Chu Mo levantó su taza de café y tomó un sorbo suave. En ese momento, su mente también comenzó a acelerarse rápidamente. El asunto relacionado con Wu Yaoming, el hijo mayor de la familia Wu, no podía prolongarse indefinidamente; de lo contrario, sería como una bomba de tiempo a su lado. Lo mejor sería resolverlo pronto y tranquilizar la mente.
Mientras Chu Mo contemplaba seriamente, la mujer frente a él sacó nuevamente un contrato. Lo colocó suavemente frente a Chu Mo, con ojos llenos de seducción.
—Señor Chu, esto es una pequeña muestra de nuestro aprecio. Me pregunto si cumple con su satisfacción —dijo ella.
La mujer colocó otro contrato frente a sus ojos, y Chu Mo lo miró, entrecerrando ligeramente los ojos.
Boeing 737.
80 millones de dólares estadounidenses.
Convertido en RMB, eso son casi quinientos millones.
Este era un gesto importante.