[Este capitulo puede herir la sensibilidad de algunos lectores,lea bajo su propia discrección]
Sentí mi consciencia siendo absorbida por un vortice negro,todo era oscuridad,no había luz,no podía escuchar nada ni sentir nada.
No estoy seguro de cuanto tiempo pasó, pero al final pude distinguir una vaga luz que se transformó lentamente en una imagen y cuando me dí cuenta estaba en una playa,enfrente mía estaba el mar,con barcas pequeñas atrancando en la orilla.
Pude distinguir claramente la forma de las personas,o mejor dicho,demonios que desenbordaron del barco.
No podía moverme,pero al parecer los demonios no podían verme,lo maximo que podía hacer era girar la cabeza.
Observé a los demonios y pude ver que uno destacaba notablemente,era muy extraño,pues su piel era gris ceniza en vez de roja como los otros demonios,sus cuernos eran notablemente más largos y por ultimo tenía una forma que parecía ser más...¿Humana?
Había leido que mientras más poderoso sea el demonio,su piel cambiaría de color y adoptaría una forma más humana,aunque no pensé que eso fuera cierto.
El demonio vestía una tunica marrón y portaba una espada larga en su espalda.
Con gran impetú,el demonio bajó del barco y miró alrededor.
"La tierra humana...nunca pensé que volvería a este sucio lugar"
Su voz era poderosa y tenia un matíz de desden en ella al hablar del reino humano.
"Asmodeus,¿A cuanto estamos de la ciudad humana más proxima?"
Un demonio más pequeño se posicionó al lado suyo,con un libro en su brazo.
Los ojos del demonio ahora conocido como Asmodeus brillaron de un color verde esmeralda durante unos segundos hasta que paró.
"Alrededor de 80 kilometros,Jefe"
"Perfecto"
El demonio grande se dió la vuelta para mirar a la gran armada de demonios,podía contar al menos cien de ellos.
"¡Muchachos,hoy es un gran día!"
Los demonios empezarón a mirarlo una vez que empezó su discurso.
"¡Hoy es el día en el que comienza la exterminación de esas cucarachas llamadas humanos!"
Una ola de vitores siguió a esa afirmación.
"¡Hace cientos de años perdimos porque no teniamos un lider que nos dirigiera!¡Ahora que lo tenemos,nada ni nadie nos detendrá!"
Otra ola de vitores estalló cuando dijo esas palabras.
'¿Así que ahora tienen un lider...? Por la manera en la que está hablando no parece que sea el mismo'
"Erm...perdoneme señor por tener que interrumpirle"
Un demonio bastante normal se acercó al jefe nerviosamente.
"¿Que quieres?"
Un tono de irritación se podía notar en su voz al haber sido interrumpido en medio de su discurso.
"N-no creo que debamos perder más tiempo aquí,no hay suficiente mana en el aire para alimentarnos a todos,deberíamos ir a un lugar con más mana..."
'¿Hm? Así que los demonios se alimentan de mana,y si no tienen,¿Mueren? Interesante.'
"¡Callate! ¿¡Realmente me has interrumpido solamente porque tienes hambre!?"
"¡N-no era mi inten-!"
El demonio no pudo terminar su frase ya que fue apuñalado en su nucleo por la espada de su lider y cayó muerto, poco despues su cuerpo empezó a desintegrarse,dejando atras su nucleo roto y sus cuernos.
"¡Billack! ¿Estás seguro de eso? No era nada especial,pero era un soldado competente"
Asmodeus le reprochó al lider llamado Billack,pero este lo deshechó con un gesto de desprecio.
"Tsk,Odio que me corten al hablar"
Con eso,Billack con Asmodeus y otros noventa y nueve demonios se adentrarón al territorio humano y mi visión comenzó a distorsionarse.
Al parecer los restos de la playa eran del demonio que Billack mató y al este morir,el recuerdo se estaba acabando.
Tengo que agradecer al demonio que murió,este recuerdo me dió información muy valiosa.
Sentí el vortice negro absorbiendome otra vez,recuperando la consciencia un tiempo despues,me encontraba en la sala de reuniones otra vez.
Me acaricié la parte de atras de la cabeza y miré a Alice.
"¿Cuanto tiempo llevo dormido?"
"Alrededor de dos minutos,cuando le inyectaste mana a esa cosa te quedaste inconsciente"
"Ya veo"
"¿Que fue eso?"
Sebastian preguntó desde el otro lado de la mesa.
"Mmm...es información muy delicada,¿Son todos los presentes aquí de confianza?"
Le lanzé una mirada a Sebastian junto con esa frase,implicando que podría haber traidores en esta misma sala.
"Estoy seguro que sí,pero supongo que todos estaremos un poco cansados,ha sido una reunión bastante fuerte,que Alice y su escorte se presenten mañana en mi despacho para discutirlo mejor"
Todos entendieron el mensaje detras de sus palabras pero nadie reprochó y uno a uno fueron abandonando la habitación.
En la salida crucé miradas con Julius y asentí con la cabeza.
Bajamos hasta el jardin y comenzamos a pasear,asegurandome de que nadie estuviera espiando empezé a hablar.
"Bueno...¿por donde debería empezar?"
"¿Que viste exactamente?"
"Demonios,un monton de ellos,alrededor de unos cien.Estaban desembarcando en la costa"
"¿Algo más?"
"Mucho,pero mi cabeza me está dando vueltas ahora mismo y mi memoria está nublada. Solo puedo decir que tengo información que podría ser muy importante en caso de guerra"
"Entiendo,entonces no te presionaré más. Ellen,Taylor,podeis retiraros"
Los mencionados hicierón una reverencia y dieron vuelta atrás.
"¿Porque no volvemos nosotros también?"
Alice agarró mi mano y sonrió suavemente.
"Vamos a dar un paseo"
"No estoy en contra,pero ¿y si la gente nos ve?"
"¿Que tiene de malo? Soy una princesa siendo escortada por su caballero"
"Las princesas no pasean con su caballero de las manos"
"Bueno,yo sí,¿tienes algún problema?"
"Ninguno,su majestad"
Alice se rió y empezó a caminar.
"Así me gusta"
Comenzamos a caminar cogidos de las manos alrededor del enorme jardín del palacio,me sorprendió la variedad de flores que había en Elphraim comparado con Ordina.
"¿Porque hay más flores aquí que en Ordina?"
A mí pregunta,Alice se puso a pensar por unos momentos antes de responder.
"Creo recordar que en Elphraim las flores son muy veneradas"
"¿Y eso?"
"Porque adoran a la diosa de las flores"
"La diosa de las flores..."
No era una de los siete dioses principales,entonces,¿Porque?
Mientras intentaba recordar la mitología que aprendí en muchos de mis variados viajes,un recuerdo surgió en mi mente.
"¡Ah! Ahora que lo dices,creo haber escuchado algo así antes. Hace miles de años,cuando ni siquiera existian los continentes que conocemos ahora,lo que ahora es Elphraim estaba viviendo una sequia terrible,no caía lluvia,así que los cultivos no podían crecer,el lider de su momento,rezó a todos los dioses posibles y solo la diosa de las flores,respondió a su llamada,creando innumerables flores comestibles a lo largo de todo Elphraim.
Aunque todo esto es solo una leyenda,eso de las flores comestibles no tiene mucho sentido."
Alice escuchó atentamente la historia con un rostro ilegible.
"Aunque solo sea una leyenda,la respeto,dio apoyo a los necesitados cuando más lo necesitaban."
"Me recuerda a tí"
Alice se sorprendió al escuchar esto e inmediatamente intentó negarlo.
"¿A mí? No digas ridiculeces,no soy una diosa ni mucho menos"
"Pero siempre intentas ayudar a los demás,incluso si te perjudica"
"No digas tonterias...Lo hago por mi bien"
Dejé escapar una risa.
"Sí tu lo dices..."
"¿Que se supone que significa eso?"
"Exactamente lo que he dicho"
Intentando cambiar de tema,me fijé en mí alrededor y señalé un banco a la sombra.
"¿No tienes calor? Vamos a sentarnos un rato."
"Bueno"
Pronto nos sentamos en el banco,disfrutando del descanso en la sombra trás el paseo en el sol abrasador
"Ha sido un día largo"
"¿Pero ha sido solo una reunión?"
"Eso para tí,yo me he recorrido el palacio entero hoy y he descubierto varias cosas importantes"
"¿Oh? ¿Te importaria contarmelas?"
"Por supuesto..."
Procedí a contarle toda la situación del sucesor del trono que escuché de los sirvientes en la mansión.
También le conté sobre el encuentro con Sebastian y parte de mis intenciones,no todas,por supuesto.
"Que interesante,pensar que el reino de Elphraim está en una situación tan debil...quizá sea mejor renunciar a la paz e ir directamente a la guerra..."
"¿Sabes que? Retiro lo de que te preocupas por los demás. Olvida a los demonios,tu eres el diablo en persona"
"Jajaja,solo estaba bromeando,incluso si fueramos a la guerra,Sebastian es un lider muy capaz que nos daría muchos problemas"
"Bueno,al final ganariamos,al fin y al cabo"
Alice levantó una ceja.
"¿Y eso?"
"Porque yo estaría ahí"
Alice sonrió sarcasticamente.
"No te tomaba por el tipo que lucha por su país"
"No lucharía por mi país,sino por tí"
Alice se sonrojó notoriamente ante mis palabras.
"N-no se que decir...¿Gracias?"
Le pasé las manos por encima de los hombros y la atrajé hasta mí,dejando que su cabeza cayera sobre los mios.
"Recuerda,aunque el cielo se caiga a pedazos,yo siempre estaré ahí para tí,no dudes en apoyarte en mí cuando lo necesites"
"Jack..."
Nos quedamos así por unas horas,charlando sobre cosas mundanas sin importancia y poniendonos al día,cuando el sol empezó a ponerse,decidimos regresar.
Algunos sirvientes nos vieron cogidos de las manos,pero sinceramente,no me podía importar menos.
Lo que daría para que este momento fuera eterno,la suave brisa del ya casi anochecer,la suavidad de las manos de Alice y la hermosa vista del jardín repleto de flores,que palidecía en comparación con la chica que tenía a mí lado.
Pronto llegamos a la habitación de Alice,ya era momento de despedirse.
"Ha sido divertido,deberiamos pasear más a menudo"
El sonido de los pasos de Ellen pronto llegó a mis oidos.
"Oh,princesa,¿ya has regresado? Hoy me toca el turno de noche,Jack,puedes ir a descansar"
Asentí lentamente con mi cabeza,moviendome para irme,pero Alice cogió mi mano fuertemente.
Aparentemente sorprendida por sus propias acciones,Alice tartamudeó un poco.
"¿N-no podeís cambiar hoy los turnos?"
Ellen abrió los ojos ampliamente cuando se dió cuenta de las intenciones de Alice y poco a poco asintió.
"Si así lo deseas..."
Yo levanté una ceja,¿porque querría Alice que cambiara de turnos con Ellen?
Ellen se alejó hasta que ya no se pudo ver y nosotros entramos en la habitación,conjuré una barrera magica,así Julius no podría escuchar nada aunque quisiera.
Alice se acercó a un pequeño armario y sacó una botella de vino bastante lujosa.
"¿Quieres?"
Nunca había sido muy fan del alcohol,pero extrañamente,acepté su invitación sin darme cuenta y Alice sirvió dos copas,luego otras dos,y otras dos...
Esto continuó hasta que se acabó todo el vino.
No podía pensar claramente en ese momento y Alice,quien parecía tener aún menos resistencia al alcohol,estaba roja como un tomate.
"Jack...Te amo"
Al no acostumbrarmé todavía a esas palabras,mi corazón pegó un salto,y el rubor se extendió por mis mejillas al escuchar las palabras que tanto había deseado escuchar desde niño.
Ahora tenían diecinueve años los dos,había pasado tanto tiempo desde aquel día en que se conocieron...
Alice se levantó de la silla y se acercó,repitiendo sus movimientos,hice lo mismo antes de que sus labios encontraran los mios.
No puse resistencia alguna. El beso se volvió más apasionado a medida que pasaba el tiempo y Alice me guió hacía la cama.
Cayendo encima del colchón,nos seguimos besando un buen rato hasta que nos separamos por falta de aire.
"No...no se si deberíamos estar haciendo esto"
A mis palabras,la jadeante Alice soltó un suspiro.
"No sabes cuanto tiempo llevo aguantando y reprimiendome...esta noche eres mio y solo mio"
Una trás otra,nuestras ropas fueron cayendo al frio suelo.
Mis manos exploraron su piel blanca como la nieve y besé cada rincón de su cuerpo,sin dejar nada.
Luego,nuestra ropa interior también cayó al suelo.
A partir de ese momento,no recuerdo nada más.
Solo el sentimiento de haber cumplido una meta que me proponí hace ya tiempo.