La voz del asistente sonaba como un cubo de agua helada, y antes de que la chica pudiera reaccionar, ya había tomado una acción directa.
La ropa de verano consistía en una falda delgada y, con un sonido de "hisss", la falda de la chica se rasgó instantáneamente por la mitad, revelando su ropa interior y bragas.
—¡Ah! ¿Qué estás haciendo, qué estás haciendo...? —la chica gritó inmediatamente a todo pulmón, con las manos sujetando su pecho en un grito penetrante.
El asistente que tomó la acción lo hizo con gran fuerza, no solo rasgando la ropa de la chica sino también dejando una marca en su cuerpo. Aunque no sangró, se formó un chichón.
La multitud de espectadores se alborotó instantáneamente, la situación tomó un giro increíble, con varias personas incluso sacando sus teléfonos para comenzar a tomar fotos frenéticas.