Volumen 1 - Capítulo 3 – Rescate Parte 22:10 Pm - A 10 kilómetros de la aldea objetivo - Al suroeste de pueblo plateado.Había pasado poco más de una hora desde el comienzo de la batalla, el combate del pueblo plateado había cesado luego de que Hugo junto a su grupo y las personas del pueblo habían acabado con el ejército de Goblins, las bajas estaban presentes, aunque sin embargo eran menores...Mientras tanto para Ikal él había llegado a la zona marcada en el mapa, había sido un vuelo corto, pero tenia que mantener distancia y volar lento para no ser visto por los Goblins.El moreno se mantenía a la distancia para no ser visto pus sus alas aun a pesar de ser negras anteriormente emanaban luz, sus alas llameantes habían cambiado un poco desde la última vez que las uso, el color de su flama había cambiado a ser un bicolor, el negro y el blanco estaban presentes en las llamas como si de dos personalidades o incluso elementos se tratase para el era raro, pero eso no importaba en este momento.A la distancia se podía observar como el poblado había sido saqueado y completamente tomado por los Goblins, las casas se encontraban destruidas o quemadas, mientras que a la distancia sus enemigos estaban en los escombros o en las torres que servían de vigilancia para el pueblo, Ikal podía observar a varios Goblins en esas posiciones, algunos portando arcos o dagas como armas, mientras que otros tenían algunas prendas como si de un hechicero se tratase, un pequeño grupo de Hobgoblins y trasgos estaban presentes al igual que un grupo de conformado por tres Trolls que resguardaban una de las edificaciones del lugar, a lo que suponía que era la zona donde tenían a la gente o se encontraba quien manejaba este ataque.— Tome un respiro tenía que planear el cómo sacaría a las personas de este lugar sin que hubiera bajas, entre pensamientos fugaces el sentimiento de sentir las presencias llegó nuevamente a mi mente, concentrándome lo más que pude, mis ojos encendieron una pequeña luz, el poder mágico fluía hacia ellos como una corriente de agua en un canal, era un sentimiento extraño. —— En solo instantes mi visión mejoró considerablemente, y a donde mirara podía ver cada una de las presencias de aquellos seres, al mismo tiempo era capaz de observar en donde se encontraban las personas que habitaban este pueblo, por alguna razón la energía era diferente, tal vez podía identificar el sexo de la persona, al igual que identificar la diferencia entre cada firma de energía, con calma mire hacia una especie de edificación con forma de establo donde se encontraba un gran grupo de hombres, mientras que a 200 metros en una habitación resguardada por un montón de Goblins, se encontraban los niños y niñas del pueblo, tal vez los habían separado para venderlos como esclavos o alguna otra acción de ese calibre... Según Hugo esto existía en este mundo así que podía ser una posibilidad. —— En la gran edificación central donde los Trolls se encontraban, parecía sentir la presencia de un gran grupo de mujeres podía imaginar que posiblemente de todas las edades debido a la energía que estas mostraban, me daba una idea de que era lo que esos seres querían hacer con ellas, pero, aun así, no quería pensar en lo que harían con ellas. —— Tome mi arma y mire debajo de mí, 2, 4 Goblins se encontraban debajo del árbol descansando... Aunque de todas formas no lo sabía muy bien después de todo ellos son criaturas extrañas para mí. —— Maldición... los Goblins no serán un problema, pero los Trolls... Esas cosas son gigantes, en qué carajos me metí... Casi tres metros y medio de altura. —dijo Ikal de manera mental buscando la forma de salir ileso de esta batalla, aunque él mismo sabía que tendría que pelear con uñas y dientes.Una vez estaba listo dando un último suspiro, baje en picada al suelo tomando la lanza con ambas manos clave a uno de los Goblins que se encontraban distraídos, este me miró por solo un segundo viendo como el filo de la lanza atravesaba su pecho para morir instantáneamente.Los otros dos reaccionaron instintivamente al atacar, la daga de uno de ellos rozó mi cuello a solo unos milímetros de mi yugular, soltando la lanza tome el tajo del Goblin con mi mano para sostenerlo con fuerza, la sangre resbaló al momento que la piel y carne había sido cortada por la filosa daga.Sin esperar ni un momento di un puñetazo al rostro del Goblin, el cual salió disparado al árbol, el Goblin restante intentó pedir ayuda, sin embargo, no dejaría que eso sucediera, usando rápidamente la lanza la desenterré del cuerpo del Goblin muerto y atravesar desde el ojo el cerebro.— Los recuerdos de la guerra más asquerosa y destructiva de toda la humanidad llegaban a mi mente, mientras en mi mano podía ver la sangre de todos los que había matado en mi vida pasada. —— ...—Un sonido seco se escuchó al caer cada uno de los cadáveres, las ropas de Ikal habían sido llenadas con la sangre de esos seres, sin embargo, para su sorpresa el estrés de su llegada le había pasado factura pues uno de ellos seguía vivo.— Había matado tres Goblins rápidamente sin remordimiento alguno, lastimosamente había dejado uno con vida, di una vuelta rápida hacia donde escuché el movimiento del asustado ser intentando huir y pedir ayuda. —— Corrí hacia la posición del Goblin, el cual con una especie de cuerno amplificador pidió ayuda a todos los demás. —— Había sido lento en acabarlos pues este era el escenario que no debería de haber ocurrido, tome posición de combate dando una patada al Goblin el cual salió disparado por el golpe hacia los demás Goblins y trasgos que venían corriendo hacia mi dirección. —— Retrocedí lo más rápido que pude, varios trasgos corrían hacia mi posición sin detenerse como gorilas salvajes, tome la lanza del cuerpo del Goblin que había matado, necesitaría una posición ventajosa en este combate si quería ahorrar mis fuerzas para los Trolls. —— Mire por todos lados usando aquella habilidad con la que había detectado las presencias, corrí por los lugares donde ninguno de aquellos seres sería capaz de seguirme pues la oscuridad en este momento sería mi mejor amiga. —— Grande fue mi sorpresa al ver la velocidad de los Hobgoblins, aunque se parecieran a un humano cualquiera, tenían la fuerza de un trasgo, pero la velocidad de un ninja de las películas asiáticas. —— Uno de ellos atacó con un corte de espada la cual solo puede bloquear con la lanza, esta se dobló por la fuerza del impacto, tome distancia para dar una patada al estómago, este lo esquivo e intento volver a cortarme con su espada, usando mi daga me defendí de la espada de doble filo chispas fueron creadas debido al choque de las armas, su fuerza física como velocidad eran dignas de un guerrero, más fuertes que un Goblin y la misma fuerza que un trasgo, pero igual de inteligentes a un humano... —— Di un salto y volví atacar con la lanza la cual acerté, aunque a duras penas el Hobgoblin se defendió con su propia arma, recibiendo solo un corte en su ropa, si tenía que decir una palabra que definiera esta misión sería difícil, yo era un militar al final de cuenta había matado con cuchillo, usado máquinas y armas para la batalla, el combate cuerpo a cuerpo con los puños era bueno pero el uso de estas armas no, la velocidad de mi mente al luchar era tanta que no podía responder al 100% de mis capacidades, los Hobgoblins eran muy rápidos, atacaban y rápidamente se alejaban, ellos tenían conocimientos de lucha con este tipo de armas, sabían lo que hacían, no era como los trasgos o Goblins que eran más músculo e instinto que otra cosa, estos tipos sabían pensar y hacer caso a su cerebro.—— Usando el par de alas, me propulse rápidamente lejos de su alcance y visión, me aleje escondiéndome detrás de unos restos de uno de los hogares destruidos, la madera y el humo me ayudaban a esconderme. —— 2... No 3 segundos fueron suficientes para que un pequeño grupo de Goblins se acercaran a mi posición. ——Esas cosas podían oler mi sangre... tomé la lanza y salí de mi escondite dando un movimiento de media luna con el filo expuesto de la lanza apunte a degollar sus cabezas. —— Los Goblins ahora más atentos no cayeron tan fácil al menos 1 de ellos logró esquivar el corte, pero de todas formas no iba a dejar sobrevivientes en esta batalla, era matar o morir. —— Con un impulso de mi pierna derecha me lance hacia su posición y extendí la lanza una vez llegue a él, está lo atravesó, sin embargo, no esperaba que el Goblin lanzará su daga a mi hombro. —— La daga se incrusto rompiendo la tela de la chamarra que servía como armadura y golpeando en el punto muerto en la que la malla de hierro no cubría, la sangre brotó de aquella herida, sin perder nada de tiempo saqué la lanza del cadáver y con mi mano libre desenterré la daga. —— No podía sentir veneno en ella, por lo que esa daga no debía de estar envenenada, hubiera sido un problema si la daga hubiera tenido veneno. —— A la distancia podía ver como varios de estos seres se acercaban cuidadosamente, algunos con cabello y otros sin ello, la mayoría eran solo Goblins, a su lado se podían ver algunos trasgos pero en el grupo conformado por Hobgoblins había uno que destacaba entre todos ellos, podía sentir algo extraño en su apariencia, muy similar a la de un humano, algunos rasgos eran de Goblin respectivamente, pero su cuerpo estaba más humanizado y a la vez su larga cabellera negra con una piel verdosa clara era capaz de destacar entre todos los demás, un físico fornido pero delgado, acompañado de una serie de ropa como la que portaban la gente del pueblo, orejas puntiagudas como la de los Goblins, una nariz más humana, sus ojos eran similares a lo de una persona normal pero su pupila era de color amarillo, si tenía que decir algo más ese ser no era nada feo era completamente diferente a un humano pero eso no lo hacía feo a nuestros estándares, a diferencias de los trasgos que parecen más al típico orco de los juegos de antaño, este tipo al igual que sus compañeros era diferente a la idea que se tendría de un Hobgoblin, era claro él era un Hobgoblin, una de las evoluciones de los Goblins. —— Él era distinto y el más peligroso de todos con diferencia, era un ser completamente inteligente su fuerza era la de un trasgo, eso lo hacía peligroso puesto que aún conservaba la capacidad de adaptarse a su enemigo, así como lo hacían los Goblins y trasgos normales. ——Ese tipo era un problema ahora entendía cómo fue que pudo defenderse de mi ataque a punto ciego. —Con una voz gruesa y áspera uno de los trasgos allí presentes empezó a hablar.— Humano, te has metido en los negocios de Siek por ende tú tienes que morir— dijo el trasgo con enojo.Ikal miró a todas direcciones, viendo las posibilidades de una lucha en esta parte del terreno, había edificaciones destruidas y algunos árboles, la luz era menor pero no tenía problemas de visión debido a la energía fluyendo a través de sus ojos.Intentando buscar información, empezó a hablar con el grupo frente a él tal vez así podía ganar un poco de información contra qué tipo de cosas se enfrenta o que tan poderosos pueden ser.— Vaya, al parecer ese Siek es tan importante como para que tenga a un gran grupo bajo sus órdenes ¿No? —dijo Ikal dando una sonrisa confiada.— Siek es el mejor traficante de toda la región norte, ni tú ni nadie podrá derrotarnos, tenemos una jugosa recompensa en juego luego de esto. — dijo el trasgo con una voz áspera y llena de emoción.La misma mirada podía ser vista en los demás Goblins y trasgos menos en uno de esos grupos, mientras que los Hobgoblin miraban a sus compañeros con algo de asco y repulsión, cosa que no pasó desapercibida para el ex soldado.— Con que es así... Vaya entonces no les quitare el tiempo, vengan y atáquenme. — dijo Ikal el cual cambió su rostro a uno más serio, su mirada era completamente seria mientras tomaba el arma con fuerza siendo observado por los Goblins menores empezaron a temblar pues los ojos rojos de Ikal brillaban en la oscuridad aterrándolos al instante y un aura de muerte era capaz de sentirse en el lugar.El grupo de Hobgoblin vio esto en impresión, pues había algo raro en ese aventurero esos ojos eran los ojos de alguien que había matado tanto que ya no le importaba y ellos lo sabían.Cada uno de los trasgos y Goblins tomó camino a atacar a Ikal, con la excepción de los luchadores a larga distancia y los Hobgoblin, el Goblin que tenía ropas de hechicero lanzó una esfera de magia acompañada de un fuerte grito de batalla.Los trasgos utilizando sus hachas y mazas intentaron golpear a Ikal el cual pudo esquivar el ataque de estos.La esfera mágica salió disparada a alta velocidad, Ikal reaccionó rápidamente utilizando la lanza como defensa, en poco tiempo una explosión se escuchó por la zona de batalla en la cual el moreno había salido disparado a varios metros hacia atrás.Esto parecía ser una especie de magia explosiva, levantándose rápidamente con su mano desnuda paró un golpe de uno de los mazos, esté usando fuerza lo jalo hacia enfrente para pegar un fuerte cabezazo a la nariz del ser verdoso.Tomando distancia se colocó de pie dando una fuerte patada acompañada de un corte de la daga que tenía en su pierna derecha, el krav maga salía a relucir aun siendo afectado por la explosión, él estaba de pie frente a ellos.Dio un salto hacia atrás esquivando a uno de los Goblins que se lanzó en contra de él, otro por su lado derecho intentó golpearlo, pero gracias a los reflejos que este poseía pudo esquivarlo y clavar la lanza en el cuerpo del Goblin.— Qué lento. — pensó Ikal viendo como la sangre salpicaba por el campo de batalla, había esquivado balas de armas extremadamente rápidas, había luchado en la tercera guerra mundial la guerra que acabó el mundo en todas las líneas de tiempo, según a palabras de la diosa, esto no era nada.El sonido del aire rompiéndose fue escuchado por los oídos entrenados del irregular pero aun así su reacción había sido lenta al repeler a un Goblin que intentó cortarle la yugular con una de sus dagas, rápidamente el sonido del viento cortando fue sustituido con el sonido de la carne siendo atravesada, la flecha había golpeado a su objetivo la cual se clavó en el brazo del moreno.— ¡Mierda!...— Ikal dio un pequeño grito debido al dolor que, hacia la flecha en su brazo, tomando distancia clavó la lanza una vez más en el cuerpo de uno de los Trasgos que se encontraba en el suelo.A la distancia pudo ver como los Goblins arqueros volvieron a lanzar una serie de flechas, este por instinto tomó uno de los cuerpos del trasgo caídos para cubrirse de la lluvia de flechas, lo cual funciono atrayendo las miradas de odio de los demás.Ikal utilizando el cuerpo del trasgo lo lanzó a uno de los Goblins que quedaban, este fue golpeado por el cuerpo de su compañero.Usando su lanza, dio una clavada directa a través del cuerpo del trasgo sin problemas, por consecuencia atravesando al Goblin restante.Por reflejo pudo ver como el corte de un hacha llegaba a su posición dando un salto con el impulso de aquellas alas creadas por sus flamas.Aquella hacha había golpeado a la lanza que estaba atravesando a los dos cadáveres, esta se rompió por el fuerte impacto que ese ataque poseía y la diferencia con un corte normal.Podía ver a la energía del trasgo fluir al arma como si de un potenciador se tratase, el fino brillo de su energía resaltando en el arma, le hacía sentir que si recibía en un corte de esa hacha podía pasarlo mal.El moreno volvió a caer al suelo y rápidamente utilizando su daga y la daga de un Goblin caído se abalanzó al trasgo, Utilizando magia elemental cargo un golpe con su mano al suelo el cual generaba distintos filos de roca lo cual pudo esquivar debido a sus reflejos.Usando ambas dagas, estas fueron clavadas en el cuello del trasgo enemigo, la sangre salía a montones debido al corte y la fuerza con la que se dio, la cabeza del trasgo se desprendía del cuerpo mientras Ikal se sentía algo cansado, pero no lo demostraría no hasta que todos ellos estuvieran muertos, tenía que estar alerta y eso era cansado, su cuerpo poco a poco empezaba a sentirse débil...Uno de los Goblins se subió en su espalda intentando encajar una daga en su cráneo, utilizando las llamas que salían de sus alas fue lanzado lejos para luego este empezar arder en llamas negras y los gritos de dolor empezaron a ser escuchado aterrando a los Goblins a la distancia pues el fuego no se apagaba.En una especie de orden el Goblin hechicero pedía a los arqueros lanzar una lluvia de flechas, estos sin dudarlo asintieron, pero al mismo tiempo el hechicero había recitado un hechizo de apoyo, las flechas ardían en llamas mientras caían generando pequeñas explosiones, Ikal corría por todo el lugar esquivando las flechas, para él esto era como vivir una vez más un campo de batalla de la guerra, lo odiaba.Usando ambas alas desvió las flechas restantes, sin embargo, al hacer esto la explosión aturdió sus sentidos y generó algunas quemaduras en su cuerpo, el Goblin al ver que Ikal se encontraba distraído aprovecho esto para recitar un hechizo más.Una cuchilla de viento fue lanzada a gran velocidad siendo imperceptible para cualquiera que no fuera capaz de sentir la magia.Ikal se agachó con rapidez pudiendo esquivar aquella cuchilla, observando para atrás pudo ver como dos árboles caían al suelo cortados completamente a la mitad, sin perder tiempo tomó el hacha del cadáver que estaba cercano a él, empezó a correr rápidamente esquivando varias flechas que estos le lanzaban.Ikal usando sus reflejos podía esquivarlo, dio un salto en medio de la agrupación de los Goblins, los novatos miraban aterrados pues la imagen de la muerte estaba detrás del hombre, pegando un giro con el hacha partió a la mitad a varios de ellos, mientras que los más experimentados intentaron disparar una vez más antes de morir se lo llevarían con él incluso si los matara en este instante.Usando las fuerzas de sus piernas se abalanzó en contra de uno de ellos, levantando el hacha lanzó un corte descendente hacia el Goblin arquero que había intentado atacarlo, el filo del hacha destrozó el cuerpo del verdoso ser, mientras que usando las flamas de sus alas quemó a los Goblins restantes, flamas negras y blancas quemaban sin piedad a los Goblins junto al mismo entorno que lo rodeaban mientras que el hechicero miraba esto con terror.Ikal miro al Hobgoblin al único que quedaba pues sus demás compañeros no parecían estar cerca, aquel que parecía un hombre entre los 23 años de edad humanos no había hecho ningún movimiento solo lo observaba ¿Por qué no ayudó a su compañero? ¿Acaso no ayudaría al último Goblin que quedaba? Aquellas preguntas pasaban por la mente de Ikal, cuando el filo del hacha estaba a punto de cortar al Goblin hechicero, dio una sonrisa violenta, llena de locura y desesperación, levantando ambas manos conjuro un último hechizo.La energía blanquecina llegaba a las manos del Goblin en microsegundos, el cuerpo entero de este brillo del mismo color, el filo del hacha golpeó el cuerpo del Goblin, para su sorpresa una explosión envolvió toda la zona.— ¡Muere! — con una voz entrecortada y apenas entendible el Goblin había utilizado toda su energía restante para hacer un hechizo de autodestrucción, su cuerpo había sido reducido a nada más que cenizas.Ikal no podía esquivar dicho hechizo estaba lo suficientemente cerca para ser víctima de otra explosión a quemarropa de este maldito kamikaze, Ikal fue lanzado varios metros chocando contra una de las casas que aún quedaban de pie.La sangre escurría en todo su cuerpo, sus costillas como gran parte de sus huesos dolían, había sido un hechizo peligroso, pero no había cumplido su propósito, la explosión había sido vista por el grupo de Trolls y los cuales caminaron hacia la zona donde la batalla se estaba llevando a cabo y notaron como había muchos cadáveres en el suelo a lo cual alertados tomaron sus armas.— ¡Maldición esa mierda sí que duele! — dijo con una voz adolorida Ikal.Quitándose la sangre del rostro el pelinegro se levantó con bastante dolor en su cuerpo, junto a él se encontraba el Hobgoblin mirándolo bastante serio.— Quien diría que podrías soportar tanta paliza, sabes pensé que morirías luego de recibir esa cantidad de magia. — dijo el Hobgoblin.La voz de aquel ser era distinta a sus contrapartes más pequeñas, era una voz completamente humana a diferencia de la voz chillona de los Goblins y los extraños ruidos agresivos de los trasgos.— Al oír aquella voz me levanté rápidamente mirando a mi lado, el Hobgoblin se encontraba allí calmado y con una mirada seria, estaba débil y ese ataque me había dañado, acaso él no me creía una amenaza, no simplemente estaba jugando conmigo. —— Humano, dime tú nombre, antes de que seas asesinado me gustaría saber quien es el rival que tengo enfrente. — dijo el Hobgoblin.— Morir, yo no seré asesinado así que no tengo por qué decírtelo je...— dijo Ikal dando una sonrisa, mientras sus ojos seguían brillando de un color rojo, que ponía intranquilo al Hobgoblin.— Ya veo, has derrotado a gran parte de nosotros, no cabe duda que eres una persona experimentada en el combate, sin embargo, yo soy diferente a cualquiera de mi especie que has luchado o que alguna vez te hayas enfrentado aventurero. — dijo el Hobgoblin de manera tranquila.Desenfundando su espada este miro a Ikal mientras su aura mágica era capaz de ser vista.— Lamento eso, sin embargo, no estoy aquí por gusto, tengo que salvar a estas personas y en especial a una, así que sería muy bueno que nos dejáramos de conversación. —dijo Ikal, mientras tomaba su propia forma de artes marciales, una hibridación entre el Karate, Boxeo, Judo, Muay thai y el Krav Maga.— Entonces que así sea o que dicen hermanos, no les importa que nos unamos a su pelea. — dijo una voz extraña a los dos presentes.— Así que Mulhem, Caín y Preftum los tres hermanos Trolls vienen a luchar contra el humano. — dijo el Hobgoblin dando una mirada seria a los tres Trolls.Las tres figuras humanoides de más de tres metros de altura, se acercaron, sus apariencias eran algo variadas, sus cuerpos eran la mayor parte músculo y grasa, su piel grisácea resaltaba bastante, sus ojos eran de varios colores algunos amarillentos otros verdosos otros incluso azules, su nariz era humana sus orejas de igual forma eran similares a las de un elfo o incluso a la de un Goblin, su mandíbula era ancha y bastante cuadrada y dos colmillos salían en sentido contrario a los de un diente de sable, su cabello tenía varias tonalidades de colores, estaba entre el castaño o el rojizo, su estilo era desaliñado y largo.Había una diferencia notable en su forma de vestir, a diferencia de los Goblins los cuales usaban solo pieles de animales, estos consistían de un pantalón de piel de animal más trabajada a su vez portaban una armadura de hierro en la parte inferior que recibiría el pantalón, sus brazos al igual que sus hombros eran recubiertos por una armadura para cada uno, con la excepción de su pecho el cual no portaba ninguna especie de defensa. — Estaba confundido, cuál era la razón de que portaran defensa en la zona inferior del cuerpo y no portaran nada de armadura en una parte tan importante como lo es su pecho y espalda, acaso estaban confiados que no podría ganarles o era acaso algún tipo de moda social que estos seres practicaban. —— Así que eso es un Troll... Vaya estoy impresionado de su altura. — dijo Ikal dando una sonrisa confiada al grupo de seres.— Qué raro que un humano no conozca a los Trolls... Después de todo fuimos enemigos en la guerra de hace años. — dijo Mulhem con un tono de voz serio.— Sabes no todos les damos importancia a cosas como esas, je... sin embargo ustedes no están aquí para hablar del pasado ¿No?. — contestó Ikal.— Vaya que eres un humano valiente o tal vez muy estúpido, mis hermanos no necesitan meterse mucho menos ese bastardo de Yuei, Preftum y Caín este humano es mío, es hora de disfrutar una buena pelea. — dijo Mulhem tomando su arma.— Acaba rápido con él, Siek no estará muy feliz si este tipo sigue con vida haciendo más destrozos. — dijo Caín a su hermano.— Un humano jamás será problema para alguien de la raza del troll y lo demostrare al igual que se lo demostramos a esa mocosa y su grupo de imbéciles. — contestó Mulhem.Las palabras que el enorme ser había pronunciado habían causado algo de preocupación en Ikal.— No puede ser... estoy seguro que la hija de Hugo no puede estar muerta... pero, ellos hablaban de un grupo de aventureros que demonios pasa aquí. — pensó Ikal.— Tú crees que caeré igual que ellos lo hicieron, te demostrare que hay humanos que podemos derrotar a seres más grandes que tú, así que vengan y peleemos. —dijo Ikal tomando el hacha del trasgo que anteriormente había matado.— Lo seguiré repitiendo, eres un humano valiente ojalá no mueras tan rápido enano. —contestó Mulhem.Ambos estaban delante de sí con un rostro serio, el troll tomó su arma, un gran mazo de batalla hecho de acero y madera, con una especie de rinoceronte bordado en la agarradera del mazo.Ikal sin esperar ni un solo momento se abalanzó a Mulhem el cual sorprendido notó la velocidad y fuerza que este había puesto en su corte, el humano fue a matar desde el primer movimiento.Utilizando su mazo este bloqueo el ataque de Ikal el cual había causado que chispas creadas por el choque de ambas armas salieran con ferocidad, Mulhem estaba impresionado por el impacto del ataque, el suelo bajo él se agrietaba por la fuerza del impacto, Ikal sin dar descanso dio una fuerte patada al abdomen del troll el cual no fue capaz de detenerla debido a su tamaño y la recibió de lleno.La patada dio en toda la zona de las costillas, el aire del troll fue capaz de salir de su cuerpo dejándolo bastante dañado por el golpe.Sus hermanos en cambio tenían el rostro serio y no podían creerse que un golpe de un humano le haya hecho ese daño.Mulhem tomo a Ikal de la pierna y este fue azotado al suelo, el impacto de su cuerpo contra el suelo le había hecho sentir dolor, Ikal desplegó sus alas y dio un poderoso aleteo el cual levantó a Mulhem del suelo, este se sorprendió por lo que había hecho el moreno y usando su magia creo un campo de energía para contener a Ikal, este con un poco de confusión toco el campo dándose cuenta que no podía salir de él.Mulhem concentrando energía mágica a su arma dio un fuerte mazazo a Ikal el cual solo por unos instantes fue capaz de esquivar, un fuerte temblor se sintió en la zona de combate, el mazo había roto gran parte de la zona creando un cráter donde el arma se encontraba enterrada.— Maldición, no puedo dejar que ese ataque me dé...— pensó Ikal.Nuevamente el troll empezó a lanzar golpes consecutivos con su mazo, el gran arma era abalanzada una y otra vez en contra de Ikal, este muy a duras penas era capaz de esquivar todos los ataques, todo esto debido a la diferencia de tamaño lo cual lo hacía más rápido que Mulhem, corto distancia con ayuda de sus alas con las cual pegó un fuerte impulso, usando el hacha dio un corte a toda la caja torácica del enorme ser, la sangre salía del cuerpo del troll pero Ikal sin dar oportunidad, aún en vuelo dio un fuerte rodillazo al rostro del Troll.Su cuerpo aprendió mientras combatía lo sentía, podía sentir como el combate lo hacía más fuerte, él era un peleador nato y eso podía verlo el Hobgoblin.El impacto de Ikal había roto uno de los colmillos del troll, el cual caía al suelo luego de recibir ese daño.Ikal respiraba agitado, los dolores empezaron a sentirse una vez más y las vibraciones a su cabeza eran nuevamente más molestas, el dolor era intensificado cuando de un momento a otro un fuerte mazazo fue dado de lleno al moreno, el golpe había lanzado a Ikal hacia la barrera chocando en contra ella.— ¡¿Que carajos?! ¡Solo me distraje unos segundos! — pensó Ikal adolorido pues su cuerpo se estrellaba generando un fuerte sonido de quiebre.— ¡Eres un maldito eso me dolió humano bastardo!, ¡Te aplastare como un insecto imbécil!, ¡Arg!— grito Mulhem en rabia siendo observado por sus dos hermanos.Ikal se levantaba mientras tocaba su torso para comprobar que sus costillas estaban probablemente rotas, esperaba que sus órganos internos estuvieran bien, aunque sentía su sangre correr por dentro como una fuga, sus brazos estaban relativamente bien y sus piernas de igual forma, su cráneo seguía aún en su lugar por lo que agradeció aun seguir con vida.De un momento a otro un fuerte dolor invadió a Ikal el cual lo hizo vomitar sangre a montones.El golpe había lastimado internamente su cuerpo y el dolor de cabeza aumentaba con el paso de los segundos.— Esto no puede estarme pasando... Mi cabeza duele, mi cuerpo duele, maldición qué clase de monstruos son esos.— pensó Ikal mirando al enorme troll.De un momento a otro Ikal miró al troll, este sacaba el hacha de su pecho con fuerza y la aventaba lejos.— ¿Por qué? ¿Cómo es posible?... — dijo Ikal.Un vapor blanquecino salió rápidamente de las heridas que Mulhem había sufrido, aquel daño poco a poco estaba regenerando el cuerpo del Troll, un nuevo colmillo había crecido donde el anterior había sido roto y la herida que portaba en su pecho había desaparecido casi por completo, esta acción había impresionado al pelinegro el cual intentaba levantarse del suelo.— Nosotros los Trolls somos capaces de regenerar nuestras heridas muy rápidamente incluso si perdemos un miembro podemos regenerarlo jejeje...— dijo Mulhem en tono burlón mientras la rabia dentro de él aumentaba.La herida había sanado por completo y poco a poco el troll se acercaba a un Ikal que no podía levantarse del suelo, el miedo empezaba a invadir al moreno, no había forma en la que pudiera salir de esta, su cuerpo dolía cada vez más, sabia que no era el daño sufrido, algo le pasaba a su cuerpo y no sabía que era, su mente era un caos, recuerdos acerca de lo que la deidad le había hecho, tal vez su cuerpo debía adaptarse a sus nuevas capacidades y el presionaba tanto que forzaba algún efecto secundario de esta.— Humano es hora de que mueras, debo admitir que eres fuerte me hiciste sangrar y eso lo admiro, pero después de todo hasta aquí has llegado y los Trolls volvemos a demostrar que somos los más fuertes una vez más. —dijo Mulhem con un rostro serio.— No moriré aquí... No, no lo haré.— pensó Ikal en voz alta.El latido de su corazón empezaba a ser capaz de ser escuchado por él mismo, recuerdos, sensaciones, esperanzas y sueños pasados, cada una de estas emociones pasadas lo hacían latir muy fuerte.— Así que... Hasta aquí llegaste.— pensó el Hobgoblin viendo a ese humano.Su vista estaba cansada, su mente se perdía entre diversas y extrañas vibraciones, un ruido completamente lleno de estática era capaz de ser escuchado por los oídos de Ikal, rápidamente su visión se volvía cada vez más nublada, la sensación de la muerte sobre su espalda era tan familiar, una voz extraña, pero a la vez conocida cruzaba por sus oídos.— Los irregulares son seres tan extraños son seres que están incluso más allá de la predicción de dios, su determinación, su valentía, sus esperanzas y capacidades son desconocidas, incluso para los dioses, incluso para mí la deidad del universo... Entonces dime Ikal Hedeon ¿Hasta donde serás capaz de llegar?...— una vez aquellas palabras dejaron de sonar en su mente, sus músculos se tensaron con rapidez, su sangre bombeaba a través de sus venas con velocidad, sin decir absolutamente nada el moreno pegó un fuerte golpe con su frente al frío suelo de la villa.La sangre empezaba a escurrir de su frente cayendo al suelo y manchándolo de un rojo carmesí estas mismas gotas de sangre al tocar el suelo empezaron a arder cada una de estas hierbas secas, este suceso fue visto por cada uno de los allí presentes dejándolos con una gran duda en sus pensamientos, sus ojos color rojo tomaron aún más color hasta que flamas carmesíes envolvieron las llamas blancas y negras— ¡Acaso quieres matarte tú mismo! No, ese placer será solo mío bastardo ¡Me escuchas bastardo! ¡Yo te matare! — dijo Mulhem enfadado.El troll se acercó con su arma en mano mientras estaba un poco confundido con la mirada de su adversario, intentó acercarse aún más a su posición y aunque el pelinegro se veía lastimado no sabía el porqué de esa reacción tan diferente al cómo era antes.Los hermanos de Mulhem veían esto en terror, su hermano no se estaba dando cuenta de lo que estaba sucediendo y rápidamente intentaron advertirle pero... La imagen de una enorme bestia emplumada se proyectó detrás de él siendo está envuelta por el color rojo sangre de sus ojos similar al de una hermosa ave y a la de un dragón, estaba detrás de él aterrando a todos los presentes.Ikal se envolvió en esa aura flameante carmesí, estirando ambas alas, rápidamente se lanzó en contra del troll dando un potente golpe al rostro de su enemigo, un golpe tan potente que hizo temblar a todos pues todo se venía abajo.Aquel golpe mando a Mulhem a metros de distancia de su posición, no había podido ver la velocidad con la que el moreno había atacado.Sus ojos brillaban en ese color rojo sangre brillosos, en lugar del par de alas que usaba para volar, la figura de aquel ser divino para la cultura Azteca estaba detrás de él como una proyección de su propia energía, en ese momento Ikal reía, los hermanos miraban esto en impotencia pues miraban como el enorme ser enfoca su vista al malherido Troll.Para Mulhem el tiempo se había detenido la fuerza del impacto lo había dejado descolocado, no había visto en ningún momento el ataque de su enemigo, aquel que anteriormente había sido herido de gravedad estaba de pie delante de él con el puño clavado en el rostro.El troll sintió dolor e intentó pararse, pero el daño era grave, un sentimiento de peligro le avisaba que saliera de allí corriendo, un instinto asesino como ninguno otro se encontraba en el ambiente, volteó a su lado donde podía ver a sus hermanos y al Hobgoblin bastardo que le caía mal, sus rostros eran de terror, estaban impactados a simple vista no sabía por qué hasta que lo miro.Delante de él a dos metros de distancia aquel humano que había causado un desastre en la misión de su jefe, pero detrás de él se encontraba una criatura que jamás había visto en toda su vida, aterradora y majestuosa al mismo tiempo, cuerpo de serpiente con pelaje de plumas y alas, la enorme serpiente alada más aterradora que cualquier dragón que haya visto se colocaba delante de Ikal mientras rugía con fuerza un sonido tan aterrador como ningún otro.Intentó ponerse de pie, pero la herida aún no sanaba, ya no podía sanar... Era un misterio decir que los Trolls eran expertos en la regeneración, pero ese puñetazo lo había dejado tan lastimado que su regeneración no servía.Los Trolls jamás sufrían daños así por parte de humanos, al menos no él, él jamás había sufrido semejante humillación.Mulhem pego un grito al aire sin importarle nada, agarro aquel pesado mazo e intentó plantarle cara al humano.Un mazazo salió a toda velocidad hacia Ikal el cual al ver dicha acción sin siquiera inmutarse dio un salto hacia atrás lo suficientemente rápido para que dicho ataque no le diera, usando ambas alas se propulsó hacia la posición del troll nuevamente.Utilizando sus pies golpeó la zona de la rodilla con una fuerza aterradora, solo un crujido fue completamente escuchado por todos.Mulhem pegó un grito mientras sentía su pierna romperse y quedar completamente sin arreglo, qué demonios había pasado ¿El si acaso era humano? Acaso ellos se volvían tan fuertes en momentos de desesperación.— ¡No!. —Esto no existía, esto no era un mundo perfecto, él podía sentir el cuerpo del humano en constante dolor forzando cada parte de su cuerpo y lo noto al ver como más y más energía salía de su cuerpo.Él no era un guerrero de este mundo, él había visto las garras de la muerte y la había sufrido por completo, pasando más de 200 años en el vacío mismo, Ikal Hedeon incluso su antiguo ser jamás había sido alguien que se rindiera a las manos de la muerte, podía ver como aquel ser creado de su propia energía lo miraba emocionado expectante como si siempre había esperado este momento.Usando su pierna libre pegó una fuerte patada al rostro del adolorido troll, su herida anterior aumentaba en daño, la sangre no dejaba de salir de cada una de sus heridas, la barrera mágica aún no caía y ni sus hermanos ni nadie podía interferir.— ¡No moriré aquí oíste! tu ni nadie tendrán la oportunidad de matarme... ¡No volveré a morir una vez más! — gritó Ikal al cielo haciendo rugir al enorme ser.Ikal se colocó encima del troll dando fuertes golpes al rostro de su enemigo en ningún momento dejaba de atacar, sus puños eran manchados con la sangre cada parte de su ropa de igual forma empezaban a tomar ese color carmesí.Con cada golpe que daba, Mulhem no podía decir ni una palabra ni su regeneración le dejaba sanarse tan rápido como el daño sufrido.— ¡Maldito bastardo! Te mataremos a ti y a todos los humanos de este lugar ¡me oyes te daremos de comer a los Kindred! ¡Maldito hijo de perra!. —Caín golpeaba con toda su fuerza la barrera mágica, pero no había forma de romperla, una vez era lanzada estaba ligada a la vida de su portador, la preocupación aumentaba con cada puñetazo que el moreno pegaba, sus músculos se tensaban y la presión podía con él.Para su hermano Preftum tampoco era diferente al igual que su hermano él también se encontraba preocupado, pero también avergonzado por la raza de los Trolls esto era algo muy bajo, perder contra un humano era una falta al honor de la raza de los Trolls y su hermano había subestimado a su presa.Ikal tomó la cabeza del malherido troll mientras ambos hermanos golpeaban una y otra vez la barrera que Mulhem había creado, Ikal sin siquiera dudar de lo que hacía azotó fuertemente la cabeza y rostro del malherido troll al suelo, colocando su pie izquierdo encima de su pecho tomó el arma que el troll usaba, aquel pesado Mazo había sido tomado sin dificultad.Levantándose por encima de su propio cuerpo Ikal había decidido acabar con esta batalla, con la poca conciencia que le quedaba al troll miraba la propia escena de su muerte.La enorme bestia energética envolvía el mazo, un movimiento tan ligero y poderoso fue dado en contra del cráneo del troll mientras la sangre y parte del cráneo reventando salía disparado por todos lados y un enorme cráter se formaba.La pelea había terminado, Mulhem había muerto por ese golpe, un golpe con la fuerza suficiente para destruir por completo un camión de tres toneladas de peso como si de vidrio se tratase.Aquella densa barrera que el troll creó desaparecía rápidamente, Ikal levantó su mirada al igual que la enorme serpiente alada hacia los restantes, pasando rápidamente por la vista del Hobgoblin el cual había sacado dos espadas de media luna.Preftum y Caín no podían creer lo que había pasado, su hermano aquel que decía ser más fuerte había sido asesinado por un humano.— ¡Eres un infeliz desgraciado como te atreves a matar a mi hermano!. — gritaba Caín en furia.Ikal al oír dicha palabra simplemente se río para luego contestar.— Si intentas matar a alguien deberías estar preparado para que alguien te mate sabes... después de todo en este mundo y en cualquiera es matar o morir. —contestó Ikal mientras apuntaba detrás de ellos, la bestia detrás de el se reía creando un rostro de duda a los Trolls.Sin decir nada ambos hermanos dieron la vuelta solo para ver cómo Yuei el Hobgoblin de las espadas, que servía Siek atravesaba con una de ellas a Preftum desde la nuca.El Troll caía al suelo con aquella espada atravesando toda la unión de su columna vertebral con la cabeza.Con la otra espada un rápido tajo fue dado al brazo de Caín de manera limpia se había desprendido del cuerpo del Troll, la sangre salió a chorros mientras el troll grito en dolor.Ikal por su parte levantó aquel mazo mientras tomo impulso, el suelo debajo de él se prendió en llamas y este salió disparado frente Caín, un fuerte mazazo fue dado al rostro del Troll el cual había muerto debido al tremendo impacto del arma y la misma fuerza de Ikal.Los músculos de Ikal se tensaron rápidamente una vez había dejado caer aquel martillo gigante.Yuei tomó su otra espada y degolló a Preftum para acabar con la posibilidad de regenerarse de ese daño, Ikal miro al Hobgoblin con curiosidad mientras este último quitaba la sangre de ambas espadas.La bestia alada desapareció, pues el cuerpo de Ikal había entrado en colapso y se hinco debido al dolor, aunque quedó en guardia pues el Hobgoblin estaba delante del.— No te haré daño, no tenemos que matarnos. —decía Yuei con una voz tranquila.Ikal tomó la palabra una vez el Hobgoblin dejó de hablar, pues este había dejado de estar alerta.— ¿Por qué me ayudaste acabar con esos tipos, no estabas aliado a ellos?. —preguntaba Ikal de manera seria.Yuei por su parte escuchó dicha pregunta, guardó ambas armas en sus fundas y tomó algo de su mochila que estaba arrinconada entre unos escombros del lugar.— Soy un mercenario, a diferencia de ti no soy un aventurero, me pagan por hacer trabajos desde proteger a un criminal o acabar con alguien, nunca acepte este tipo de trabajos sabes estoy en contra de trabajar para secuestrar niños, esas mierdas no van conmigo, aparte no quiero morir como esos tipos por un humano que puede invocar un monstruo hecho de energía. —respondía el Hobgoblin.— Aun así, no contestaste mi pregunta, me gustaría que la contestaras por favor. —dijo IkalEl Hobgoblin miro a Ikal mientras sujetaba su brazo derecho, podía ver el cuerpo del moreno maltratado y bastante cansado, con calma se acercó al Moreno el cual se puso en guardia.— Te ayude debido a que las cabezas de estos tipos me darán mucho dinero, son criminales y miembros de la raza de los Trolls, los reinos humanos y semi-humanos pagarán muy bien por estos tipos, por cierto, toma esto, aún te falta llegar a Siek, un orco renegado y comerciante de esclavos y prostitución es un tipo metido en muchas cosas turbias. —dijo el Hobgoblin de manera tranquila.— ¿Qué se supone que es esto?, Y acaso no te importa defender a ese tipo después de todo te están pagando. —preguntó Ikal sosteniendo la pequeña botella de vidrio con un líquido verdoso.Yuei miro al moreno con un rostro entre el asombro y la duda.— Acaso... ¿No conoces las pociones sanadoras?, es una medicina que es capaz de curar las heridas. —pregunto el Hobgoblin.— Pociones sanadoras... La verdad es que no. —dijo Ikal.— Eres un tipo raro para ser un aventurero tan fuerte, cualquier aventurero conoce las pociones de sanación. —dijo el Hobgoblin.— Tengo mis razones. — dijo Ikal simplemente.— Bien, entonces deberías tomarla sanará tu cuerpo y ten algunas más, en los graneros se encuentran los niños y en los almacenes los adultos, las mujeres y niñas están con Siek, deberías apresurarte y acabar con esto. — dijo entregando Ikal una bolsa con varios botes de pociones.— Porque estás dándome estas pociones, porque quieres curar a los humanos si no son nada tuyo. — dijo Ikal.— Talvez tu no lo sepas... Pero la forma para que un Hobgoblin exista es debido a la reproducción de un Goblin o Trasgo con una humana, algunos son productos de amor y otros como yo... Nacimos por razones horribles. yo soy mitad humano, aunque sea un mercenario mi madre es humana, víctima de una violación de una raza tan violenta y enferma como lo son los Goblins... Oh eso me gustaría decir, la verdad es que los Goblins no son malos, la mayoría de ellos viven en su propio reino sin molestar a nadie trabajando en la fabricación, la mano de obra y viven una vida de comerciantes y guerreros, sin embargo poseen una enfermedad que los vuelve como tu los has visto salvajes, no sabemos como pararla sin embargo esa es la razones por lo que hay Goblins en estado salvaje y no actúan como seres con sentimientos.— dijo Yuei con un rostro serio y algo confundido.— Pero no puedo perdonarlos, por eso es que estoy aquí. — comento el Hobgoblin. — Lamento oír eso. — dijo Ikal.Yuei miro al moreno y solo asintió.— Mi madre vivió una vida de dolor, y no deseo que ninguna otra mujer sea afectada por ese tipo de situaciones, es por eso que yo estoy aquí he venido acabar con Siek, pero ahora que estás aquí, he podido encargarme de estos tipos. — dijo el Hobgoblin señalando el cuerpo sin vida de los Trolls.— ¿Entonces me ayudarás a vencer a ese tipo?. —preguntó Ikal.— Lamentablemente no puedo, hay Goblins y Trasgos que se acercan a la aldea debido a su derrota en contra de ese hechicero, por eso tú te encargas de ese enfermo de Siek y yo junto a mis compañeros del resto. —dijo el Hobgoblin.— Está bien, gracias. —dijo Ikal para luego tomar el contenido del frasco, aquel líquido verdoso bajo por la garganta del moreno, rápidamente un aura del mismo color que el líquido en la botella envolvió su cuerpo, sus heridas sanaban poco a poco y con más rapidez, un aura carmesí resaltaba del cuerpo del moreno y el flujo mágico aumentaba su cantidad, esto parecía ser aquella habilidad de guerrero que la diosa le había dicho ahora era mas fuerte.Yuei miro esto asombrado tal vez no había visto usar al joven frente a él habilidades de magia, pero la cantidad de poder mágico que poseía era grandiosa.— Liberaremos a los hombres y niños luego de allí todo depende de ti...— dijo el Hobgoblin mientras se preguntaba su nombre.— Ikal Hedeon, ese es mi nombre.— dijo Ikal.— Ya veo... Ikal Hedeon entonces yo me llamo Yuei Urnish.— dijo Yuei extendiendo la mano al moreno.Ikal al ver la acción de Yuei lo miró unos instantes para luego tomar su mano.Ambos se soltaron para luego Yuei alejarse un poco hacia los cadáveres de los 3 hermanos Trolls, concentrando un aura mágica que envolvía su cuerpo el Hobgoblin sacó un pedazo de hoja de una especie de libro para en cuestión de segundos su poder mágico transferirse a la hoja.Está brillo en un rápido color blanco muy brillante, extendiendo la hoja enfrente de los cadáveres, está rápidamente empezó a sacar dos especies de brazos de energía mágica los cuales tomaron los cadáveres y los metieron rápidamente dentro de la hoja.Ikal al mirar esto se impresionó, a lo cual Yuei contestó a la pregunta mental que Ikal se estaba haciendo.— Es magia de sellado, es una habilidad útil para guardar cualquier tipo de objetos, los puedes comprar en la capital cuando vayas, aunque esta es personalizada hecha por mi. —dijo el Hobgoblin riendo.— Se ve bastante útil este tipo de magia, al parecer conoces mucho de magia. —dijo Ikal.— Un poco, mi madre era una aventurera y se especializaba en magia por lo que yo, aunque sea un espadachín aprendí algunos trucos de ella. — dijo Yuei.— Ya veo, tu madre debió ser muy talentosa. — dijo Ikal.— Lo era... En su tiempo era una aventurera muy poderosa al menos para mi, sabes llego al rango platino... Pero eso no importa en este momento, liberaremos a los que están atrapados, tú encárgate de los niños yo me encargare de los adultos. —dijo Yuei algo emocionado al hablar de su madre pero se detuvo, el no era su amigo o un compañero.— Está bien, me alegro que haya sido una mujer fuerte de seguro con esto tu madre estará feliz. — dijo Ikal para retirarse.Ikal junto a Yuei tomaron caminos distintos, Yuei le miro por unos instantes mientras sonrió ese joven era curioso, cada uno se acercó a los lugares donde se encontraban las personas que les había tocado rescatar, rápidamente el moreno intentó abrir la puerta llevándose la sorpresa que esta se encontraba encadenada y cerrada con candado.— Maldición... No puedo dejar a los niños allí, tendré que romper la puerta. — pensó Ikal.Usando su fuerza el moreno agarró ambos extremos de la cadena, sus músculos se tensaron de un momento a otro mientras jalaba la cadena y la enorme puerta de madera empezaba a crujir.— ¡Para los que están allí dentro aléjense de la puerta la romperé! ¡Arg!— grito Ikal.La felicidad de los niños empezó a ser escuchada por los oídos de Ikal, este sin importarle nada tensó sus músculos tumbando toda la puerta en solo segundos, estaba sorprendido de romper esa cadena y puerta que eran tan resistentes como una de acero.Los niños empezaron a salir corriendo del lugar mientras algunos lloraban y otros abrazaban al moreno por el miedo que habían sentido.— Papá tengo miedo... — dijo un niño.— ¿Dónde estás papá? Mamá... — dijo otro niño.Ikal miró a todos los niños llegando a donde estaba él, los veía lastimados, golpeados, llenos de tierra y suciedad, ninguno de ellos pasaba los 10 años de edad, gracias a eso pequeños recuerdos sobre la guerra llegaban a su mente.Niños muertos por el campo de batalla, edificios destruidos y un sin fin de sangre, las máquinas y robots de combate arrumbados por el terreno, lágrimas caían de los padres y madres al ver a sus hijos morir de aquellas horribles enfermedades y el fuego cruzado, sin importar en qué país se encontrarán, sin importar en qué mundo, ver estas cosas era horrible.Su cabeza dolió de golpe mientras sus pensamientos cambiaron mostrando la imagen de una mujer delante de los cuerpos de varios niños, todo esto lo hizo volver a la realidad en segundos.No sabia que había sido eso pero lo había sentido tan real que una lagrima había bajado por su ojo.— No se preocupen, ya no tienen que llorar todo está bien, sus padres pronto estarán aquí se los prometo. — dijo Ikal con una voz tranquila.— Señor usted nos ha salvado... Es un héroe... — dijo uno de los niños más pequeños el cual abrazaba a Ikal de la pierna.— No, no soy un héroe pequeño, pero te prometo que acabaré con el tipo que los dejó así.— dijo Ikal el cual miraba a la dirección donde todos los adultos llegaban junto a Yuei.— ¡Papá! — dijeron la mayoría de los niños al ver a sus padres llegando.Cada uno de ellos corrieron aún más rápido y se lanzaron a los brazos de sus respectivos padres, algunos solo se quedaron quietos mientras miraban a sus hermanos mayores u otros solos se encontraban apartados del grupo.Ikal se acercó a Yuei, el cual caminaba con un anciano de la tercera edad bastante debilitado, mientras buscaba a uno de los niños.— Ahora que los padres y niños fueron liberados solo quedan las mujeres, las tiene encadenadas en la casa que tomó como base, mis compañeros Hobgoblins y yo derrotaremos a los que vengan, Ikal tú tienes que encargarte de Siek. — dijo Yuei.— Está bien, yo me encargo de ese maldito, confió en ti Yuei.— dijo Ikal.El moreno camino tomando la cadena y un machete que se encontraba entre los escombros, limpiándose un poco el joven miró a Yuei el cual miraba aquella arma típicamente usada para la jardinería.— Estás seguro de usar eso como arma. — dijo Yuei.— De donde provengo, esto fue usado para ganar revoluciones, fue usado por personas valientes que estaban cansadas de ser violentadas, después de todo está cosa aun es capaz de cortar. — dijo Ikal.Ikal tomó camino a donde se encontraba la firma de energía de todas las mujeres, Yuei en cambio desapareció del lugar en una corriente de aire dejando a los niños junto a los adultos confundidos por la actitud de sus Salvadores.Mientras tanto...La luz de la madrugada entraba por las ventanas de aquel malogrado almacén, el olor a sangre y sudor abundaba toda la habitación, la vida no era justa para muchas personas, sin importar quien seas, la vida no perdona, la vida te lastima hasta que no puedas más, y sin embargo sin que tu hagas nada, sin que lo merezcas esta lo hará...Habían pasado ya varios días desde el ataque a la villa, todo a manos del grupo del delincuente Siek Giurno uno de los miembros en la mafia de prostitución del bajo mundo de estos reinos un padrote conocido por muchos, con múltiples enemigos y un orco renegado de su reino, Siek era por mucho un ser sin escrúpulos alguien que no le importaba que sus víctimas fueran niñas.Siek tenía amarradas a las mujeres del pueblo, las colocaba como sus mercancías como un premio que él le había quitado a alguien más, no le importaba que incluso estas fueran menores, para él no importaba la edad solo el dinero y el poder, después de todo siempre había seres que les gustaran ese tipo de cosas...Miradas vacías, daños mentales por la tortura y el sufrimiento de ver morir a alguien todo esto estaba afectando la psique de cualquiera de los que se encontraba allí.Si nos queríamos referir al estado físico del desgraciado Siek Giurno tendríamos que decir que es un enorme orco de un poco más de 2.10 metros de alto, una piel entre el verde y el marrón, un cuerpo lleno de grasa y con algo de músculo, espalda ancha y con bastante estómago, unas piernas grandes al igual que sus brazos en lo que se lo podía notar bíceps marcados, su rostro era similar a la de los Trolls, con algunas diferencias notables en tamaño de la mandíbula era menor, tal vez una especie de rasgo sanguíneo compartían con estos, aunque los colmillos inferiores eran de menor tamaño.Se podría decir que Siek Giurno era un ser intimidante, aunque gran parte de su fuerza era debido al número de hombres a su cargo.El orco tomo a una de las mujeres que estaban encadenadas, la tomó con fuerza del cabello, tomó la llave del candado que la apresaba, aquella mujer tenía miedo de lo que le iba a pasar, ella lo sabía, ella lo vio, cada una de las mujeres de ese lugar sabía que era lo que le esperaba, si se tenía que decir algo de ella, era aquella apariencia de una adolescente de 16 años, aunque con una cadera bastante pronunciada al igual que su trasero y busto, tenia una piel aperlada y un color de cabello entre rubio y el castaño, tenía el cuerpo de una adolescente pero tenía una altura de 1.56m lo cual era muy pequeña, con una cara muy fina y rasgos femeninos muy marcados sus orejas son como las de un elfo de la ficción aunque se miraban un poco mas pequeñas a como había escuchado de Hugo.— No sabes lo mucho que me gusta ver esa cara de miedo que tienes, mocosa, no sabes cómo me encanta ver esa cara de terror, causa una excitación inimaginable en mí, jejeje, no cabe duda que las mujeres elfos son tan frágiles, tan fáciles de romper, aunque vuelo esa sangre humana en ti, no sabes lo placentero que es devorar una hibrida. — expresó el orco con un tono lleno de burla.— ¡No por favor! ¡No me hagas daño! —pidió la adolescente a Siek.Este miró complacido lo que estaba causando en la mujer delante de él, la tomó con fuerza aventándose en contra de una pared, cada una de las mujeres vieron esto con miedo.Entre ellas se encontraba la hija de Hugo, Fein, la cual estaba hirviendo en rabia al no poder hacer nada por salvar a su amiga, Fein intentaba con todas las fuerzas del mundo moverse, pero las cadenas como las heridas que portaba no lo permitían.— ¡Suéltala maldito! No le hagas daño, maldición te prometo que si le haces algo te arrancaré las pelotas me oíste ¡desgraciado!. — grito Fein.Fein Arizaga una adolescente de no más de 16 años, con una piel aperlada y un cabello negro corto que les llegaba a sus hombros, su cuerpo si se tenía que decir era el de una adolescente desarrollada lo más destacable era su altura la cual era de 1.78m bastante alta para ser una adolescente de 17, piernas fuertes al igual que sus brazos si se tenía que decir algo de ella era su fuerte físico con aquellos rasgos atractivos.— Eres muy habladora, Fein... Dime, que me hará alguien que ha sido derrotada y todos sus compañeros están muertos. — dijo Siek burlándose.— Eres un desgraciado... ¡Tú morirás, mi padre vendrá y acabará contigo como si no fueras nada! — dijo Fein al orco.— Jajaja... ¡Es increíble que aun tengas esa estúpida boca tuya! Te mostraré lo que pasará antes de que tu querido padre llegue bastarda, tú y tu preciada amiga, serán mis perras personales yo soy el jefe ahora y tú con ese collar no podrás hacerme nada, ni tu ni nadie podrá detenerme mocosa. —dijo Siek.Siek tomo a la chica de piel pálida con fuerza mientras rompía su ropa superior dejando caer aquella tela que cubría su cuerpo, la chica intentó defenderse, el orco al ver que la chica ponía resistencia, la tomó fuertemente del cráneo para luego pegar una cachetada directo al rostro de la mujer, las demás veían con dolor lo que estaba a punto de pasar, con el miedo de ser las siguientes.Con dolor en su cuerpo, ella ya no pudo poner resistencia a la acción del orco, las manos del asqueroso ser intentaron llegar a sus partes privadas, rasgando toda la ropa que le quedaba dejándola desnuda, sus verdes rápidamente estaban llenándose de lagrimas, sin embargo un pequeño brillo rojo apareció en su mirada, el orco vio esto y se quedo en silencio viendo esto.Un extraño recuerdo llego a su memoria, un recuerdo que ella jamás había vivido... la silueta de un joven aparecía delante de el mientras podía verle pegar a un grupo de personas mientras tomaba a otro chico y a ella.No sabia que estaba pasando pero Siek miró complacido el rostro de la chica sangrando, mientras no sabia que hacer, Fein gritaba una y otra vez que lo mataría si le hacia algo pero este no se detenía, la chica elfa dio un grito de la nada mientras su cabeza dolía debido a las memorias que estaba recibiendo.— ¡Esto es divertido! Oír el grito de los débiles es muy excitante, me divertiré mucho contigo niña— dijo Siek.— No maldición... Jódete hijo de perra, tu malnacido te cortaré la cabeza, déjala, déjala, ¡Déjala! — gritaba fuertemente Fein.El orco tomo a la mujer de los brazos levantándola en el aire, mientras lágrimas corrían de sus ojos, la risa maniática del criminal aterrorizaba a todas en el lugar, aventándose nuevamente al suelo aquel ser intento montarla, mientras su mejor amiga miraba la escena, sangre salía de los puños de Fein mientras lágrimas de impotencia eran vistas por las demás.— ¡Suelta a Hilda! Maldición suéltala, maldito imbécil, déjame tomar su lugar yo tomaré su lugar ¡Déjala en paz!— con todas sus fuerzas Fein intentaba romper las cadenas.— Por favor... alguien ayúdeme... Mamá, abuelo... No quiero morir, por favor... Ayúdenme...— imploraba en sus pensamientos la ahora nombrada Hilda.La risa maniática del repulsivo ser era capaz de oírse en todo el lugar, el terror, el miedo, la desesperación, el dolor, todas esas emociones atacaban a cada fémina de ese lugar.Cuando todo parecía perdido, cuando la esperanza estaba a punto de morir, la puerta de aquel lugar voló en varios pedazos, el sonido de la madera y el suelo rompiéndose lleno el corazón de todas con esperanza.Siek volteo hacia la entrada de aquel lugar, sin siquiera poder reaccionar sintió que algo golpeaba su rostro, un potente puñetazo se incrustó en el rostro del ser verdoso, sin la capacidad de reacción el cuerpo de Siek había salido disparado a alta velocidad debido a la potencia del puñetazo.La sangre del orco salpicaba el rostro de la mujer Elfa, la cual, al ver frente a ella, aquel ser repulsivo había sido clavado en la pared con fuerza.Fein estaba que no lo podía creer, aquel ser que pesaba al menos 250 kilogramos había salido disparado varios metros en contra de la pared, un joven de tez morena se encontraba de pie frente a su amiga.El joven volteo hacia su izquierda, enseguida se dio cuenta del estado en el que se encontraba la víctima que Siek había intentado atacar, sin embargo al ver su rostro una furia recorrió todo su cuerpo, sus puños se tensaron, pero ignoro esto de momento quitando lo que quedaba de su chamarra y camisa se la entregó a la chica, quedando sin la parte superior de su ropa.— Toma ponte esto, te prometo que ahora estarás a salvo, una vez maté a ese desgraciado todo esto acabara. — dijo el joven mientras miraba a los ojos a Hilda.Hilda sintió un alivio pasar por todo su cuerpo, sus sentimientos y fortalezas la habían dejado por el momento, las lágrimas escurren como agua por una cascada, cada emoción reprimida por el trauma sufrido hacia flote mientras miraba a su salvador, su mente le hacia ver aquel chico que había visto en aquella memoria verla ahora.Rápidamente miro su cuerpo desnudo y se apeno tapándose por completo, el moreno le miraba pero no podía ver lujuria ni ninguna clase de sentimiento perverso, en cambio lo único que podía sentir que provenía de ese joven era... Ira... Rabia y odio.— ¿Quién eres? — preguntaba Hilda al moreno delante de ella tapándose esperando escuchar su nombre.— Ikal Hedeon, mi nombre es Ikal Hedeon. — contestó el joven dando una sonrisa a la chica.— Ahora estás a salvo, por favor libera a las demás con esto y salgan de aquí, yo me encargaré de Siek. — dijo Ikal entregando unas llaves a la chica.De los escombros de la madera destrozada y los diversos objetos que se encontraban en la casa, Siek Giurno salía de estos enfadado mientras tocaba su rostro ensangrentado.— ¡Tú eres un bastardo! Como te atreves a... — intento decir nuevamente Siek, pero fue callado con una fuerte patada al estómago por parte del moreno.Ikal rápidamente pasó a una posición de boxeador para empezar a golpear rápidamente una y otra vez al estómago del orco, sin darle oportunidad de respirar pegó un potente codazo de muay thai dándole de lleno al rostro dejándolo en el suelo.El moreno no había dado oportunidad de contraatacar a Siek, este sintió mucho dolor por los potentes golpes que Ikal había dado.Todas las mujeres en el lugar miraban sorprendidas al moreno el cual estaba logrando lo que ellas habían querido hacer desde hace días, el moreno miró al padrote, sacó el machete de su cintura mientras miraba como la chica ahora un poco más vestida liberaba todas del lugar.— ¡¿Por qué?! Cómo te atreves ¡Maldito humano! —Siek se levantó en cólera intentando golpear con sus puños al moreno.Cada golpe que el orco daba no acertaba, Siek Giurno no tenía técnica en sus golpes, la cólera y su mente llena en furia no dejaban pensar de buena manera al asqueroso ser, Ikal con rapidez contrato dando dos patadas a las rodillas perdiendo la estabilidad y por consecuencia cayendo al suelo.Ikal dio un pisotón a donde el Orco se encontraba el cual pudo esquivar por suerte y tomó el pie del moreno lanzándolo en contra de una de las vigas de la casa.Ikal usando sus alas frenó el impacto contra la viga, haciendo que la casa empezara a incendiarse en un potente fuego carmesí, colocando ambas piernas en la viga se impulsó dando un fuerte puñetazo a la barbilla del padrote.La sangre escurría del rostro de Siek una vez más mientras sus ojos empezaban a ser llenados de sangre debido al estrés en el que este se encontraba.— ¡¿Quién demonios eres?! ¡¿Porque demonios te metes en mis asuntos?! — dijo Siek el cual tomaba su rostro en dolor.— ¿Acaso tengo que decir mi nombre a un cerdo como tú?. — preguntó Ikal viendo al orco.— ¡Maldito imbécil! Te matare y cuando lo haga matare todo lo que amas, debes ser de ese maldito pueblo no, entonces yo mismo los matare también a ellos para que te des cuenta que... — gritó Siek pero de golpe cayo al suelo de nuevo pues una patada había sido dada al rostro mientras este cayo por el dolor.— Todo lo que quería ya no esta conmigo. — dijo Ikal mientras sostuvo su arma y le miro para luego suspirar. — Así que deja de gritar estupideces ¿Acaso eres un personaje de un manga o algo por el estilo? Estás a punto de morir Siek Giurno, puedes verlo como un castigo divino, de todas las mujeres, niños y niñas que has destrozado sus vidas. — dijo Ikal serio.— ¿Morir? Eres idiota yo no moriré porque soy Siek Giurno, mi historia me respalda, mis actos me respaldan, muchos han intentado matarme y mírame aquí sigo. —dijo Siek el cual tomó un espadón que se encontraba clavado en uno de los escombros.— Por ahora. — dijo Ikal el cual tomaba el machete con fuerza y la cadena en la otra mano.El fuego empezó a expandirse por toda la construcción, las llamas brillaban fuertemente en la oscuridad de la madrugada, las mujeres corrían junto a sus hijos, esposos y hermanos, lágrimas de felicidad podían verse en cada una de las personas.Ikal vio como la última mujer salía con la chica que había rescatado, dando un silbido, la mujer volteó a verlo, Ikal simplemente pasó una bolsa rodando por el suelo de la habitación y la mujer rápidamente vio el contenido de estas.— Úsenlas con las heridas, mientras yo me encargo del cerdo. — habló Ikal haciendo girar la cadena.Hilda tomó una de las pociones dándoselas a Fein, está la tomó y lentamente sus fuerzas volvían, la luz en sus ojos y su magia volvía poco a poco.Fein abrazó a Hilda con fuerza mientras rápidamente volteo a ver al chico de piel morena, usando sus ojos la chica rápidamente se dio cuenta del increíble poder mágico que ese tipo tenía.La imagen de un enorme dragón alado completamente diferente a todo lo que había visto hasta el momento era capaz de ser vista en su espalda, el moreno mantenía su mirada fija en lo que ahora era su presa, Siek Giurno.Diferentes símbolos rúnicos empezaron a ser vistos alrededor de la imagen de aquel ser solo siendo visto por ella misma, el cual con furia gritaba y aumentaba el viento por lo que el fuego de la casa aumentaban en cantidad, aquel ser hacía temblar a Fein pues de reojo la miraba como si ella no debía de ver esto.Fein había sido sacada de su trance por Hilda la cual había recibido instrucciones de Ikal para que salieran de aquí.Ikal levantó el machete y el orco levantaba aquel pesado espadón, la respiración era pesada debido a las llamas que cubrían toda la casa, Siek respiraba difícilmente, mientras Ikal se encontraba como si nada, se había acostumbrado a las llamas debido a la gran guerra que había tenido, por lo que solo miraba como aquellas llamas carmesíes empezaban a girar alrededor de él.El fuego se sentía tan natural, tan cálido, tan poderoso, como si el pudiera tocarlo dando una mirada seria, se lanzó en contra de Siek, el cual cubrió el primer corte del machete de Ikal, rápidamente fue golpeado por un golpe dado con las cadenas de su otra mano golpeando el rostro del orco, las cadenas impactaron de lleno creando una herida en toda la cara.Siek bufo por el daño y dando un golpe con todas sus fuerzas con el pesado espadón, debido al peso de este reventó el suelo debajo pero Ikal lo esquivo sin problemas, era lento e inmediatamente dio dos fuertes tajos que rajaron el pecho del orco.Siek grito en dolor dando otro tajo que nuevamente fue esquivado, sin dar oportunidad un fuerte latigazo fue dado al rostro del orco de nuevo el cual lastimó gravemente su visión, reventando su ojo derecho.— ¡Maldito!— grito Siek cayendo a las flamas el cual rápidamente empezaba gritar por como aquel fuego intentaban consumir rápidamente su cuerpo.Siek rápidamente golpeó el suelo creando un montón de montículos de rocas por todo el sitio, Ikal fue golpeado por uno siendo lanzado hacia el techo de la edificación rompiéndolo por el impacto, aunque se detuvo en el aire.Su estomago había resistido el impacto, sus costillas seguían bien luego de aquel imponente golpe, si el siguiera siendo un humano normal sabia que eso dejaría al menos unas cuantas costillas rotas, pero este daño lo haría mas fuerte.El moreno bajó al suelo mientras esto era visto por todas las personas que habían rescatado las cuales estaban expectantes del resultado del combate.— ¡MALDITO INFELIZ, ESCUCHAME BIEN! ¡NADIE ES CAPAZ DE VENCER A SIEK GIURNO! — dio un grito el orco a todo el cielo que fue escuchado por todos allí.Siek se encontraba completamente quemado de la piel mientras su ojo faltante sacaba un montón de sangre y su cara era de odio puro.Ikal por su parte daba una sonrisa engreída mientras se abalanzaba nuevamente en contra del Orco sin decir una palabra.Siek tomó el espadón envuelto en energía de un color negro, el Orco se preparo para dar un potente tajo, que lanzaría una vez Ikal llegara a su rango de ataque, cuando intento cortarlo fallo, pues Ikal al último momento utilizo ambas alas llamantes, las cuales dio un impulso lo suficientemente rápido para esquivar el corte de la espada.Energía oscura salió del suelo donde el corte se dio, el daño de la energía oscura había impresionado a Ikal.— Así que eso es otro tipo de magia. — pensó Ikal para si mismo mientras se encontraba en el aire. Usando el punto ciego del orco, un potente corte con el machete fue dado al cráneo de aquel ser, el daño fue critico, tanto así que el orco había tardado en responder al daño pues no había captado de donde venia esa sensación al haber perdido su vista.Un montón de sangre salía donde el machete se había clavado, Siek dio un grito de dolor y un montón de filos rocosos salían de la tierra donde él se encontraba parado intentando defenderse.Uno de estos corto gran parte del abdomen del moreno, la roca paso a su lado cortando la piel y algo del músculo, sin embargo, una vez este esquivo el corte de la roca a duras penas se impulsó con ella para ganar velocidad, usando una pirueta en el aire gracias a su nueva agilidad, Ikal dio una potente patada a la manzana de adán rompiendo la tráquea del orco el cual solo pudo mirar la pierna extendida y una corriente de dolor y falta de oxigeno llego de golpe.El impacto de la patada del irregular había roto por completo el cuello de Siek, lágrimas de sangre salían por la impotencia de no poder respirar luego de unos segundos de retroceder, pues aquel que se consideraba alguien intocable estaba siendo llevado a este punto.Usando la cadena la paso por delante del cuello amarrándolo, rápidamente el orco fue tumbado al suelo haciéndolo caer debido a la cadena.El Orco intentaba quitarse la cadena con la poca fuerza que tenía, lágrimas de impotencia salían de sus ojos cada vez mas, la memoria de cada pecado y las almas de todas las personas que había matado y dañado a lo larga de su carrera como criminal lo miraban fijamente en ese momento.— Vaya es increíble la resistencia que posees solo para ser un cerdo, cualquier otro ser vivo hubiera muerto solo con el corte del machete, sin embargo mírate, decías que eras intocable, que nadie atacaba a Siek Giurno... Y ahora mírate... Das asco que alguien como tu este llorando por su vida, con el cuello roto y esa jodida resistencia tuya te permite aún seguir viviendo solo para sufrir mas tiempo. —dijo Ikal en voz alta con veneno en sus palabras.Las llamas de su espalda aumentaban su tamaño quemando cada parte del sácate y pasto que se encontraba por la zona, el calor aumentaba y aquellas flamas carmesíes aumentaban su intensidad.Ikal jaló fuertemente la cadena mientras esta hacía presión en el cuello roto del orco, poco a poco Siek perdía la luz en su único ojo visible, sin la capacidad de usar magia debido al estrés mental en el que se encontraba, no podía hacer nada más que ver la sonrisa de todos aquellos que a lo largo de su vida había acabado.— Esto es tu castigo divino Siek Giurno.— dijo Ikal de manera seria.El moreno rápidamente con toda su fuerza tronó cada parte que quedaba del cuello hasta que este parecía arrancar el cráneo del orco, Siek Giurno había muerto por la falta de aire y el tremendo daño a su cuello.Mientras las flamas del cuerpo de Ikal empezaban a quemar por completo el cuerpo del orco.— Amenaza neutralizada... Misión cumplida. —dijo Ikal para sí mismo.Todos se miraron al haber visto aquella escena, sus vistas se alejaron de aquel aventurero mientras pensaban en aquel estilo tan violento de pelear, incluso sintieron algo de miedo, incluso Fein tenia que decir que eso había sido demasiado salvaje para ella.El único que estaba visiblemente feliz era Yuei Urnish, el cual estaba llegando a la zona de combate solo para haber visto la parte final de la pelea.— Buena pelea Ikal Hedeon. — dijo Yuei en voz alta el cual acababa de llegar junto a sus demás compañeros Hobgoblins.— Cumplí con lo que acordamos, aunque lamento quemarlo aún no controlo esto. — dijo Ikal mirando aquellas flamas.— Te creo, eres una persona realmente sorprendente, deberías ser mercenario ganarías mucho dinero allí. —dijo Yuei.— No gracias, estoy retirado de esa mierda, creo que prefiero hacer misiones normales de un aventurero o ganarme la vida en alguna otra cosa. — dijo Ikal dando una sonrisa cansada.— Si así lo deseas entonces no te pediré que te unas, sin embargo, piénsalo alguien con tu talento para matar podría ser útil en nuestro equipo. —dijo Yuei.— ¿Entonces qué pasó con los Goblins restantes?. —preguntó Ikal.— Mi grupo y yo los acabamos no te preocupes por eso deberías ir a que te curen, te di las últimas pociones que quedaban por lo que ya no tengo conmigo. —dijo Yuei.— Ya veo gracias, quien diría quien era mi enemigo se volvería un aliado. — dijo Ikal.— Míralo más como suerte, hiciste mi trabajo más fácil, gracias a ti he recibido mucho dinero así que ¿Qué más da? ahora somos conocidos. —dijo riendo Yuei.— Tienes razón, tómalo como desees entonces. — dijo Ikal.— Bueno me retiro Ikal Hedeon, cuando tengas algo de tiempo pásate por la capital, tal vez podamos vernos de mejor manera en el bar de Romina. — dijo Yuei el cual rápidamente salió del lugar dando una sonrisa sincera al pelinegro.— Estaría bien, si puedes pagarme unos tragos de alcohol, sería perfecto. — dijo Ikal mientras sonreía.— Dalo por hecho, Campeón de los humanos. — dijo Yuei el cual en segundos este había desaparecido junto a sus compañeros, los cuales miraban impactados a su compañero sin creer lo que su jefe decía.Ikal miró sorprendido a donde había estado el Hobgoblin, qué demonios significaba eso de Campeón de los humanos, dejo de pensar en ello y dio un suspiro mientras tocaba la herida de su abdomen está empezaba a arder.Pequeñas llamas carmesíes salían de su herida intentando sanarla, pero de un momento a otro este cayó al suelo mientras la sangre escurría del abdomen, el cansancio estaba presente, y su temperatura corporal estaba arriba de los 42 grados, su vista empezaba a ser borrosa, mientras aquel ruido de estática empezaba a molestarlo nuevamente.— Maldición no otra vez... ¿Aun mi cuerpo no esta completo? — dijo Ikal en tono de pregunta el cual perdía la conciencia.La oscuridad llegaba a Ikal, las flamas que anteriormente lo rodeaban lo habían dejado, su cuerpo estaba pasando la factura de ser presionado a ese punto, un rostro de dolor empezaba a tomar forma, mientras las personas del pueblo intentaban de ayudar a quien los había salvado.Hilda corrió rápidamente a donde se encontraba el moreno, tomándolo con cuidado intentó checar su temperatura dándose cuenta de los grados que este poseía.Dando una llamada de auxilio cada hombre del lugar llevó rápidamente a Ikal a una zona con agua para bajar su temperatura mientras la luz de la luna iluminaba el camino.Bajo esa brillante luz que había sido testigo de todo lo que había pasado, aquella chica de piel blanca solo podía rezar por la salud del joven que había salvado su vida, fuertes plegarias eran lanzadas al cielo mientras algunas lágrimas caían de sus ojos.Solo el tiempo será testigo de lo acontecido en ese lugar y el mañana mostraría lo que le esperaba a Ikal Hedeon.Fin del Volumen 1 - Capítulo 3.Descripción Personajes:Yuei Urnish: es un hombre Hobgoblin de apariencia humana fornido con una altura grande de al menos 1.80m cuerpo delgado y un cabello largo negro, de piel verde y ojos de color rojo originalmente amarillentos, tenía una apariencia más humanoide con una etnia algo rusa.Fein Arizaga: Es una joven mujer humana de cuerpo formado algo fornido y femenina de piernas grandes, busto mediano, cabello cortó de color negro y ojos algo violetas/negros con una edad aproximada entre los 17 años con una estatura entre los 1.78m, con etnia algo española/francesa.Hilda Richter: Tiene la apariencia de una mujer joven, de cuerpo atractivo cadera grande al igual que su trasero, acompañada de un busto grande para su altura de cabello rubio/castaño, ojos de color verde y unas orejas de elfo similares a los de la ficción, de rostro atractivo semejante a la de una alemana o sueca, tiene una Estatura aproximada en los 1.56m. y una edad de 16 años casi 17 años.Siek Giurno: Altura aproximada entre los 2.10 metros a 2.20 metros, tenia una piel entre el verde y el marrón, era visiblemente adulto, con un cuerpo lleno de grasa y algo de músculo, espalda ancha y con bastante estómago, unas piernas grandes al igual que sus brazos en lo que se lo podía notar bíceps marcados, su rostro era similar a la de los Trolls, con algunas diferencias notables en tamaño de la mandíbula, la cual era de menor tamaño que la de un Troll.Apariencia Trolls: Apariencia algo humanoides de más de 3m de altura, sus cuerpos eran la mayor parte músculo, aunque había partes que mantenían grasa, su complexión era ancha pero tampoco tanto, aunque su espalda era más ancha, su piel grisácea celeste resaltaba bastante, sus ojos eran de varios colores algunos amarillentos otros verdosos otros incluso azules, su nariz era humana sus orejas de igual forma eran similares a las de un elfo o incluso a la de un Goblin, su mandíbula era ancha y bastante cuadrada y dos colmillos salían en sentido contrario a los de un diente de sable, su cabello tenía varias tonalidades de colores, estaba entre el castaño o el rojizo, su estilo era desaliñado y largo, algunos recogidos en un mohicano y otros dejando su cabello largo.Apariencia Goblins Y Trasgos:Goblins: Los Goblins tenían apariencia de humanos más pequeños verdosos con orejas puntiagudas y cabello, al igual que los humanos pueden ser calvos y su piel es verdosa en diferentes tonalidades, no son seres feos como en las historias de ficción, pero son diferentes a los humanos, tienen un cuerpo más delgado y una altura aproximada entre los 1.50 o 1.20 metros, poseen dos grandes ojos de color amarillento y sin cabello corporal más que el de su cabeza.Trasgos: Los trasgos son seres similares a orcos de ficción, con cuerpos más gordos y grandes, una apariencia algo más salvaje, manteniendo una apariencia física similar a la de los Goblins, sin embargo la enfermedad lo hizo evolucionar a esta forma, pero en mayor tamaño y masa.