—Su majestad, los materiales de construcción ya han sido cargados en los camiones... y los trabajadores y yo estamos listos para partir —dijo Tim emocionado.
Se sentía como si hoy fuera su cumpleaños.
Por lo general, solo ayudaba en las obras de construcción de vez en cuando.
Pero esta vez, estaría involucrado durante todo el proceso.
¿Cómo no iba a estar emocionado?
Antes de la llegada de Landon a Baymard, siempre había sido una persona fascinada por crear cosas en su taller de herrería... así como ayudar a la gente a construir sus casas.
Así que cuando se convirtió en supervisor, no tuvo tiempo de embarcarse en un proyecto de construcción completo por su cuenta.
Pero ahora, su majestad le había dado la oportunidad de hacerlo.
La emoción y el entusiasmo se reflejaban en el rostro de Tim, mientras miraba apresuradamente el plan de diseño que Landon le había dado ayer.
En realidad, estaba completamente maravillado por el meticuloso diseño de Landon.
