Mauve dejó los platos vacíos a un lado y se levantó de la cama, su agua para el baño estaba lista. Aunque no se sentía cansada, sabía que lo mejor sería ir a la cama ahora para estar completamente mejor al atardecer.
Entró en la bañera y se acomodó en ella. Salió unos minutos más tarde, chorreando agua. Vae la secó rápidamente, secando su cabello y el resto de su cuerpo. Vae se hizo a un lado como esperando órdenes.
Mauve frunció el ceño —¿Qué está pasando, Vae?
Vae parpadeó —¿Te gustaría vestirte?
Mauve parecía desconcertada —¿Por qué me preguntarías eso?
—Bueno, anoche…
—Suficiente sobre anoche, ni siquiera quiero pensar en eso. Ahora elige algo para que me ponga —ordenó Mauve con un rubor en sus mejillas.