Un invitado llegó a la Residencia del General Bai. El sirviente que custodiaba la entrada corrió para informar a Yu Nianzu.
Yu Nianzu fue a informar a Bai Tingfeng. Bai Xiang no estaba aquí. Estaba en el palacio.
—Joven Maestro Tingfeng, alguien viene a ver a Su Excelencia. ¿Qué debemos hacer? ¿Debemos permitirle quedarse o deberíamos rechazarlo primero diciéndole que Su Excelencia no está aquí? —preguntó Yu Nianzu.
Bai Tingfeng dijo a los subordinados de Bai Xifeng que no lo llamasen Pequeño General Bai. Sonaba mucho mejor Joven Maestro Tingfeng.
—¿Te dijo su nombre? —preguntó Bai Tingfeng.
—Lo hizo. El nombre es Bai Chao —mencionó Yu Nianzu el nombre.
Cuando Bai Tingfeng escuchó el nombre, su expresión cambió. Conocía ese nombre.
—Iré a verlo personalmente —afirmó Bai Tingfeng.
Bai Tingfeng y Yu Nianzu caminaron hacia la entrada. Bai Tingfeng finalmente vio al invitado. Era él, sin duda.
—Mayordomo Bai —llamó Bai Tingfeng a Bai Chao.