—Es solo una reunión familiar —se recordó a sí misma, aunque las mariposas en su estómago le decían lo contrario.
—Hm, te ves radiante —la voz de su tía interrumpió sus pensamientos. Se giró hacia su tía, que entró en la habitación con una amplia sonrisa. Rain se giró para ver a su tía entrar en la habitación con una amplia sonrisa.
—Toqué, pero parecías tan sumida en tus pensamientos que ni siquiera me notaste. La puerta ya estaba entreabierta, así que simplemente entré —dijo su tía, acercándose más.
—Estoy un poco nerviosa, tía —Rain ofreció una sonrisa incómoda.
—¿Tú? ¿Nerviosa? ¡Eso es una novedad! No deberías estarlo. Piénsalo como uno de tus casos en la corte... haciendo lo tuyo, dominando la sala —su tía negó con la cabeza con una suave risa. Le guiñó un ojo juguetonamente.