Perspectiva de Jules
Mi boca se abrió de golpe por la sorpresa. Intenté hablar un par de veces, pero no salió nada.
—¿Qué? —susurré, sintiendo de repente escalofríos recorriendo mi espina dorsal y cada centímetro de mi cuerpo.
Andrian tomó la laptop de mis manos porque comencé a temblar, y luego tomó el lugar a mi lado en el sofá.
Intenté respirar pero de repente era demasiado difícil para mí hacer eso, además de que mis pulmones se sintieron de repente muy apretados.
—Respira —murmuró Andrian a mi lado, su voz resonando en mi cabeza justo cuando sentí que su mano comenzaba a darme palmaditas suaves en la espalda.
Después de un rato, mi vista ya no estaba borrosa y no sentía que mi cabeza estuviera bajo el agua. Pude respirar de nuevo pero mi pecho dolía un poco esta vez.
Me giré cuidadosamente en mi asiento y agarré la muñeca de Andrian, mi voz se quebró mientras hablaba.
