Después de que Yvette dijera eso, Lance no respondió.
Ella levantó la cabeza, y no había rastro de Lance.
—¡Él simplemente se fue así!
Yvette de repente se sintió desconsolada.
Estaba triste y decepcionada.
Esta escena le recordó a Yvette las veces que Lance la había dejado una y otra vez.
—¡Cómo pude... seguir teniendo expectativas por este hombre!
La cabeza de Yvette parecía haber sido rociada con agua fría. Se volvió lúcida mientras sonreía con sarcasmo.
«Yvette pensó, ¿por qué no aprendí del pasado?», pensó.
No debería esperar nada de él. Solo de esta manera puedo protegerme.
Justo cuando Yvette estaba a punto de darse la vuelta, escuchó un pitido desde afuera.
Una ventana del coche de lujo negro se bajó, revelando la guapa cara de Lance.
Lance la miró y dijo:
—Sube al coche.
Yvette no esperaba que él regresara.
Entonces, se fue a buscar el coche.
Yvette miró a Lance con sentimientos encontrados. Tomó su teléfono y se metió en el coche.