Jian Wushuang caminó hacia la Piscina del Trueno.
Cuanto más se acercaba, más sentía lo poderosos que eran aquellos rayos.
Había miles de Relámpagos Púrpura parpadeando en la violenta Piscina del Trueno. Cada uno de los rayos era extraordinario.
—¿Cómo uso la Piscina del Trueno? —preguntó Jian Wushuang.
—Señor, quizás no lo sepa, pero esos Rayos Púrpura son Rayos del Cielo Púrpura. A diferencia de los rayos ofensivos ordinarios, estos son potentes pero no violentos. Los expertos pueden absorberlos para fortalecer sus cuerpos —respondió An Feng.
—¿Fortalecer sus cuerpos? —Los ojos de Jian Wushuang se iluminaron de alegría.
