—Conforme el sol de la mañana tocaba suavemente la ciudad, la capital del Imperio Noche Nívea despertó de su letargo. Esta ciudad, en este momento, estaba a punto de presenciar su día más significativo en cientos de años: la ceremonia de coronación del nuevo emperador.
—En las tradiciones del Imperio Noche Nívea, el gobernante podía ser llamado emperador incluso antes de la coronación, pero no poseían todos los derechos y autoridades de un emperador. La ceremonia de coronación era un ritual sagrado y antiguo, marcando el momento en que el emperador recibía las bendiciones de todos los espíritus ancestrales y se convertía en un verdadero guardián del imperio. Por lo tanto, cada ceremonia de coronación se consideraba el evento más importante en el Imperio Noche Nívea.