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Capítulo 13: Demasiadas Llamadas y Mensajes
—Está intentando poner excusas. Aún así no cambia el hecho de que olvidó nuestro aniversario. He estado pensando en ello desde el mes anterior.
Loreen fulminó con la mirada su teléfono. Se habría hecho pedazos con la fuerza de su agarre si fuera lo suficientemente fuerte.
No importa la razón, solo era justo que Edric se sintiera mal por olvidar su aniversario y pedirle el divorcio el mismo día.
Pero quizás, también era mejor de esta manera para que Loreen no tuviera que encontrarse con invitados que les habrían deseado un matrimonio bendecido y largo, pero que de todos modos se divorciarían justo después.
Quizás había salvado las apariencias con que su divorcio sucediera de esta manera.
Además, si Eric no le hubiera pedido el divorcio ese día, Loreen no habría renunciado a su relación.
Sabía que habría esperado a que él se calmara y hablado con él correctamente sobre todo esto, para poder haber explicado y clarificado lo que fuera que Sera dijo sobre ella.
Pero porque él pidió el divorcio en su tercer aniversario, cuando él le hacía mucha falta y estaba emocionada por verlo, estaba tan destrozada que firmó esos papeles y se fue.
Edric no podría culparla por todo esto más tarde, ya que fue él quien tomó primero tales decisiones precipitadamente. Lo aceptó todo con decepción y el corazón sangrante.
Habría estado aún más decepcionada de él con todas estas llamadas y mensajes, pero al menos, Edric se disculpó por haber sido violento con ella y admitió que había perdido los estribos.
—Espero que pronto se dé cuenta de que yo no tuve la culpa de todo esto —a Loreen tampoco le gustaba ser culpada por algo que no hizo.
Pero explicarle todo a alguien que no está dispuesto a escuchar es inútil. Preferiría no perder más su tiempo.
Echó un vistazo a su muñeca. Ya había sanado, así que la marca había desaparecido. Pero aún podía recordar perfectamente cuánto dolió. Especialmente el hecho de que casi la estranguló.
¿Qué hubiera pasado si él fuera aún más violento que eso?
Ahora, incluso si su corazón aún dolía, podía decir que se sentía aliviada de que estuvieran divorciados.
Loreen se dio cuenta de que no conocía a Edric tanto como pensó a pesar de sus años de matrimonio.
Podía entender que sí, él estaba furioso. Podía aceptar que alzara la voz y todo eso. Pero lastimarla físicamente era un asunto diferente incluso si fue sin intención. Revelaba mucho sobre sus sentimientos hacia ella.
Él detuvo antes de poder estrangularla. Pero simplemente casi hacerlo todavía le daba escalofríos.
No podía ni siquiera pensar en abofetearlo, no importaban las palabras y acusaciones que él le dijo ese día. Aún no quería hacerle daño en lo más mínimo. Incluso ahora, sabía que no podría abofetearlo.
Él era tan importante para ella.
Loreen suspiró profundamente al leer la línea sobre la casa.
—Tampoco necesito esa casa.
Esa casa solo le recordaría más su vida de casada con Edric. Probablemente él tampoco quería vivir allí, razón por la cual dijo que se la daba.
Pero ella no quería, ni la necesitaba. Él podría venderla en su lugar si ya no le gustaba.
Loreen tenía muchos lazos y recuerdos de ese lugar, pero era hora de olvidar todo eso y seguir adelante con su vida.
—Caramba. ¿Por qué es tan terco con la pensión alimenticia? Debería estar feliz de que no quiero ninguna. Podría dársela a su próxima esposa.
El pensamiento de que Edric se casara de nuevo hacía que su corazón se arrugara. Pero ya no tanto como el día en que se divorciaron.
Continuó leyendo sus mensajes.
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(4 horas después de que dejó su residencia…) (enviado 2x)
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—No te atrevas a hacer esto parecer como si fuera mi culpa.
—Soy yo quien está completamente decepcionado de ti.
—Soy yo quien salió lastimado.
—No eches la culpa sobre mí.
—Fuiste tú quien planeó todo esto.
—Simplemente me estoy liberando de tu agarre y poniendo fin a tu diversión.
—¿Qué rayos? ¿Por qué sigue convencido de que soy una caza fortunas incluso después de que dejé todo lo que me dio?
—Ah, cierto. No este teléfono. Realmente debo devolverlo. Estoy segura de que es caro. Está entre los modelos más recientes.
Loreen se propuso comprar un nuevo teléfono mañana por la mañana para que Edric no pudiera decir que sí tomó algo de él.
Sin embargo, realmente no podía comprender por qué Edric seguía insistiendo en que ella era la villana aquí después de ver que ni siquiera tocó las asignaciones que él le había estado dando.
Si fuera una caza fortunas, habría gastado todo eso junto con los miles de millones en el banco.
Loreen tenía que preguntarse si él estaba drogado como para no entender lo que significaban sus notas.
¿O estaba deliberadamente pretendiendo no haber entendido el significado de sus notas y acciones?
¿Y cómo pudo haber salido lastimado?
Su cara estaba simplemente llena de furia y disgusto hacia ella ese día. ¿Dónde estaba el dolor ahí? Ella no vio ni rastro.
Loreen estaba cada vez más decepcionada de Edric cuanto más leía sus mensajes.
¿Y cómo pudo ser tan desvergonzado para llamarla tantas veces y enviarle tales mensajes porque ella no le respondió?
Si se sentía mal por pedirle el divorcio en el aniversario de su boda, al menos podría haberle dado algo de paz y pospuesto sus llamadas para el día siguiente.
Loreen estaba furiosa, pero siguió leyendo.
—(8 horas después de que dejó su residencia...) (enviado 2x)
—¿Dónde estás?
—(9 horas después de que dejó su residencia...) (enviado 2x)
—¿A dónde fuiste?
—Vuelve si no tienes a dónde ir.
—(10 horas después de que dejó su residencia...) (enviado 2x)
—¿Estás alojada en un hotel?
—Si no llevaste efectivo, diles que lo carguen a mi nombre.
Los mensajes de Edric el día de su divorcio terminaron así.
—¿Esperaba que volviera a casa después de que me dijo que me fuera? —Loreen frunció el ceño.