—¡Iré contigo! —dijo Liu Yu Tong inmediatamente. Ella naturalmente sabría qué tipo de lugar era el Pabellón Cuidado de la Flor—un establecimiento para derrochar dinero para hombres. ¿Cómo podría dejar ir a Ling Han sin preocuparse?
Fue solo ahora que Yun Shuang Shuang se volvió a mirar a Liu Yu Tong, hizo una leve reverencia y dijo —Así que es la princesa del Clan Liu. Shuang Shuang ha sido descortés.
Liu Yu Tong se veía un poco incómoda al ser así llamada porque no conocía a Yun Shuang Shuang. Sin embargo, en sus ojos, todas las chicas que venían del Pabellón Cuidado de la Flor eran insufriblemente sucias y no personajes que ella se dignaría conocer de todos modos. Además, Yun Shuang Shuang pretendía arrastrar a Ling Han a jugar a ese tipo de lugar, lo que aumentaría aún más su antipatía.
Por lo tanto, solo asintió reservadamente y ni siquiera le correspondió con una respuesta cortés.
