Después de pasar por la puerta me llevaron a un autobús donde me senté en una esquina alejada de cualquier persona. Tardamos bastante tiempo en llegar y en el camino vi como pasábamos alrededor de unas montañas, hasta que nos detuvimos en la instalación llamada blue lock.
Para ser una de las pocas veces que he viajado en un autobús, debo de admitir que la experiencia no fue tan mala como me lo habían contado, aunque supuse de que la razón principal fue que prácticamente nadie se conocía.
Al llegar enfrente de la puerta nos alinearon en una fila india y nos comenzaron a entregar nuestras camisetas por orden numérico. El primero en tomar una camiseta fui yo, donde una chica de cabello escarlata me atendió.
''Debes dejar todas tus pertenencias, cosas como billeteras, accesorios y celulares en esta bandeja'' dijo mientras me extendía una bandeja de metal donde debería de dejar mis cosas.
''¿Es necesario dejar el celular?'' personalmente no me agradaba la idea de dar mi teléfono, ya que era mi única manera de hablar con Shikimori.
''Si quiere ingresar debe de dejar todas sus pertenencias'' Dando un suspiro deje mi teléfono y me dieron mi uniforme con el número 300 con una Z en la parte inferior.
''Muy bien, ahora debes de ir a la habitación con la letra de tu uniforme, una vez se cambien todos le daremos mas especificaciones''
Al terminar mi turno comencé a caminar hacia adelante, aunque solo por curiosidad mire para atrás, viendo que a un chico con el cabello rapado le daban una camiseta con el numero 299 con la misma letra que la mía.
'Esto debe ser algún tipo de sistema de clasificación y es bastante probable que el número 300 represente a lo peor, me tocará empezar desde lo mas bajo'
Después de eso me dirigí a la habitación que tenia la letra de mi uniforme, no sin antes echar un vistazo a los chicos de antes que habían sido llamados después de mi.
Encontré rápidamente el lugar donde me cambie sin nadie a mi alrededor y me senté a un costado mientras cerraba los ojos esperando a que nos dieran mas indicaciones.
Luego de que llegaran los últimos miembros comencé a prestarles atención, si tuviera que decirlo por mi mismo, hay varias personas que parecen ser interesantes, pero había otros que eran demasiado normales.
Mientras esperaba a que los demás se cambiaban, el chico con el número 299 con la cabeza rapada le estrechó la mano a un chico de cabello blanco y sonrió. Si no mal recuerdo, ese chico era el que pensaba que era el protagonista de una historia de poco presupuesto, aunque lo llamaban...
''¡Oh, tú eres la joya de Japón, Kira, ¿verdad? ¡Encantado de conocerte, soy Igarashi!'' vaya sobrevalorado.
Si expresara mis pensamientos seguramente se abalanzarían contra mi, pero el ni siquiera se acerca a lo que aspiro, por lo que no veo la razón por la que darle un grandioso apodo.
''Oh, si... un gusto conocerte.'' dijo ligeramente incomodo por la presentación repentina.
''Vengo de una familia de monjes, pero no es lo que quiero hacer. ¡Estoy aquí en busca de una segunda oportunidad para una nueva vida!'' ¿Era normal presentarse de manera tan detallada?, no lo veía posible, pero este tipo parecía ser una molestia.
Tan pronto como todos terminaron de cambiarse, se prendió la pantalla de una televisión con Ego en la pantalla.
''Hola, hola. ¿Ya terminaron de cambiarse?, aquellas personas dentro de sus habitaciones serán tanto sus compañeros como rivales'' parece que este mensaje estaba dirigido a todos en general.
''He utilizado mi juicio personal para calificar sus habilidades y ranquearlos, el numero de su uniforme representa su clasificación actual, pueden ver de un vistazo qué lugar ocupan entre los 300'' una cosa que me molestó en su redacción fue la palabra actual, seguramente se podría ir actualizando en el futuro.
''Este ranking cambiará a diario dependiendo de los resultados de los juegos, y finalmente los que formen parte del top 5 serán parte del equipo sub-20 que jugará en la copa del mundo dentro de 6 meses'' Eso era demasiado bueno para varios, seguramente ya estaban imaginando como seria jugar en la copa del mundo.
''Sin embargo, los que fallen en blue lock, perderán para siempre su derecho de representar a Japón'' con ese simple comentario colapsó el mundo que todos estaban creando en su mente.
Yo veía esto como algo comprensible, ya que al final la recompensa era para el ganador, mientras que el perdedor se quedaba con las manos vacias.
''Lo que necesitas aquí para ganar es el ego, así que ahora tendrán su prueba de ingreso para ver si son lo suficientemente buenos para estar en blue lock. Para eso van a jugar un simple juego, me refiero al juego de la etiqueta y quien la tenga se la queda. Tienes 136 segundos, quien sea golpeado con la pelota será el perseguidor y quien sea el perseguidor al final del tiempo será eliminado. Además, no se vale usar las manos'' Cuando la pantalla se apagó se mostro una imagen animada de mi con mi nombre y rango, junto con el tiempo que ya estaba corriendo.
Mientras todos estaban algo descolocados por lo repentino que fue todo, yo camine en dirección de la pelota mirando el número de cada uno.
Luego de que llegara donde estaba la pelota, el resto comenzó a correr como locos sin dirección, pero en realidad cada uno tenía un patrón el cual no se daban cuenta, pero como no era mi deber señalarlo, simplemente lancé el balón en dirección del calvo.
El balón se despegó del suelo con una velocidad la cual ya estaba medida por mi y por un momento parecía como si hubiera lanzado al azar, pero de un momento a otro la pelota se curvó de una forma cruda, dándole en la cabeza al calvo.
Con eso, la pantalla mostró a Igarashi y el numero de su camiseta, siendo el 299.
'Ya que el perseguidor debe de ser el peor de nosotros, lo mejor era patearlo al peor según los estándares de ego'
''¿¡Tientes algo contra mi!?, pues no hay manera que me eliminen, no pienso volver a ese templo'' al parecer su estado mental no estaba del todo bien...
Tomando el balón corrió en mi dirección, pero lo que no esperaba fue que corriera en su dirección, solo para arrebatarle el balón de su pies y darle un disparo a quemarropa.
Estuvo un par de segundos en el suelo recuperándose del golpe anterior, mientras me alejaba de la escena pensando que no se levantaría, pero para mi sorpresa si lo hizo.
''H-hey, eso es trampa'' dijo mientras se levantaba del suelo sujetándose la zona afectada.
''¿Eh?. si solo dijo que no se valía usar las manos'' en realidad solo estaba usando un vacío que había dejado, ya que si quisiera podría romperle las piernas a alguno de estos delanteros y esa persona directamente perdería.
Luego de que el cronómetro llegara a 59 segundos, intentó disparar el balón en mi dirección de manera desesperada, pero para su frustración casi me pega, aunque casi le da por accidente a otra persona.
El balón rodó justo al lado de un chico que estaba durmiendo en el suelo y debía de admitir que su aspecto era algo peculiar, ya que tenía las puntas de su cabello de color amarillo, pero el resto de su cabello era negro.
''¡Oh, qué suerte, está dormido!'' dijo el calvo mientras se preparaba para tirar, pero antes de que pudiera golpear al chico perezoso con el balón, su cara recibió una patada acrobática que lo mandó al suelo.
''¡Oye, eso debería ser falta! ¡Si esto fuera un partido, te sacarían directamente una tarjeta roja!'' parece que todavía no entiende que lo único que no vale es usar las manos.
''Solo las manos están prohibidas, ¿no? Buenos días.'' dijo el chico mientras se levantaba lentamente y se frotaba sus ojos.
Al ver esa escena un chico con el cabello puntiagudo de color anaranjado y un cuerpo corpulento se acercó al chico perezoso para poner su mano en su hombro.
''Oye, no soy fanático del juego sucio. Juega limpio'' Así que es un fortachón con el corazón de pollo... alguien tan noble como el no podrá sobrevivir en este entorno.
''Mucho gusto, Sr. Correcto'' dijo mientras le daba una sonrisa.
Aprovechando la oportunidad, el chico calvo pateó el balón directamente a la cara del chico de cabello naranja, haciendo que el nuevo perseguidor fuera el.
Al parecer ese acto lo enfureció demasiado, así que con las venas y el rostro tensado preparó su pierna, para dar un potente disparo a la pelota.
''¡Te voy a destruir!'' al decir eso el balón viajó a una velocidad increíble.
El balón impactó como una bala en el pecho del calvo, dejándolo incapacitado en el suelo por un momento y sacándole saliva y aire de los pulmones. Su cuerpo estaba siendo severamente castigado, pero aún así se levanto del suelo.
Por mi parte ya estaba bastante cansado de ver la misma escena una y otra vez, por lo que corrí en dirección del balón sin importarme en cuanto quedaba, aunque mi mente si sabía cuantos segundos quedaban.
Aunque estaba bien eliminar a la persona con el menor rango, quería desafiar el supuesto análisis de ego, por lo que debería de eliminar a alguien de un rango mayor.
''Así que me vienes a por mi, me agradas'' dijo el chico perezoso que me planto cara, intentando quitarme el balón, pero lo controlé para evitar su defensa.
''Eres un demente'' dije al tener una idea aproximada de lo que quería hacer.
''Jeje, ¿eso no te hace peor?'' dijo mientras volvía a estirar la pierna.
''Entonces... te propongo algo, ¿Por qué no vamos a por el 'mas' fuerte?'' dije mientras detenía el balón y volteaba mis ojos en otra dirección.
''Me gustas, si hay que echar a alguien...'' paró por un segundo mientras me arrebataba el balón. ''Debería ser el mas fuerte''
Al decir eso corrió en dirección de la aclamada joya de Japón, quien como un cobarde corrió en la dirección contraria.
Viendo el panel noté que se llamaba Bachira Meguru, seguro es un tipo extraño.
Cuando Bachira acorraló al tipo de cabello blanco, dio un tiro que pegó en la pared, pero al tenerlo tan cerca intentó patearle en la cabeza, lo cual no llegó a suceder por poco, ya que lo esquivo.
''Por fin se acabó'' dijo la 'joya' de Japón mientras sonreía relajado.
Lamentablemente el nunca pudo haber predicho que ese 'fallo' fue planeado por el maniaco de Bachira, ya que con el tiempo corriendo, el balón cayó justo en el lugar donde estaba posicionado.
Al ver que estaba enfrente suyo con el balón y en realidad el 'disparo' de Bachira fue en realidad un pase, no pudo evitar abrir los ojos con miedo.
''¡BOOMM!'' gritó Bachira mientras me veía golpear el balón con pura fuerza bruta.
Quedaban 2 segundos... en los cuales el balón viajó a una velocidad que dejaba en ridículo el disparo del chico peli naranja. En esos dos segundos solo le tomó un segundo al balón estrellarse contra su cara, dejándolo tirado en el suelo
.Luego el último segundo que quedaba pasó mientras el balón giraba lentamente en el suelo, dejando a Kira como el único perseguidor.