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Al final, Bai Xifeng todavía eligió vestir ropa masculina. Le era conveniente de todos modos. Ambos salieron. Otros los esperaban abajo.
—Lo siento, llego tarde —Bai Xifeng se disculpó al bajar.
—No te preocupes —dijo Bai Xiang.
Tuvieron un desayuno rápido y se prepararon para dejar la posada. Cuando estaban a punto de entrar en el carruaje, escucharon a alguien gritar un nombre que conocían.
—¡Hu Meifeng! —una voz gritaba llamando el nombre de Hu Meifeng.
Todo el mundo se volvió hacia la fuente de la voz. La voz pertenecía a un hombre. Estaba con otro hombre y una mujer. Los tres parecían conocer a Hu Meifeng.
Bai Xifeng miró a Hu Meifeng. Hu Meifeng parecía tranquila.
—Hu Meifeng, ¿dónde has estado? Desapareciste el día que te casaste —el primer hombre que gritó antes lanzó la pregunta a Hu Meifeng.
—Te equivocas, Jiang Honghui. No estoy casada con nadie —dijo Hu Meifeng.
—¿De qué hablas, Meifeng? Estás casada con mi hermano mayor —dijo la mujer del grupo, Xue Xiulan.