—Por supuesto, estoy dispuesto a ir —Jian Wushuang asintió sin dudarlo.
Como los otros comandantes, había estado anhelando ir al Campo de Batalla Llameante.
—El Territorio de la Sable de Hierro es pequeño y carece de verdaderos expertos. Desde que estoy aquí, no he tenido la oportunidad de mostrar mi fuerza completa ni he luchado al máximo. Por el contrario, el Campo de Batalla Llameante tendrá muchos expertos en la Etapa Tres y en el Nivel Desafiante del Cielo del Reino Santo.
—Cuando llegue allí, podré utilizar mi poder al máximo.
—Además, Su Excelencia tenía razón. Siempre puedo protegerme usando mis cartas de triunfo. Incluso si me encuentro con un experto en el Nivel Desafiante del Cielo del Reino Santo, aún podría sobrevivir —añadió.
—Ya que estás de acuerdo con el arreglo, no te demores. Ve a prepararte. Mañana, irás al Campo de Batalla Llameante con Gu Man —dijo el Señor del Sable de Hierro a los cinco comandantes.
—Sí —Los cinco asintieron respetuosamente.
