—¿Cómo?... Ya eran las 11:30 p. m... ¿quién podría venir aquí a esta hora de la noche?... ¿Y a qué distancia están de las puertas? —preguntó.
—Respondiendo al anfitrión, el intruso parece estar cargando muchas armas y está lleno de intención de matar... Acaba de dejar su caballo a 2 km de la puerta y llegará al perímetro de Baymard en 26 minutos —informó el ayudante.
—Así que es un asesino, ¿eh? —murmuró para sí.
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Dumbo había estado muy molesto estas últimas semanas.
Como un asesino de élite, sus presas de asesinato siempre eran importantes ministros, nobles, pandillas de sangre, caballeros y otras figuras nobles...
Pero enviarlo a matar a un niño débil y desheredado, que ni siquiera tenía bajo su mando hasta cuatrocientos caballeros... era el colmo del desprecio.
Incluso pagaron una suma considerable por la cabeza del maldito crío. O tenían demasiado dinero, o este era su primer pedido de asesinato... Al menos eso es lo que pensaba Dumbo.
—¿Acaso no sabían quién era él?
Era el quinto mejor asesino del imperio. De millones de personas, él era el quinto. Había sido entrenado y educado correctamente por un exasesino... Conocía todos los trucos y maneras de matar, torturar a la gente.
Nunca había fallado en ninguna misión que se le asignara.
¿Que un señor de Ciudad de una ciudad insignificante lo llamara y se atreviera a insultarlo así?... Esta era la forma más alta de desprecio que había recibido como asesino.
Era una regla no escrita que solo aceptaría misiones desafiantes y peligrosas...
—¿Cómo era esta una de esas misiones?
Había usado casi 2 meses para llegar aquí de prisa y hacer el trabajo.
Ni siquiera ponía a Landon en sus ojos, por eso decidió que mataría a un guardia de patrulla, cambiaría de ropa, para poder colarse en Baymard.
Pero lo que Dumbo no sabía era que a los ojos del Barón Rogers, su misión era mortal. Si el rey se enteraba de lo que había hecho mientras estaba en Baymard, solo la muerte le esperaba a él y a su familia.
Había tomado la decisión de que después de matar a Landon, también mataría al Señor de la Ciudad Shannon y al Barón Rogers. Este era su castigo por haber insultado gravemente su dignidad.
De la información que le dieron y de lo que había recopilado, se decía que Baymard no tenía ninguna amenaza potencial para él.
Había oído que todos los soldados eran los peores del imperio, y que Landon estaba postrado en cama con enfermedad.
Mucha gente testificó que cuando salió de la Capital, su tez estaba tan pálida y azul que uno podía sentir la muerte llamándolo.
Por lo que había recopilado, su única amenaza sería el Comandante Lucio.
Nadie sabía realmente por qué el Comandante había dejado su puesto en la Capital... algunos afirmaban que era el padre biológico de Landon, mientras que otros decían que fue despedido por acciones ilícitas con la madre de Landon.
Así que, en general, todo lo que sabía sobre esta misión realmente le molestaba... Parecía un aburrimiento.
—Qué pérdida de tiempo —pensó.
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Dumbo caminaba sigilosamente por el perímetro del bosque, ya que no se atrevía a adentrarse más en él.
Sería gracioso si, de repente, fuera atacado por animales salvajes mientras estaba en una misión.
Solo quedaban 7 minutos antes de que pudiera alcanzar los campos vacíos.
En realidad, al frente de la puerta había un gran campo vacío que se asemejaba a un gran campo de fútbol. El bosque solo comenzaba después del campo.
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Como la noche era negra como el carbón, Dumbo había planeado arrastrarse a través del campo hasta estar cerca de uno de los guardias de patrulla. Entonces, haría su movimiento.
De repente,
—Theh theh theh —3 cuchillas lo atacaron por detrás.
Con su entrenamiento, pudo sentir fácilmente la intención de matar de las cuchillas. Rápidamente esquivó las dos primeras, pero la última lo golpeó en su mejilla izquierda.
—Ahhh —lamentó seriamente haber esquivado de la manera en que lo hizo. ¿Cómo iba a sentarse ahora? ¿Y quién diablos lo atacó?
De nuevo, escuchó no menos de 50 armas viniendo directamente hacia él desde todos los ángulos.
Estaba impactado.
¿Acaso el príncipe desterrado tenía una poderosa fuerza que lo respaldaba?
Dumbo intentó esquivarlas pero fue en vano, más de 12 de esos cuchillos atravesaron su cuerpo violentamente.
—¿Q... quién eres? —preguntó Dumbo.
—Quién soy, no es importante... lo importante es que estás tratando de quitarme mi presa —una vez que Dumbo escuchó eso, se sorprendió y se enojó de que esos idiotas nobles también hubieran contratado a otra persona.
Cerró los ojos y deseó poder estrangularlos hasta la muerte.
Juró en su corazón que si salía finalmente de este lugar, los mataría y bailaría sobre sus tumbas.
Landon hablaba a través del sistema, mientras estaba acostado en su cama.
Dumbo intentó encontrar la ubicación de la voz... y cuando pensó que la tenía, lanzó cuchillos hacia el lugar, y Landon inmediatamente fingió estar herido.
—¿Cómo te atreves a golpear mi rodilla y cintura? —dijo Landon, fingiendo estar herido.
—Jajaja te lo mereces...
—Maldito seas... Te perdonaré la vida y te dejaré esta misión entonces... Espero que nunca crucemos caminos de nuevo... o seguro tomaré mi venganza —dijo Landon mientras fingía estar gravemente herido.
Casi quería darse a sí mismo un Óscar por su actuación.
Mientras Dumbo se concentraba en el hombre en las sombras, no logró sentir cómo las ramas de los árboles se movían lentamente alrededor de sus botas.
Cuando quiso finalmente moverse, sintió algo tirando de su pierna.
Mientras más tiraba, más fuerte se agarraban las enredaderas a él. Y finalmente, su cuerpo quedó todo cubierto por las enredaderas.
Después de 45 minutos de lucha, el miedo se apoderó de su corazón y decidió gritar.
La tasa a la que la planta lo estaba asfixiando y atando, era demasiado aterradora.
Era mejor morir a manos de cualquier hombre, ya sea débil o fuerte, que por una planta. ¿Cómo podría estar contento con ese tipo de muerte como asesino?
Al menos si era capturado, habría una posibilidad de que pudiera escapar.
45 minutos después, Josh llamó a la puerta de Landon
—Mi rey, hemos atrapado a un asesino
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