Hace 8 meses – Azula Pov
"tienes visitas princesa Azula." sentí una punzada de molestia, pero aun así cerré mi libro, uno que ya había leído una docena de veces, era molesto, solo había una persona que venía a verme después de todos estos años y era una completa pérdida de tiempo.
Deje mi libro aun lado y me quede quieta, pude escuchar los fuertes seguros de la puerta abrirse y dos guerreras Kyoshi entraron cautelosamente, les sonrei burlonamente lo que las hizo erizarse, eran tan fáciles y divertidas de molestar.
Realmente, deberían haberse quedado en su pequeña isla donde la fundadora de su isla, la cazadora Kyoshi, las dejo. Volviéndose guardaespaldas del señor del fuego, que tonterías.
Pero fue lo único que hice, había aprendido, que, si bien podría contra dos de ellas fácilmente, mi pequeña celda estaría inundara de mas de ellas en un abrir y cerrar de ojos, por que lo deje que las susodichas me colocaran la camisa de fuerza y me encadenaran como de costumbre cada vez que se requería que me sacaran de la habitación.
Una vez que estuve completamente atada, las enfermeras entraron con una silla de rueda y me empujaron a ella antes de arrastrarme por las instalaciones, los pasillos que ya había recorrido de la misma forma docenas de veces en estos últimos 3 años.
Luego de varias vueltas me llevaron hasta una habitación privada donde había una persona esperándome, Zuko.
"Azula, hermana." ignoré el saludo de mi hermano, pude verlo detenerse momentáneamente antes de suspirar cuando vio que no iba a responder de ninguna manera "Hola Azula, como has estado?" pregunto tranquilamente Zuko, rodé los ojos, su cara de póker seguía siendo pésima, podría engañar a cualquier otra persona, pero podía leer a Zuko como la palma de mi mano.
"ya sabes cómo es estoy, Zuzu" le sonrei burlonamente "leyendo los mismo libro que leí una docena de veces, comida insípida y aquí estoy aquí-"me encogí de hombros mientras miraba mi camisa de fuerza "-sufriendo un suplicio mientras estoy completamente atada para variar, ya sabes, lo normal" Zuko hice una mueca y reprimí el impulso de rodar los ojos, blando, patético "entonces, Zuzu, porque no nos ahorramos esta palabrería completamente estúpida y me dices el por qué estás en este tan pintoresco lugar, dudo que sea por la vista." Zuko se estremeció levemente, bingo. Él se aclaró la garganta.
"bueno, ha… ha habido un problema." Confeso Zuko y rodé los ojos.
"entonces? De que lado te dejaste follar por China esta vez? De costado? Por detrás? O por adelante? No juzgo." pregunte con una sonrisa burlona, escuche las toses y resoplidos de nuestros guardias y vi que Zuko se sonrojo levemente.
"t-tienes que ser tan… vulgar?" replico con molestia, le sonrei ampliamente.
"pero por supuesto que sí, Zuzu, si te molesta, es mi humilde deber de realizar tal tarea, tan simple como eso." le dije burlonamente, Zuko suspiro.
"te estamos liberando." me congele en mi lugar.
"je." resoplé divertidamente "JAJAJAJAJA." me heche a reír a carcajadas mientras me sacudía en mi silla de ruedas todo lo que podía con mis restricciones "oh Agni, nunca supe que hicieras bromas tan divertidas Zuzu, por un segundo y me la creí! JAJAJAJA."
"no estoy bromeando Azula." Fue la respuesta de mi hermano y me detuve una vez mas con la cabeza caída a un costado lo miré como si fuera estúpido.
"muy bien hecho, Zuzu, me tienes, buena broma, ahora devuélveme a mi habitación." dije secamente mientras me enderezaba, Zuko suspiro.
"no es una broma, ninguna trampa, te estamos sacando del asilo mental, aunque… hay algunas condiciones." Mi ojo tembló.
"liberarme? LIBERARME?! no me mientas Zuko! estas por encima de toda esas estupideces, nunca me liberarían!! Creen que estoy loca!!" Zuko apenas se estremeció ante mi diatriba enojada, pero pude ver a los guerreros Kyoshi tensarse.
"bueno… tuviste esquizofrenia durante el primer año." Dijo Zuko secamente, resople divertidamente.
"que es un pequeño quiebre mental?" pregunte burlonamente con una sonrisa mientras me encogía de hombros.
"escapaste e intentas un golpe de estado." volvió a replicar, resople ruidosamente
"que es un pequeño golpe de estado?" volvi a preguntar con una sonrisa arrogante antes de mirar fijamente a Zuko "después de todo, es de familia, no, Zuzu?" pregunte burlonamente, Zuko se estremeció visiblemente mientras hacia una mueca.
"primero, no fue un pequeño golpe de estado, y segundo, fueron dos." Replico Zuko y rodé los ojos. "y segundo, volvamos al tema, los … concejales y los ministros… no están contentos." Resople divertidamente.
"por supuesto que no, idiota." Dije burlonamente, después de todo es obvio "estas destruyendo nuestra nación, regalando dinero, recursos y personas bajo el nombre de 'reparaciones de guerra', China te esta follando tan duro que me sorprende que puedas sentarte correctamente." agregué con una sonrisa, Zuko rodo los ojos.
"si no lo hiciera, no habría Nación del Fuego, Azula, y lo sabes." Mordió Zuko mientras me fulminaba con la mirada, rodé los ojos.
"si eso te deja dormir de noche Zuzu, piensa como quieras." me encogí de hombros, Zuko me miro unos segundos antes de suspirar.
"quieren que dimita y te quieren en el cargo." Zuko dejo caer la bomba como si nada y me quede completamente quieta.
"…que?" realmente, era raro que mi elocuencia me fallara, las palabras eran algo que había aprendido a usar desde joven, era un arma tanto como cualquier otra parte de mi cuerpo, pero no se me podía culpar, lo que Zuko acababa de decir, era ridículo en el mejor de los casos. Mire a Zuko quien parecía derrotado y me enderece "habla, que demonios significa eso." Sisee en su dirección.
"como dije, ellas… están descontentas, hay rumores, rumores de una facción que busca liberarte y colocarte en el puesto Señora del Fuego, quieren… quieren que la guerra de los 100 años comience de nuevo, contigo al mando." Me tome unos segundos para registrar sus palabras y mi sonrisa se hizo anormalmente amplia.
"bueno, bueno, bueno, y que piensas de todo eso Zuzu? Tus súbditos me quieren mas a mi, una loca certificada, que a ti? Que dice eso de tu gobierno?" pregunte burlonamente, Zuko se mordió el labio mientras miraba abajo antes de levantar la cabeza en alto.
"hago lo que tengo que hacer para que la Nación del Fuego siga en pie." Dijo Zuko con firmeza.
"impresionante Zuzu, casi sonaste como un Señor del Fuego respetable, te aplaudiría, pero no puedo" dije burlonamente "pero eso nos lleva al siguiente motivo, tus súbditos quieren coronarme como Señora del Fuego, entonces dime, oh maravilloso Señor del Fuego Zuko, como liberarme es una gran idea? Estas haciendo la mitad del trabajo por ellos." le pregunte divertidamente, Zuko se quedó en silencio mientras me miraba.
"te mandaremos a otro país."
…
…
No, no, no, no, no, NO, NO, NO, NO!!!
NO!!!!!!
"ME ESTAS EXILIANDO??!?!?!" rugí con fuerza, Zuko apenas se estremeció, como si supiera mi reacción, las guerreras Kyoshi se pusieron en alerta, pero no me importaba. Moví mis manos y mis piernas, me retorcí tal como había planeado durante años y me libera de mis restricciones antes de quemar la camisa de fuerza, giré mis piernas mientras el calor aumentaba en mis pies y derretí las cadenas allí también, una vez liberada me puse de pie. "DEBES ESTAR MAS LOCO QUE YO, SI PIENSAS QUE ME EXILIARAS, ZUKO!!!!" Rugí en su dirección, fuego azul lamiendo mis labios y lengua que salían de mis gritos.
"quédate abajo Azula!" mi mirada se movió a la guerrera Kyoshi quien dio un paso al frente de Zuko, mis ojos se abrieron ligeramente y mi sonrisa sádica creció.
"ah, Ty Lee, no te reconocí, te vez igual que las otras Kyoshi, todas iguales, todas indistinguibles, una cara más." dije sádicamente, pude verla estremecerse, siempre supe como presionar los botones de Ty Lee, era fácil, y era mucho más fácil ignorar la punzada de culpa que sentía por ello, ella no era nada para mí, ya no, ni ahora, ni nunca.
"suficiente Azula, vuelve a tu silla mientras te volvemos a poner tus restricciones o nos no dejaras otra opción que atacar y bloquear tu chi." ah, Suki, por supuesto que vendrían sus dos mejores guerreras Kyoshi contra mí.
"ah, sí, bloqueo de chi, le enseñaste lo único distinguible y único que tenías Ty Lee a tu pequeño y alegre grupo, ahora, no eres nada especial." Le dije a Ty Lee, cuya cara decayó profundamente y le hice una señal diciendo que vengan. Suki frunció el ceño mientras se preparaba.
"lo siento Azula." Ty Lee recuperándose del golpe verbal reciente, fue la primera en lanzarse al frente, mi sonrisa desapareció, vi moverse a Ty lee, la conocía, conocía como se movía, como se movería, la conocía a ella, completamente, incluso si no hubiéramos interactuado por tres años, seguía siendo Ty Lee, por lo que fue fácil esquivarla y fue aún más fácil contratacar y golpear sus puntos de chi, bloqueándolos. Ty lee cayo flácida a mis pies, la mire desapasionadamente.
"q-que? C-como?" pregunto estúpidamente Ty lee en el suelo, una mirada de miedo en sus ojos, mi sonrisa sádica volvió a aparecer.
"eso es todo." Mire a Suki rápidamente quien ya estaba frente mío, la esquive con facilidad y bloquee su chi con la misma rapidez que Ty lee, la agarre antes que cayera y la tire aun lado.
"y esa era tu defensa?" pregunte burlonamente a Zuko quien tenía una mirada solemne.
"cuando… cuando aprendiste a bloquear el chi?" pregunto Zuko, tarareé mientras me agachaba y comencé a acariciar la mejilla de Ty lee con mis dedos suavemente, ella comenzó a temblar lo mejor que podía con su cuerpo inmóvil.
"ah Ty Lee, mi querida traidora, le debo todo a ella." le dije burlonamente.
"y-yo!? Yo no hice nada!" chillo Ty Lee asustada, prácticamente podía oler su miedo.
"pero lo hiciste Ty Lee, te vi desde que éramos niñas, te vi practicar tu bloqueo de chi, usarlo contra otras personas, pero lo mas importante-" agarre la mandíbula de Ty Lee fuertemente y la obligue a mirarme a los ojos, mi sonrisa era anormalmente grande, Ty lee se estremeció mientras palidecía aun mas "-lo usaste contra mí, crees que no podría aprenderlo? Solo tenía que dejarme golpear y memorizar los lugares donde me golpeabas estos últimos años, tenia que recordar lo que habías practicado hace años, y absorberlo todo, y así lo hice." Le explique divertidamente.
"t-tu, me usaste, me manipulaste, otra vez, t-tus ataques de ira durante los últimos años… fue todo fingido." Ty Lee parecía horrorizada y destrozada en iguales niveles, mi sonrisa de hizo mas amplia, ignore la punzada de culpa.
"por supuesto que si Ty Lee, y ahora te tengo aquí, en mi mano, dime, todavía me tienes miedo?" le pregunte casi suavemente, el rostro de Ty Lee cayo, prácticamente era una mueca de miedo.
"suéltala monstruo!!" ignore el grito de Suki.
"dime… Ty Lee, serias diferente si te quemara la cara? Estarías satisfecha de destacar de esa manera? Déjame darte una mano." hice calentar mi mano, la cara de terror, pánico y pavor todo al mismo tiempo era una deliciosa.
"suficiente Azula!!" el grito de Zuko me saco de Ty Lee y quise chasquear la lengua, no era tiempo para distracción.
"tienes razón Zuzu, todavía tenemos que hablar." Con eso agarre a Ty Lee y a Suki por su ropa, me acerque a la puerta y las tire a ambos a afuera, ignore los gemidos de dolor y el lloriqueo que comenzó de Ty Lee mientras cerraba la puerta. Cuando me gire a Zuko me sorprendió verlo todavía sentado, solemnemente, pero con una cara impasible, como si supiera que no le haría daño a él, o a Ty Lee o Suki.
"ahora tenemos privacidad Zuzu, ahora, dime que es esa estupidez de que me quieres exiliar." sisee con odio mientras me sentaba en mi silla de rueda, no era una invalida, pero esta silla era mi trono, era mío.
"nosotros decidimos que-"
"nosotros, nosotros, nosotros, otra vez esa palabra, dime Zuzu, quien son nosotros?" pregunte bruscamente, Zuko hizo una mueca.
"madre y yo." dijo Zuko honestamente y gruñí con fuerza.
"por supuesto que fue esa perra." siseé, finalmente pude ver a Zuko erizarse como un gato.
"no hables así de ella Azula, es nuestra madre." reprendió Zuko.
"ella no es nada mío! Una simple donadora de útero en lo que a mi me respecta!" exclame con odio virulento, odiaba a Ursa, odiaba a esa mujer, odiaba lo que me hizo y que tan fácil fue romperme por culpa de ella.
"ella te ama Azul-"
"no." interrumpí a Zuko y lo fulmine con la mirada "que dirías si te dijera que nuestro padre te ama, Zuko?" pregunte seriamente, Zuko arrugo la nariz.
"él no me ama, él-"
"si, lo hace, pero no estas preparado para esa conversación. Así como nuestro padre nunca te lo dijo, así como nunca te lo demostró, así como nunca supiste entenderlo. Es lo mismo con Ursa y conmigo, me importa menos que la mierda que sale del trasero de Iroh que lo que ella sienta por mí en silencio. Ella nunca me dijo que me amaba de frente, ninguna de sus acciones demuestra que me amaba de ninguna forma, y definitivamente no esta acción de exiliarme, porque ambos sabemos que es para protegerte a ti, Zuzu. Demasiado poco, demasiado tarde, demasiado nada, así que guárdate tus discursos de amor, por no los quiero, Ursa no es mi madre y respetaras eso o me largo de aquí." sisee con odio, Zuko se quedo quiero y su cara decayó varios grados mientras asentía.
"tienes razón, me disculpo." dijo Zuko honestamente mientras bajaba la mirada y yo asentí.
"a donde me estas exiliando exactamente?" pregunte secamente, Zuko levanto la cabeza tan rápido que escuche un crujir en su cuello y me miró fijamente con los ojos abiertos.
"estas aceptando el exilio?!" pregunto Zuko incrédulo, resople molestamente.
"talvez si, talvez no, quien sabe." me encogí de hombros "cualquier lugar es mejor que aquí ciertamente y no pienso ser juguete de las viejas del conejo y los ministros" resople como si fuera obvio mientras ponía los ojos en blanco "si vuelvo a poder será en mis términos y por mis medios." Dije simplemente, Zuko hizo una mueca.
"no podemos dejar de lado el intento de golpe de estado?" pregunto Zuko cansadamente, negué divertidamente.
"no puedes enojarte por que te hagan lo mismo que tu hiciste Zuzu, eso seria infantil." Replique divertidamente, Zuko suspiro cansadamente.
"no puedo evitar pensar que esto es una trampa tuya." dijo Zuko inocentemente, gemí exasperadamente.
"todavía la desconfianza, hermano? No tienes de que preocuparte si estoy en otro país." Le dije burlonamente, Zuko hizo una mueca.
"eso es exactamente por lo que me preocuparía." Dijo secamente, y solté una carcajada
"pues deberías." le dije burlonamente, Zuko suspiro y se quedó en silencio.
"… me voy a arrepentir de esto, solo lo se." Gimió Zuko antes de pasarse la mano por el cabello. "Japón, te estamos mandando a Japón." Arrugue la nariz.
"UA?" pregunte curiosamente, Zuko asintió y tararee ligeramente impresionada.
"tienes un trato, me iré de la Nación del Fuego." Zuko casi suspiro de alivio "pero tengo condiciones." sonrei mientras lo veía congelarse, nunca negocies en una posición inferior, siempre este en una posición superior de tu oponente, y ahora el que tomaba la rienda en esta discusión, por lo que tomaría todo lo que pudiera.
"por supuesto, Azula." Suspiro cansadamente Zuko.
Después de una pequeña pero intensa charla sobre las condiciones, me puse de pie.
"bueno, eso fue horrible, nunca lo volvamos a hacer, me iré a mi habitación, ven a buscarme cuando tengas todos los papeles para mi liberación." le dije simplemente mientras me daba la vuelta y comenzaba a salir.
"solo será unas pocas horas." aseguro Zuko y solo levante la mano en su dirección. Una vez a fuera todavía vi a Ty Lee y Suki tiradas en el suelo en la posición que cayeron cuando las había tirado. Ty Lee se estremeció mientras me vio salir de la habitación desde la posición que había caído, tenía los ojos rojos y lagrimas secas en sus mejillas. La ignoré y comencé a caminar.
"ohff! Maldita perra!" sonrei ante el grito de Suki cuando camine por encima de ella, ah, pequeños placeres de la vida.