Dado que las condiciones en Villa Talford no eran muy buenas, Samuel no permitiría que su hermana y Zoey se quedaran en esas casas en ruinas. Como resultado, dio órdenes de construir una base durante la noche.
Aunque las casas estaban hechas de madera, había todo tipo de instalaciones en el interior. Había sofás de cuero, candelabros de cristal, sillas de alta clase, y más. Todo era increíblemente lujoso.
No parecía un evento de caridad, sino más bien unas vacaciones.
Los estudiantes estaban extremadamente emocionados. Comenzaron a colmar a Samuel de halagos.
—Oh Dios mío. El señor Samuel es tan generoso.
—Así es, así es. Todo es gracias a Zoey. Si no fuera por ella, no tendríamos una oportunidad tan buena ni condiciones de vida.
—Te envidio tanto. Tener un novio como el señor Gilbert debe ser tan bueno. Apuesto a que siempre estás feliz.