—¿A dónde se dirige el novio y con tanta prisa?
Lucien se volvió en el pasillo al escuchar la voz que menos quería oír en ese momento.
—Eduardo… —Lucien siseó mientras sus ojos encontraban los de su hermano.
—¿Vas a reunirte con Natalia? —Eduardo formuló su acertada suposición.
—Sí… —Lucien respondió sin emoción.
—¿Vas a decirle al fin? —preguntó Eduardo.
—Tú le dijiste algunas cosas, ya es hora de que yo también le diga algo —respondió Lucien sin vacilar.
—Pues, no envidio la situación en la que estás. Buena suerte, hermano —dijo Eduardo mientras se giraba para caminar en la dirección opuesta.
…