Gale avanzaba por el largo corredor hacia la habitación de Long Xiurong con pasos algo inestables.
Por supuesto, cualquiera que viera al Rey de las Bestias en este momento, no pensaría que había algo malo en él. Todavía era majestuoso e intimidante. Incluso su paso 'inestable' aún se veía firme para ellos.
Desafortunadamente, solo Gale sabía cuán grave era el desamor que estaba experimentando actualmente. Intermitentemente detenía su paso por un segundo, antes de continuar su caminata hacia la habitación de Long Xiurong.
Dudaba constantemente, y su corazón gritaba, diciéndole que no debería castigar tan severamente a su amada. No debería haber dicho lo que le dijo, y simplemente debería haberla perdonado por todo el asunto.
Sin embargo, su mente y su orgullo le decían que estaba haciendo lo correcto. Si continuaba siendo indulgente con Swan, ella lo daría por sentado y pensaría que él era un hombre fácil que no se preocuparía incluso cuando lo traicionaban repetidamente.
