Kent estaba frente a Mohini, quien tenía la forma de una anciana, sintiendo un profundo agradecimiento en su interior. Con una postura respetuosa, Kent se inclinó ante la anciana y dijo —Gracias por todo, señora. Realmente no sé cómo devolverle el favor.
Mohini, siendo la anciana, sonrió ante sus palabras —No seas sentimental. Lo que hice fue simplemente dejar pasar el tiempo. Así que, deja de aburrirme con tus palabras emocionales —dijo Mohini con tono despreocupado. Pero por dentro, estaba sonriendo felizmente.
Kent se enderezó, encontrando la mirada de ella con sinceridad —Como estoy retrasado, debo irme ahora. Si nos encontramos la próxima vez, definitivamente la invitaré a una gran comida, señora —dijo Kent mientras se preparaba para montar el Kirin de Fuego.
Mohini desestimó sus palabras con una risa modesta —Oh, no fue nada. Cuídate en tu viaje, y no avergüences a esta señora perdiendo la competición.