—No hace falta —Wang Zhou sacudió la cabeza—. Matarlo dentro de la Capital Imperial es complicado de explicar.
Después de todo, esta era la Capital Imperial del Imperio del Dragón Divino.
Además, Yang Xiaotian tenía a su lado un Dragón de Inundación del Reino Emperador, lo que causaría demasiada alteración si actuaran.
—Esperaremos hasta que termine el Concurso de Farmacéuticos del Imperio. Eventualmente tendrá que dejar la Capital Imperial; entonces podremos matarlo sin prisa.
Después de gestionar los trámites en la asamblea comercial, Yang Xiaotian y los demás, sosteniendo la placa de jade de la Residencia del Dragón Azur, llegaron a la Residencia del Dragón Azur.
Observando la magnífica Residencia del Dragón Azur ante ellos, todos apenas podían ocultar su asombro.
Yang Xiaotian usó la placa de jade para abrir la Residencia del Dragón Azur. Cuando todos entraron, una suave brisa de energía espiritual acarició sus rostros, refrescando sus espíritus.