—No, soy plenamente consciente de la decisión que tomé —dijo Swan firmemente—. Santa Achate ya no tendrá una reina ni un rey soberanos. La estoy reduciendo a un estado vasallo del Reino de los Hombres Bestia. El nuevo y oficial Rey de Santa Achate será Gale Tormenta, el Rey Bestia. Organizaré a algunos bestiahombres capaces para manejar Santa Achate como cabeza del estado. La iglesia y el palacio trabajarían juntos bajo el gobierno de mi esposo también.
La proclama de Swan fue como un trueno en un cielo despejado para Aria y Anastasia.
Anastasia esperaba que Swan le diera una oportunidad a Aria, para que pudiera ser la Reina. Si Anastasia aún pudiera controlar a su hija desde detrás, no sería tan malo para ella dejar su posición.
Pero esto…
Anastasia no pudo contenerse más. Levantó la cabeza y no pudo controlar su expresión mientras espetaba, "¡Mocosa desagradecida! ¡No puedes hacernos esto! ¡He cuidado de ti desde que eras una bebé!"