Después de recibir la noticia de Fan Qingxuan de que Xie Junhao planeaba inspeccionar Binyang el próximo mes, Liang Fei no se atrevió a demorar ni un momento. Se despidió apresuradamente de Fan Qingxuan y corrió hacia la Oficina de Seguridad Pública de Binyang.
Sabía que el mensaje definitivamente aún no había sido publicitado por el Gobierno Municipal; ni hablar de Shen Xing, incluso Yi Jianfeng, el Jefe de la Oficina de Seguridad Pública, podría no saberlo de antemano.
Aunque todavía faltaba mucho tiempo para el próximo mes, Liang Fei sabía que si no hacían preparativos proactivos, serían superados por Tanaka Suimeng y su gente en cada oportunidad. En una situación donde el enemigo estaba oculto y ellos expuestos, una vez perdida la iniciativa, cualquier acción resultaría en ir a remolque.
