—Howard estaba atónito y dijo sorprendido —Zoey, ya estás tan ocupada con la escuela. ¿Cómo puedes tener tiempo para trabajar en la empresa? Tienes que esperar hasta que te gradúes, al menos. No ahora. Es muy temprano.
Zoey ya esperaba esa respuesta.
A pesar de eso, no se desanimó. Continuó en un tono educado y sensato —Papá, lo digo porque veo lo cansado que estás. Pensaba que si hay algo con lo que pueda ayudarte, sería bueno.
—¿Qué podría hacer una niña pequeña como tú por mí? —Howard sacudió la cabeza con una sonrisa. Al momento siguiente, sin embargo, de repente pensó en algo y dijo con una expresión seria —De hecho, hay algo con lo que necesito que me ayudes, Zoey.
—¿Qué es? —ella preguntó.
