El grupo se adentró en el cristal. Las sombras que agitaban su superficie se volvieron vivientes, atacándolos con una ferocidad inhumana. Kaneki liberó su kagune, destrozando a los enemigos, mientras Goku, en su forma Super Saiyajin Blue, desintegraba hordas con facilidad.
Pero lo más difícil llegó cuando alcanzaron el centro del cristal. Una figura oscura apareció frente a ellos: Erebus, el guardián del corazón del cristal.
"¿Creen que pueden robarme lo que custodio? Si tanto desean regresar a su amigo, tendrán que enfrentarse a lo peor de ustedes mismos."
Las sombras comenzaron a tomar forma, transformándose en versiones distorsionadas de Naruto, Luffy y Kaneki. Sus voces eran crueles, recordándoles todos sus fracasos.
"¿Crees que puedes salvarme, Luffy? Todo lo que haces es fallar", susurró la sombra de Naruto.
Kaneki tembló cuando su propia sombra lo encaró. "Tú no mereces vivir, Kaneki. Solo traes sufrimiento a los demás."
Goku también fue atacado, su sombra burlándose de su eterno optimismo. Pero su determinación no flaqueó.
"¡No somos esas sombras!" gritó Goku, aumentando su ki hasta romper el suelo. "Y no dejaremos que nos detengan."
Con un último esfuerzo, el grupo destruyó las sombras y logró extraer el Corazón del Cristal de Erebus. Pero esta era solo la primera prueba.