Desde el primer día del que tengo memoria solo recuerdo ver ese techo blanco... el que se podría decir que fue mi primer recuerdo creo que fue ver a una mujer alejándose de mi pequeño cuerpo, en ese momento no entendí que era lo que hablaba con el que pronto se mostraría como mi 'padre', pero solo mas adelante pude comprender que lo que ella dijo fue: Espero no volver a saber de ninguno de los dos.
En el momento en el que pude entender el significado de esas palabras mi corazón ya estaba podrido por haber estado tanto tiempo con ese hombre, por lo que sinceramente no me interesó en lo absoluto si la que era mi 'madre' me había abandonado o no me quería, dejándome con una persona como ese hombre.
Toda mi infancia me la pasé viviendo en una casa donde solo se me permitía estar en una sola habitación de 25m cuadrados, en esa habitación se me dieron implementos para el entrenamiento físico, un baño con una ducha e inodoro. Luego de eso no había nada más digno de mención, todas las comidas que se me daban las comía en el suelo y estudiaba todo lo que me decían que debía aprender, en caso contrario mi 'padre' me daría un castigo ejemplar, que solo con Probarlo una sola vez no dieron mas ganas de repetir el mismo plato.
Otra cosa que podía resaltar de mi infancia fue que nunca vi a ninguna otra persona además de mi padre y personas que traía para que peleara con ellos.
Fue un dolor luchar contra adultos cuando era un niño por la gran diferencia física entre los dos, pero al final me las pude arreglar para que no me dejaran hecho pulpa en el suelo.
Al final, para bien o para mal, a los 15 años de edad escapé de esa casa asesinando al que era mi padre.
' Que descanses en el infierno ' fue lo que pensé cuando incineré su cuerpo en el patio y enterré sus cenizas a una gran profundidad para que nadie pensara en buscar su cadáver.
Al ya no tener ningún beneficio en quedarme en Japón agarré una gran suma de dinero para dirigirme a Corea y poder alquilar un pequeño departamento, además de llevarme algo de su ropa ya que éramos de la misma talla.
En Corea obtuve un buen trabajo como obrero en la construcción de una obra, por lo que no vi necesidad en buscar nada más.
Si quisiera ir a alguna Universidad para sacar algún título universitario tendría que sacar alguna clase de evidencia de mis estudios, por lo que esa era una opción que nunca podría elegir, además de que no estaba descontento con mi trabajo, ya que me daba el dinero suficiente para sobrevivir.
Durante mi tiempo en Corea por simple curiosidad intenté hacer un examen universitario para ver en que nivel estaba mi conocimiento, solo para darme cuenta que esos temas que se veían eran cosas que ya había visto cuando tenía 6 años.
Mi vida en Corea se puede decir que fue bastante entretenida. Aunque igualmente seguía realizando el régimen de entrenamiento que se me había impuesto desde pequeño, por fin pude conocer lo que significaba el término de la libertad.
Ahora podía ir a donde quisiera a la hora que quisiera, podía comer cualquier cosa, era un momento de mi vida bastante agradable si podía decirlo yo mi mismo, estaba feliz con mi normalidad.
Actualmente acababa de cumplir 21 años... la vida seguramente pasa muy rápido, hace 20 minutos había terminado mi turno laboral y estaba en un tren de camino a mi departamento.
Al llegar a mi departamento me tiré en mi cama sin importarme mucho en hacer algo como ponerme a celebrar o bañarme, ya que no estaba particularmente sudado.
De la nada escuché como mi celular sonó, normalmente dejaría eso de lado para ver la televisión y ya luego ver quien me había escrito, pero como no había nada interesante que ver a esta hora agarré mi teléfono, viendo que la fecha de hoy era el 10 de Octubre, pero lo que mas llamó mi atención fue que la pantalla estaba de alguna forma rara, ya que había un recuadro que decía lo siguiente.
' ¿Vas a participar en el juego? ' Ante esta escena sentí ganas de reírme, lo más probable es que alguien cercano a mi haya intentado hackear mi teléfono para hacerme una broma. Este mensaje era particularmente parecido a una frase de una película de terror, por lo que probablemente haya sido la chica con la que salí hace un par de noches, a esa chica le gustaban ese tipo de cosas y trabajaba como técnica en una pequeña empresa de electrónicos, por lo que era probable que haya sido ella.
Dejándome influir por el flujo de los eventos presioné la opción que decía 'si'
Luego de que presionara esa opción automáticamente todo se volvió oscuro para mí, para luego comenzar a escuchar las voces de extraños.
''¡¡¡Déjanos salir de aquí!!!'' ''¿Donde estoy?'' ''¿Que es este lugar?'' ''Mamá, Papá'' fueron los Múltiples comentarios que escuché, para luego volver abrir los ojos.
Cuando abrí los ojos me encontré en un lugar algo oscuro reunido con múltiples personas desconocidas, pero lo que más me interesó fueron las piedras brillantes que iluminaban tenuemente la habitación y una estatua que se parecía a las que se usaban en las catedrales.
Cuando pude mirar mis alrededores me di cuenta que parecía que estábamos encerrados por algo que parecía ser invisible, además de que estábamos rodeados por múltiples seres que se asemejaban a los monstruos que se usaban en los libros para las historias de fantasía.
En el momento en el que más personas parecieron darse cuenta de la situación en la que estábamos comenzando a desesperarse aún más, haciendo preguntas a los que tenían a su costado para preguntar si sabían algo acerca de esto.
Luego de que pasó un par de minutos la estatua comenzó a brillar de tal manera que era difícil incluso mirarla, no pude evitar pensar que si esa luz entrara en contacto con algún monstruo o humano podría incendiarlo o causarle quemaduras graves.
'' Bienvenidos al otro mundo '' de repente esa estatua comenzó a hablar de la nada, pero lo que más me sorprendió fue lo que dijo... ¿Otro mundo?
'' En primer lugar les agradezco que hayan aceptado nuestra invitación '' ante lo que había dicho mis oídos dejaron de captar el sonido de los reclamos que los demás realizaban para centrarme en lo que tenía que decir esa estatua... ¿acaso ese mensaje era una invitación para ingresar a otro mundo?, esto no sonaba nada bien.
''Ustedes han sido elegidos como los héroes que salvarán este continente moribundo'' Enserio está intentando hacer esto... me pregunto si será alguna especie de Dios o algo así, desde mi punto de vista lo más probable es que nos hayan llamado a este lugar para observar como se desenvuelven los humanos con sus propias disputas para sobrevivir, estaba claro que si tan solo quisiera salvar a este 'continente' al que se refería podría hacerlo sin problemas ya que no tuvo problemas para traer a personas de otro mundo a este lugar, ¿Enserio los Dioses no pueden dejar vivir sus vidas a otros?, fue verdaderamente molesto que me haya visto envuelto en esto solo por presionar en lo que pensé que era una broma.
'' Por favor, presente atención a lo siguiente que voy a decir, tendrá mucho que ver con su supervivencia. Lo primero es que no todos podrán ir al Continente, solo las personas que hayan completado el tutorial tendrán ese derecho. En este momento están en un lugar que se llama 'punto de partida' que es en pocas palabras un punto de partida, en este lugar se les proporcionará comida, bebida y armas '' ante esto hubieron Múltiples comentarios cosa que hizo que tuviera que detener su bombardeo de información, pero me sentí tentado a preguntar si los recursos serían infinitos.
''En segundo lugar, todos ustedes pueden recibir clases especiales en este mundo y solo algunos individuos recibirán un 'rasgo' único, que está dividido en cuatro clases, siendo comunes, raras, heroicas y legendarias, este lugar fortalecerá sus habilidades y los ayudará a crecer, podrán entender a lo que me refiero cuando digan
''Ventana de estado'' murmuré para mi mismo para ver algo aparecer delante de mi.
- Nombre: Kiyotaka Ayanokouji
- Edad: 21 años-
Título: Aquel que se sobrepone a la adversidad.-
Carácter: Cambiante.-
Clase: Ninguna Abajo de mis datos personales aparecía un círculo donde señalaba unas características en particular.
Atributos:
Fuerza: 30 [heroico]
Destreza: 30 [raro]
Suerte: 0 [común]
Inteligencia: 70 [legendario]
Poder Mágico: 0
Agilidad: 30 [heroico]
Estamina: 50 [heroico]
'Estas son... mis habilidades' pensé mientras observaba lo que tenía delante de mi.
Luego de eso apareció algo de la nada que me llegó a sorprender.
-Sistema-
[Has obtenido un rasgo] [Has obtenido un rasgo]
Al ver eso directamente presioné uno para que aparezca la información de lo que era
- Ojo de la mente [Heroico]: Puedes inspeccionar las ventanas de estado y los rangos de talentos ocultos de ti mismo y los demás.
"Esto parece muy útil... incluso diría que está roto, veamos el otro"
- Maestro [raro]: Las personas a las que les muestres tu disposición de enseñar podrán tener un crecimiento aun mayor que el normal. Si la persona a la que enseñas tiene buenos resultados también serás beneficiado con recompensas brindadas por el sistema.
'Supongo que esto va bastante conmigo... teniendo que aprovecharme de los demás, pero eso no importa. ¿Verdad?, al final solo lucho por mi supervivencia' pensé mientras veía como lentamente se desvanecía la barrera que evitaba que nos atacaran los monstruos.
Sabiendo que muy pronto tendría que pelear decidí utilizar una de las ventajas que había dicho la estatua que tendríamos, siendo esta el arma.
Aunque no eran armas de gran calidad o filosas, aun así eso sería mejor que pelear con las manos desnudas con monstruos que me superan en capacidad física.
Las opciones que daban eran espadas, lanzas, arcos, mayales y demás armas, probablemente si tuviera miedo a recibir daño utilizaría una lanza, que me permite pelear a corta distancia dándome cierta seguridad de recibir algún daño por su longitud, pero opte por la elección de utilizar espadas gemelas.
Esta decisión se basaba en que para utilizar este tipo de arma tenías que tener una gran habilidad con cualquiera de las dos manos, además de que tenías que tener una gran fuerza en la muñeca al solo utilizar una mano por cada espada, a todo eso se le podía incluir que no tenían la misma longitud que la espada normal, pero las espadas gemelas se ajustarían mas en un estilo impredecible y sería mas beneficioso al pelear contra otros humanos.
'Supongo que ahora puedo probar mi habilidad' pensé mientras comenzaba a visualizar las ventanas de estadísticas de los demás.
Al ver mi calificación salieron cosas que podrían haber herido a una persona de corazón de pollo como yo en cualquier otra situación, pero ahora estaba full focus.
Calificación general:
-El talento que posee es mediocre y como persona es una mierda, su probabilidad de sobrevivir es alta, pero nunca será querido por los espíritus por ser un ser humano tan asqueroso, ojalá su suerte haga que le caiga un golem encima de su cabeza para que muera lo mas pronto posible-
Las pocas personas de las que logré ver su ventana de estado tenían un talento mediocre y habían pocas personas con algún tipo de rasgo, cosa que me hizo preguntarme que tan probable era conseguir uno.
Por buena suerte logré encontrar a una persona con una stat's en particular que sobresalía entre todas la personas que había visto.
'Así que un 30 - heroico en resistencia. ¿Eh?, supongo que puede llegar a ser un buen escudo de carne' pensé mientras la barrera comenzaba a romperse y me acercaba hacía ese tipo sin siquiera ver su nombre. Al final todo lo que importa son las habilidades, ¿Verdad?.