—La señora Black no sabe mucho sobre Dr. L, pero conoce el estatus de la Familia Knight.
—Niña, mi tía te encargó que le ayudaras a encontrar a su hija Cherry —se inclinó con voz llorosa.
—Lo haré —aceptó Kendall el encargo y se encontró con la mirada de Damien.
Él no habló, pero confianza estaba escrita en sus ojos.
—La señora Parker necesita ayuda, solo dímelo —también se acercó Hank e hizo una reverencia a Kendall. Cuando se levantó, su cara elegante y gentil estaba triste.
—¿Crees que tu esposa te es leal? Dos, no va a desaparecer sin razón, ¿verdad? —le preguntó Kendall.
—Sí, estoy seguro —Hank asintió, su rostro aún más triste, sus ojos brillaban con lágrimas.
—La señora Black también piensa que su hija es muy filial y no se iría sin decir nada, ¿verdad? —preguntó de nuevo Kendall.
—Sí —se secó las lágrimas la señora Black.
