Aunque había escapado por poco del cerco policial, esta experiencia había sido sin duda la más desgarradora y humillante para Tanaka Suimeng.
Había organizado todo ingeniosamente, pensando que tenía la victoria asegurada, ¡cuándo no había anticipado en absoluto que Liang Fei seguía vivo!
Para Tanaka Suimeng, Liang Fei era sin duda el mayor obstáculo para toda su organización. Era debido a la interferencia de Liang Fei que sus propios planes, que podrían haber tenido éxito, eran repetidamente frustrados por este odioso paleto.
Lo que era aún más enfurecedor era que todos los puntos de acupuntura de su brazo derecho habían sido bloqueados por Liang Fei, y aunque había agotado su fuerza interna para desbloquear algunos de ellos, solo sirvió para estimular temporalmente el flujo sanguíneo. Si no conseguía desbloquearlos completamente en tres días, su brazo quedaría inservible.