Mabel no esperaba que esa fuera la reacción de Zuri. Había estado observando a esta mujer durante un tiempo, precisamente después de escuchar que Khaos había colaborado con Zuri para cerrar un trato. Sabía sobre su viaje a la ciudad de Lumicen y cómo logró conseguir diez barcos por menos de la mitad del precio original que los comerciantes habían cotizado.
Mabel realmente la admiraba hasta que se dio cuenta de que Khaos mostraba un interés extra en ella. Eso la alarmó.
—¿Traicionaste a las dos manadas porque querías estar con él? —Mabel estaba atónita, había estado preguntándose por qué Zuri haría eso a su propia manada, pero la respuesta que Zuri le dio estaba completamente más allá de sus expectativas.
—¡Sí! —respondió Zuri feliz, como si fuera algo de lo que debería enorgullecerse y pudo verlo, Mabel debe estar pensando que estaba loca en este momento.