El humor de Kendall cambió ligeramente en el momento en que vio a esta hermosa chica.
Antes de que pudiera pensar en qué consistía este cambio, la hermosa chica también la vio, sus ojos se iluminaron y levantó las cejas hacia Damien,
—¡Ey, Kendall está aquí! —exclamó ella.
Ella conocía la existencia de Kendall por Damien.
Damien se giró y miró a Kendall, con sorpresa en sus profundos ojos.
—¿Por qué tan temprano esta vez? Tenía planeado esperarte para recogerte —dijo—. La filmación terminó antes.
Kendall entreabrió ligeramente sus labios rojos y caminó hacia él.
—Déjame presentarte a mi amiga —Damien señaló a la hermosa chica frente a él, con una sonrisa en su rostro apuesto—. Hera, mi compañera de universidad, actualmente científica paleontológica en la Academia de Ciencias de Rosemont.
—Hola —Hera extendió su mano hacia Kendall.
—Hola —Kendall la estrechó, y no pudo evitar ver a Hera de un modo diferente en su corazón.
