancenes puenden llevarse cualquier fruta .
Mientras hablaban sobre que querían información y se las dió.
Llegando el atardecer en el cielo el aire la atmósfera y la actitud de esta gente es terrible.
--Es seguro que es aquí
Recordando lo que nos dijo el dueño de frutas.
-debe ser está felt pequeña rubia muy agil¿No? Es conocida en los barrios bajos pero no se dónde vive.
-talvez si preguntamos nos los diga .
Antes de que hablarán takuya le pregunto a Subaru.
--subaru -san que es lo que tienes en la bolsa algo que nos ayude para la idea de¿ Emilia?
Mientras revisaba la bolsa saco la bolsa de papas que no conocía emilia como puk y takuya mirándolo y tomándolo takuya.
--buena idea emilia ahora verán como consigo información...
--ah enserio takuya-san ¡muchas gracias!
Mientras Subaru volteaba los ojos con enojo por usar sus cosas y no recibir un alago.
--Hola muchacho , me presento soy un comerciante quería preguntar dónde se encuentra una chica llamada felt.
Antes de que el chico se fuera takuya le exclamó
-obvio que no será gratis sabes este es un producto que se está lanzado no te gustaría probarlo, ese será el pago.
Abriendo la bolsa de papas y el chico arrebatándole probando antes de otra cosa.
---mhmhm... Está delicioso hermano mayor,Bueno no se dónde vive felt pero se dodne para frecuentemente en basar del gigante rom mhm..
Con una sonrisa tranquila takuya volvió a reformar la pregunta.
--Y se puede saber dónde se encuentra el basar de ese gigante rom.
--Bueno vas recto en dos calles y luego doblas esquina y sigues recto y a ahí encontrarás el basar.
Al volver ve que falta alguien y es un espíritu es puk. -- que paso con puk.
Antes de que respondiera emilia Subaru le dice -- es como un funcionario de 9 a 5 es es la hora.
Mientras avanzaba takuya Yagami sabe que tendrán que buscar dinero y pregunta a emilia
--yo no traigo nada en este momento ¡acaso tengo que pagar para recuperar algo que es mío!
-- bueno bueno no las arreglamos con lo que tiene Subaru...
--¡Ha! Y por qué mis cosas mías ...
Emilia con cierta tristeza dice está bien
-- si no quieres está bien
Se da cuenta de que emilia está un poco triste y se arrepiente-- bueno no importa si es par ayudarte.
Llegando se está apunto de oscurecer y se encuentra con lo que párese ser el basar y al entrar subaru por impulso.
--Espera... Subaru... No te lo tomes a mal pero no es muy seguro ir así ...
--Bueno solo déjamelo a mi .. emilia -tan ...
-eso... Bien ¡Esfuérzate Subaru!
Una sonrisa salio de Subaru cuando entro con su teléfono aprendiendo la luz y buscando y piso algo una sustancia...
-¿Sangr....e?
Cada segundo le costaba respirar mientras escuchaba algo llamado era takuya-san preguntándole que si todo estaba bien
Mientras en su oído escucho una voz desconocida una de una chica.
--que remedio es mala suerte están en el lugar equivocado en el momento equivocado.
En ese momento salí volando algo lo avía golpeado.
--duele...
Mirando su estómago el producto del dolor vio que estaba chorreando sin entender.
--rayos...¿ Es esta mi sangre?
Mientras gomitaba sangre y se tapaba la boca
Esto es malo...muy malo...
Mientras entraba emilia y takuya quería gritar pero no podía advertí lo pero antes de ver vio a takuya-san enfrentando a la figura negra.
Mientras miraba tenía sentimientos encontrados no quería morir.
--no quiero....ese resultado...yo quiero salvarlos...
--No lo sé. Creo que me perdí en el camino.---
-- ¡ha!¡Ha!
---¿Estás bien amigo? Mientras la mirada está extraño de takuya Yagami
---¿Que sucede? ¿No era de noche hace momento?.
Mientras revisaba su estómago mirando de Serca algo que se ganó una mirada extraña de takuya que lo miro con un sudor en la cara.
Mientras recordaba los eventos pasados.
--¡ah! emilia tan está en peligro vamos takuya san .
Takuya Yagami lo miro está vez con una cara sería
-Cómo sabes mi nombre¿amigo? Acaso tú eres un. Peon de alguien? Para quien trabajas amigo si me lo dices no pasará nada.
-- no juegues así takuya san no hay tiempo de bromas emilia esta n peligro...
Anque mostraba una sonrisa lo miraba más serio.
-quien es esta tal emilia es la que orquesto esto que interesante.