Capítulo 29: El Susurro del Corazón - El Eco del Amor
La noche se cernió sobre la mansión, envuelta en un silencio opaco y pesado. Ryeowook, solo en su habitación, se sienta en el borde de la cama, su cuerpo temblaba por la fría realidad de su venganza. El vacío que se había formado en su corazón era más profundo que el abismo que había creado al liberar a sus prisioneros.
Su mirada se posó en la foto de Jungkook que se encontraba en su mesita de noche. La imagen de Jungkook sonriendo lo atravesó como un puñal. Las lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos.
"Jungkook," susurró Ryeowook, su voz era un grito de dolor atrapado en su garganta. "Perdóname. Te amo mucho."
El susurro del corazón de Ryeowook era un eco de amor perdido, un eco que lo perseguía y lo atormentaba. El odio que lo había consumido no había logrado apagar la llama del amor que sentía por Jungkook.
La venganza lo había dejado vacío. La crueldad con la que había actuado lo había conducido a un abismo de dolor insoportable.
"Te amo, Jungkook," repitió Ryeowook, su voz era un grito de desesperación. "¿Por qué te quise tanto?"
Las lágrimas de Ryeowook caían sin control. Su cuerpo temblaba de dolor.
De repente, un golpe en la puerta lo sacó de sus pensamientos.
"Ryeowook," dijo una voz familiar. "Soy yo, Jungkook."
Ryeowook se levantó de la cama y se dirigió a la puerta. La abrió con temor y se encontró con Jungkook de pie en el umbral.
"Jungkook," dijo Ryeowook, su voz era un susurro de incredulidad. "¿Cómo ...?"
"Vine a buscarte," dijo Jungkook, su voz era un susurro de esperanza. "Te amo, Ryeowook. Y no quiero perderte."
Ryeowook se quedó en silencio, sintiendo que el mundo se desmoronaba a su alrededor. La presencia de Jungkook lo llenaba de una mezcla de dolor y esperanza.
"Ryeowook," dijo Jungkook, su voz era un susurro de amor. "Por favor, perdóname. Yo no quería hacerte daño."
Las lágrimas de Ryeowook caían sin control. Su cuerpo temblaba de dolor.
"Te amo, Jungkook," susurró Ryeowook, su voz era un eco de amor perdido. "Te amo con todo mi corazón."
Ryeowook se dejó caer en los brazos de Jungkook. El susurro del corazón de Ryeowook era un grito de desesperación, un grito que lo obligaba a enfrentarse a la cruel realidad del amor y la traición.