La presión de rango nivel 5 pico liberada por Sebastián Cáceres abruptamente falló.
En la sección del público, estalló una ráfaga de risas burlonas.
Era el grupo de Elena Sandoval y Douglas Valentina.
—Me estoy muriendo de risa. ¿Este hombre realmente cree que un poco de aura puede asustar a alguien? ¿Acaso malinterpreta algo sobre estar en el nivel 5 pico? —rió un estudiante.
—Va a perder la cara esta vez —sonrió Mighel Zepeda.
El árbitro se aclaró la garganta:
—Ya que ambas partes han tomado su decisión, ¡empecemos!
Sebastián Cáceres convirtió toda la humillación en motivación y comenzó a lanzar un ataque que parecía una sombra serpentínea negra acompañada de feroces vientos astrales hacia Amalia:
—Ve al infierno.
Estaba usando, de hecho, el Látigo de Hueso de Dragón mencionado por Xylia Lazaro, que es un método letal de ataque.
Era evidente cuánto habían provocado las palabras de Amalia, empujándolo a casi perder el control.