William estaba agradecido por la oportunidad de pasar más tiempo con Sanya ahora que sus obligaciones laborales no eran tan abrumadoras. Había ocurrido tanto recientemente, y apenas podía creer que incluso sus amigos más cercanos de la familia estuvieran experimentando eventos tan devastadores... como su Tía Summer cayendo inesperadamente en coma.
Tío Arlan estaba destrozado, y Tío James y Darwin se turnaban para permanecer a su lado. Este incidente también empujó a William a compartir la verdad sobre la condición de su padre con los amigos más cercanos de este. A diferencia de ellos, su padre ya no podía ofrecer mucho apoyo físico debido a sus propias luchas de salud.
—Estamos listos —la voz de Sanya lo trajo de vuelta a la realidad. Estaban en el Hospital de Doctores Meta nuevamente. Había estado aquí ayer cuando Tía Summer colapsó, y más temprano hoy, habían revisado brevemente su condición antes de prepararse para llevar a la madre de Sanya a casa después de su alta.