—Arghhhh… —Ash se despertó con un dolor de cabeza palpitante y no pudo abrir los ojos mientras se sentaba en la cama debido al dolor.
—Toma esto —Ash se esforzó por abrir un ojo para mirar a la persona que hablaba, pero solo logró abrir uno.
Luego tomó la taza que Ava le estaba dando —Es bueno para la resaca, bébelo todo.
Ava fue encargada por Rei de ayudar a Ash anoche, así que no tuvo más remedio que quedarse en su penthouse y esperar a que se despertara para llevarlo al médico al día siguiente.
Henry lo golpeó tan fuerte que necesitaba algunos puntos de sutura y uno de sus párpados tenía que ser drenado de sangre o podría infectarse y afectar su visión.
—Puedes irte a casa Ava, no tenías que hacer esto —dijo Ash después de terminar la poción que Ava le dio.