—Jefe, ¡cuento contigo! —Fatty Tang miró a Xiao Yi con ojos esperanzados.
—No te preocupes, ya que dije que te ayudaría a encargarme, definitivamente lo haré. Vamos, come algo primero. Estar ansioso así no ayuda —Xiao Yi le sonrió tranquilizadoramente y alargó la mano para poner algo de comida en su plato.
—Hmm —Fatty Tang asintió lentamente y también comenzó a comer, pero su expresión seguía distraída, y comía sin apetito alguno, masticando sin sabor.
Le tomó una eternidad comer solo un poco de comida, nada parecido al Fatty Tang habitualmente voraz. Xiao Yi sacudió la cabeza impotente mientras lo miraba y, después de unos bocados, hizo un gesto para que el mesero se acercara a pagar la cuenta.
Justo cuando levantó la mano, un hombre, ligeramente bebido, pasó por su lado y chocó con la mano de Xiao Yi, empujándola, mientras tambaleándose hacia la siguiente mesa.
