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Chapter 52 - Capítulo 51: Preparación para nuestra primera cacería

Anput y Leone llegaron y se fueron, saliendo bastante tranquilamente, sin embargo, sus ojos mostraban una convicción que no estaba presente cuando habían llegado.

Le había preguntado múltiples veces a Jahi qué había pasado cuando salí de la sala, pero todo lo que conseguí como respuesta fue una sonrisa burlona y su silencio.

Por supuesto, como eso me irritó, le di la espalda esa noche, solo para encontrarla sobre mí con esos ojos dorados y brillantes cuando no conseguía lo que quería.

Esa noche fue una mezcla de pura tortura y placer, con Jahi finalmente perdiéndose en sus deseos mientras marcaba mi piel.

La reprendí la mañana siguiente cuando vi las abundantes marcas que cubrían mi piel, pero ella simplemente respondió dejando otra en mi cuello, sonriendo burlonamente mientras sus ojos brillaban con posesividad.

Rápidamente nos sumergimos en nuestras clases y entrenamientos, mientras poco a poco terminábamos nuestras lecciones con la Baronesa Estra, refinábamos nuestro control del mana con la Archimaga Kolia, antes de someternos al acondicionamiento físico de la Marquesa.

Durante los meses que pasaron después de mi despertar del núcleo, logré ganar alrededor de 17,500 xp por mes de las diversas misiones que recibí, y vi otro pequeño aumento en mis estadísticas, ya que me había sumergido en mi magia y había empezado a querer fortalecerme físicamente, principalmente para ver cómo Jahi ponía pucheros después de perder más de una vez al día durante nuestros combates...

Por supuesto, aunque solo fue un aumento de uno por estadística, con dos en Agilidad, todavía era increíblemente eufórico ver esos números aumentar sin que yo gastara puntos de estadística.

También había empezado a sentirme mucho más cómodo con un puñal en la mano, y Jahi bromeó diciendo que me estaba convirtiendo en un 'lobo con una garra muy afilada'.

Aparte de un aumento en mi rendimiento con un puñal, había logrado aumentar mi habilidad de Control de Mana a Aprendiz, y había empezado a crear secuencias más complejas, siendo mi favorita actual una flecha de agua que fácilmente podía perforar roca. Rápida, fuerte y difícil de ver venir, me gustaba bastante enviar una ráfaga de flechas hacia alguien antes de acercarme con mi puñal.

La Marquesa, por otro lado, maldijo mi existencia la primera vez que me dejó usar hechizos en nuestros combates...

Sin embargo, hoy era la víspera de un día muy especial.

La Marquesa iba a llevar a Jahi y a mí al gran bosque que cubría la tierra del sur de la Marcha Asmodia.

Nos dijo que era para acostumbrarnos a luchar contra monstruos, así como para ver en qué necesitábamos mejorar.

Eso significaba que, durante los últimos días, Jahi y yo habíamos estado en los Campos de Entrenamiento mucho más tiempo que antes, practicando todo tipo de magias e intentando mejorar nuestra forma lo mejor que podíamos.

Actualmente, Jahi estaba sentada en una de las rocas, con runas doradas formándose lentamente frente a ella mientras se concentraba.

Ella quería probar uno de los hechizos que había creado, que era una manera de usar tu mana para cubrir tu propio cuerpo, creando una capa de armadura sobre ti mismo.

Había logrado alcanzar una velocidad de lanzamiento consistente con ello, y actualmente estaba repasando los ejercicios básicos con puñal que la Marquesa me había inculcado con lo que yo llamaba una 'Capa de Mana' cubriendo todo mi cuerpo.

No era una tarea fácil, pero había descubierto que era una buena forma de practicar no solo mi control de mana sino también una manera de familiarizarme con cómo mi mana fluía a través de mi cuerpo.

—¡Por los dioses, ese hechizo es increíble! ¿Cómo diablos se te ocurrió algo así? —gruñendo hacia mí, Jahi continuó persiguiéndome por los Campos de Entrenamiento, sus ojos dorados mientras me miraba con molestia.

Solo sonreí hacia ella, decidiendo no reventar su burbuja y decirle que la Archimaga Kolia me ayudó a desarrollarlo JUSTO delante de ella...

Ella continuó sonriendo, antes de inclinarse y plantar un beso en mis labios.

Sintiendo cómo sus manos bajaban más de mi cintura, la aparté de mí con una sonrisa burlona, antes de esquivar lentamente su mano extendida que buscaba mis hombros.

A medida que continuaba el ejercicio, podía sentir cómo mi mana se drenaba lentamente, y mi cuerpo dolía por completo.

Dejando caer la capa, jadeé mientras me desplomaba junto a una de las rocas, apoyándome en ella mientras miraba al cielo que se oscurecía lentamente.

Me senté allí, mi respiración rápidamente bajo control antes de ver un destello de luz.

Al girar, cubrí mis ojos al ver a Jahi envuelta en una armadura similar a la que llevaba la Marquesa, excepto que la de Jahi era de un oro brillante.

Riendo, Jahi se levantó y se movió rápidamente, desenvainando su espada y realizando algunos golpes básicos antes de dejar caer el hechizo.

Girándose para mirarme, Jahi tenía una amplia sonrisa mientras se apresuraba hacia mí, levantándome en sus brazos mientras giraba en el centro de los Campos de Entrenamiento.

Después de girar unas cuantas veces, Jahi se detuvo, bajándome al suelo mientras sonreía ampliamente hacia mí.

Había comenzado a hacer esto hace un mes, después de que la Condesa dejara escapar que había hecho algo similar con la Marquesa durante sus primeros días. Afirmó que era enteramente porque quería ayudar a la Marquesa a mejorar su agilidad, y definitivamente no porque quisiera ver qué castigo le daría la Marquesa...

Después de intentarlo una vez un mes antes, tenía que decir que la Condesa era bastante genial cuando se trataba de jugar con los demonios de Asmodia.

Tuve una noche bastante interesante después de eso, y ver cuán creativa podía ser Jahi siempre me hacía esperar con ansias nuestras noches juntos...

Por supuesto, tanto la Condesa como yo teníamos algo en común; ambas éramos más ágiles, mientras que los demonios de Asmodia eran mucho más fuertes. ¿Qué significaba eso?

Podíamos correr, pero cuando nos atrapaban...

Sonreí más ampliamente cuando evité de nuevo las manos de Jahi, haciendo que sus ojos dorados parpadearan con un falso enojo.

Continué el juego del gato y el ratón; o más exactamente, del perrito y el demonio, durante algunos minutos más antes de —accidentalmente— correr en la dirección equivocada, directamente hacia los brazos de Jahi que me esperaban.

Sintiendo sus brazos envolverme fuertemente, levanté la vista hacia ella, riendo cuando vi sus labios formar una delgada línea mientras me miraba con severidad.

Sin embargo, podía sentir su latido del corazón mientras apoyaba suavemente mi cabeza en su pecho, y podía decir que ella estaba tan nerviosa como yo por el día de mañana.

Fue por eso que...

Sintiendo cómo me arrastraba hacia la puerta, dirigiéndose rápidamente hacia nuestra habitación, tuve que contener la gran sonrisa que amenazaba con liberarse en mi rostro.

Después de todo, ¿qué mejor manera de olvidar todos tus problemas que sumergiéndote en el calor de tu amante?

Así que, fue por eso que no tuve reparos en rendirme a Jahi esa noche, disfrutando de cómo intentaba marcarme cada vez más.

Mientras todavía sufríamos bajo el lento crecimiento de nuestros cuerpos, Jahi se estaba volviendo cada vez más tensa, y tengo que admitir que, como alguien que había vivido una vida antes y también podía sentir el deseo evidente que Jahi sentía debido a nuestro vínculo de almas, encontré estos momentos tanto tortuosos como éxtasis.

Era como lanzar un pequeño vaso de agua sobre una llama furiosa. La llama puede retroceder por unos momentos pero vuelve con venganza.

Así que, aunque disfrutaba de estos momentos, el tiempo no pasaba lo suficientemente rápido para mi gusto.

Después de saciarse, Jahi colapsó en la cama a mi lado, tomando grandes respiraciones. Mirándola, disfruté de cómo la luz de la luna hacía brillar su piel azul, y temblé cuando ella me miró con sus ojos brillantes.

Sonriendo con malicia hacia mí, Jahi me atrajo hacia ella antes de suspirar.

—Tú... estás consciente de lo que hice hace un año, ¿verdad? Que yo... maté a alguien... —dijo Jahi.

Escuchar a la normalmente confiada Jahi hablar en un tono tan bajo y lastimoso me apretó el corazón.

—Sí, me lo dijiste una vez. Aunque estabas medio dormida —respondí.

Ella rió al oír eso, antes de morderse el labio.

—¿No te... te molesta? —preguntó.

Suspirando, me acerqué más a ella, diciendo:

—Me secuestraron y planearon vendernos tanto a ti como a mí a algún noble idiota como al Conde Flori, que piensa que son tan importantes e intocables que podrían secuestrar a una heredera y usarla como su esclava personal. No me importan sus vidas —afirmé.

Jahi me miró sorprendida, antes de reír de nuevo. Esta vez, sin embargo, fue genuina, y no un pobre intento de levantar el ánimo.

—¿Por qué preguntaste? —suspirando, Jahi volvió a mirar al techo, sus ojos regresando a su estado normal.

—Bueno, mañana será la primera vez que tengas que derramar sangre... Yo ya lo he hecho antes, y con un humano, no con algún monstruo. Tú, en cambio... bueno, solo... no quiero verte tener que ponerte en peligro...

—¿Así que debo estar a tu lado, pero mirar desde lejos mientras te pones en peligro? ¿Eso suena como algo que haría? ¿Mirarte ir a la batalla mientras me quedo en casa, preguntándome si algún monstruo o persona logró herirte? ¿Quizás incluso matarte?! —gruñí suavemente, pellizcando su cintura mientras decía.

—Ese fue otro momento estúpido de mi parte, ¿eh? —al oír eso, Jahi me miró sorprendida, sin esperar un estallido. Sin embargo, esbozó una sonrisa irónica antes de asentir.

—Simplemente asentí, antes de hundir mi cabeza en su pecho.

—Quería ir al bosque, pero al igual que Jahi, me resistía a verla tener que luchar. Sin embargo, necesitaba aceptar que esta vida podría no ser tan pacífica como la anterior, donde la única preocupación que tenía era si el estado subía los impuestos y si iban a despedirme del trabajo.

—Aquí, los monstruos y asesinos eran más abundantes y podían causar destrucción que la persona promedio en mi mundo anterior nunca podría manejar.

—Inhalando profundamente el dulce aroma de Jahi, cerré mis ojos mientras reafirmaba mi creencia de fortalecerme, no solo por mí... —sino por ella.

—Así que, aquí está el trato. Voy a posponer el contrato hasta el martes, e intentaré hacer doble publicación este fin de semana. ¿Lo lograré? Quién sabe.

—Pero, pensé que [Camo] tenía un buen punto; a partir de este punto es donde las cosas realmente comenzarán a desarrollarse. Ya no hay necesidad de grandes cantidades de exposición, lo que significa que cada vez más cosas que escribo serán sobre relaciones siendo desarrolladas y nutridas, acción o lemons. Quiero mostrar a la gente que vale la pena que gastes monedas para desbloquear capítulos.

—Ahora, eso no significa que nos acerquemos a la 'carne' de la trama; eso es la Academia, y no se alcanzará por un tiempo. Después de todo, tenemos mucho que atravesar, con Jahi y Kat haciéndose más fuertes y mayores, más desarrollos entre ellas y Anput/Leone, y así sucesivamente.

—Sin embargo, lo pensé, y aunque aceptar el contrato ahora traería nuevos lectores a través de recomendaciones diarias (me baso en el hecho de que algunas de las diarias son... extrañas. Sin ofender al libro, pero 'Double Cross System' subió el MISMO CAPÍTULO 10 veces...), pero creo que debería demostrar mi valía a las personas que ya están aquí, y que han estado aquí durante mucho tiempo (como Wasad, Camo, Caldex, BaaSheep123, Stieborn_666, y más. Esos son solo algunos que me vienen a la mente debido a los comentarios consistentes y demás...)

—Así que, ese es el plan. Sin embargo, este fin de semana resulta ser uno en el que un buen amigo mío de otro estado se va de misión a Sudamérica. Lo que significa que quiero pasar mucho tiempo con él, antes de que se vaya por 2 años. Sí, podemos enviarnos mensajes por Facebook o lo que sea, pero no es lo mismo que estar en un juego juntos y tener esos momentos idiotas que ocurren con demasiada frecuencia con nosotros... Por eso dije que INTENTARÉ hacer doble publicación, pero quién sabe... —de todas formas, gracias a todos, ¡y espero que sigan disfrutando de la novela!