Román apretó sus manos en puños. —Yuri, Yuri, Yuri, cada maldita vez, es YURI. ¿Por qué?
Nikolai levantó sus cejas hacia él. —¿A qué te refieres con eso?
—Todo lo que piensas es en Yuri. Todo sobre lo que hablas es Yuri. No estás con nadie más excepto Yuri y todo lo que te importa es Yuri, nada más. ¿Por qué no puedes alguna vez simplemente hablar o pensar en alguien más? ¿Por qué tiene que ser él?
Nikolai frunció el ceño en confusión. —¿Pensar en quién? Yuri es mi único y gran amigo. No tengo un círculo de amigos, así que no hay nadie más, por elección, claro.
—¿Tu... único y gran amigo? —Los ojos de Román se apagaron.
—Mi único y gran mejor amigo, sí —Un largo y profundo suspiro—. ¿Vas a ayudar o no? —Ante la falta de respuesta de Román, se dio la vuelta y corrió hacia Yuri que estaba desatando a Dimitri de la silla.