Tras la exitosa misión, Naruto volvió al equipo anbu para reportar los detalles junto a sus mentores. Aunque habían cumplido con su objetivo, las secuelas del combate seguían presentes. Sus músculos dolían, y el agotamiento se acumulaba mientras caminaban por los pasillos subterráneos que conectaban la base anbu
Kakashi (mirando a Naruto con un ojo entrecerrado): "Naruto, ¿sabes por qué insistí en que lucharas contra el líder mercenario tú solo?"
Naruto (sorprendido): "¿Porque confías en mí?"
Kakashi: "Eso es parte de la respuesta. Pero la verdadera razón es que el campo de batalla no espera a nadie. Necesitabas sentir el peso de enfrentarte a alguien experimentado. Y aunque te desempeñaste bien, dejaste algunas aperturas."
Naruto apretó los puños. Había dado todo en esa pelea, pero sabía que aún tenía mucho que aprender. Yugao, siempre más suave en sus comentarios, le colocó una mano en el hombro.
Yugao: "Lo hiciste increíblemente bien para tu edad, Naruto. Nadie espera que seas perfecto, pero si sigues entrenando como hasta ahora, superarás incluso nuestras expectativas."
Luego de reportar todo lo suscedido, Naruto se puso su mascara que tenia solo para la aldea en la que vivia y fue a visitar su lugar favorito de la aldea," asi es", es Ichiraku Ramen
Esa misma tarde, el Hokage convocó a Naruto en su oficina.
Hiruzen: "Naruto, tu potencial está creciendo más rápido de lo que imaginábamos. Sin embargo, con ese poder viene una gran responsabilidad. He decidido que, además de tus misiones anbu, recibirás un entrenamiento especial bajo la supervisión directa de Kakashi, Yamato y Yugao. Tu fuerza no debe ser solo física, sino también estratégica."
Naruto, emocionado pero algo nervioso, preguntó:
Naruto: "¿Qué tipo de entrenamiento, Hokage-sama?"
Hiruzen: "Quiero que trabajes en dominar tus habilidades únicas. Si tu sistema puede darte ventajas en combate, también debes aprender a integrarlas con nuestras enseñanzas tradicionales. Este equilibrio será la clave de tu éxito como ninja."
Despues de la reunion con el kage de su aldea Naruto se quedo pensando todo el trayecto a su hogar,"si su sistema es tan poderoso", pero se decidio que si era asi el le sacaria el maximo pontencial posible.
Una vez llegado a su casa se hizo algo de comer para que al dia siguiente este a su maxima potencia, una vez que cerro los ojos quedo pensando, de como seria su entrenamiento mas intensivo.
Al día siguiente, Naruto y sus mentores se reunieron en un campo aislado a las afueras de Konoha. Yamato había preparado el terreno, creando estructuras de madera para simulaciones de combate. Kakashi, mientras tanto, le entregó un libro con tácticas avanzadas de taijutsu y ninjutsu. Yugao estaba allí para evaluar su progreso y asegurarse de que no se sobreexigiera.
Kakashi: "Primero, quiero que uses tus clones de sombra para dividir las tareas. Cada clon puede entrenar una habilidad distinta, y cuando los disipes, toda la experiencia volverá a ti."
Naruto: "¡Eso ya lo sabía! Pero... ¿qué más puedo hacer con los clones?"
Kakashi: "Haz que colaboren entre ellos. Los clones no son solo una extensión de ti, son herramientas estratégicas. Si los usas bien, puedes estar en varios lugares a la vez, atacar desde diferentes ángulos y confundir al enemigo."
Naruto asintió y creó cinco clones. Cada uno comenzó a trabajar en una tarea distinta:
El primer clon se centro en Mejorar su Rasengan, asi estabilizar su chacka de una manera mas eficiente
El segundo intentaba aumentar su precision con su habilidad de Rafaga de Viento Cortante
El tercero trabajaba en taijutsu avanzado, mientras que se enfrentaba contra Yugao
El cuarto estaba mejorando su sigilo, incluido en condiciones extremas, mientras exploraba su habilidad de Modo Silencio Absoluto para aprovecharla al maximo posible
El último intentaba integrar todo en una secuencia fluida.
Naruto y Yugao se enfrentaron en un duelo de práctica. Yugao, rápida como el viento, lanzó una serie de cortes con su katana. Naruto intentó bloquearlos, pero su inexperiencia contra espadas lo dejó en desventaja.
Yugao: "Naruto, no basta con reaccionar. Debes anticiparte a los movimientos de tu oponente."
Naruto saltó hacia atrás, sus clones apoyándolo desde los flancos. Un clon explotó al contacto con Yugao, creando una cortina de humo que Naruto usó para atacar desde arriba con un Rasengan. Sin embargo, Yugao lo bloqueó con facilidad, moviéndose fuera del alcance.
Yugao: "Mejor, pero aún necesitas ser más impredecible. Usa tu entorno a tu favor."
Naruto lo entendió. Utilizó el sistema para aumentar su velocidad y rodear a Yugao mientras los clones lanzaban kunais desde diferentes direcciones. Aunque no logró derrotarla, sí consiguió empujarla a una posición defensiva, algo que ella notó con orgullo.
Al finalizar el entrenamiento, Naruto estaba agotado pero satisfecho. Mientras descansaba, Yamato le habló:
Yamato: "Naruto, estás creciendo rápidamente, pero no olvides que el camino ninja no se mide solo en poder. Es tu corazón el que hará la diferencia."
Naruto (sonriendo): "Lo sé. Pero también quiero ser lo suficientemente fuerte para proteger a todos los que me importan."
Esa noche, Naruto revisó su sistema. Había subido al nivel 53, desbloqueando una nueva habilidad: Espíritu del Viento Rasante, un movimiento que le permitiría combinar su chakra de viento con taijutsu para ataques más rápidos y letales.
Naruto (pensando): "No importa cuánto me tome. Me convertiré en alguien capaz de cambiar el mundo."
Naruto miraba la luna desde la ventana de su apartamento, repasando mentalmente los eventos del día. El entrenamiento con sus mentores había sido duro, pero revelador. Las palabras de Kakashi sobre sus debilidades seguían resonando en su mente, al igual que los consejos de Yugao para usar sus clones de sombra con mayor creatividad.
Suspiró y activó su sistema, revisando su estado actual. Aunque el panel holográfico frente a él mostraba avances significativos, Naruto sabía que aún había mucho que mejorar.
Naruto (pensando): "No estaría aquí si no fuera por esto. Pero tampoco habría llegado tan lejos sin ellos. Ellos son los que realmente me ayudaron a controlar este poder."
Al recordar a sus mentores y al Hokage, su mente viajó al momento en que les había contado sobre el sistema por primera vez. Había sido uno de los días más difíciles de su vida, pero también el inicio de una nueva etapa.
El sol apenas comenzaba a salir sobre Konoha cuando Naruto fue llamado a la oficina del Hokage. Había algo solemne en la voz de Hiruzen cuando le pidió que se presentara. Al entrar, encontró a Kakashi, Yamato y Yugao esperándolo junto al Tercer Hokage, todos con expresiones serias.
Hiruzen: "Naruto, hemos notado que tu progreso ha sido... extraordinario, por decirlo suavemente. Tu velocidad, fuerza y habilidades de análisis han avanzado a un ritmo que no es natural, incluso para un ninja con tu potencial. ¿Hay algo que debamos saber?"
Naruto se detuvo en seco. Había mantenido su sistema en secreto desde el día que lo obtuvo, pero sabía que no podía ocultarlo para siempre. La mirada comprensiva de Hiruzen y la paciencia en los ojos de Yugao lo hicieron sentir que tal vez, solo tal vez, confiar en ellos era la decisión correcta.
Respiró hondo, sus puños temblando ligeramente.
Naruto: "Hay algo que debo contarles... pero no estoy seguro de cómo explicarlo."
Kakashi (cruzando los brazos): "Empieza por el principio. ¿Qué ha cambiado en ti?"
Naruto asintió y cerró los ojos, recordando aquel día en el bosque cuando todo comenzó.
Naruto relató cómo, a los cinco años, mientras escapaba de unos niños que lo perseguían, había caído en un lugar oscuro del bosque. Ahí, una luz azul brillante había surgido de la nada, y un mensaje extraño había aparecido frente a él:
"Has sido seleccionado como portador del Sistema del Cazador. ¿Aceptas esta oportunidad?"
Al principio, pensó que era una broma, pero al aceptar, todo cambió. Naruto les describió cómo el sistema le otorgó paneles visibles, misiones y recompensas. También les habló de cómo podía ver su propio progreso y estadísticas como si fuera un videojuego.
Naruto: "Al principio no entendía nada. Las misiones eran confusas, y cada vez que fallaba, sentía como si el sistema me castigara. Pero con el tiempo... comencé a comprenderlo."
Hiruzen se recostó en su silla, encendiendo su pipa mientras escuchaba atentamente. Yugao parecía intrigada, mientras que Kakashi y Yamato intercambiaban miradas.
Hiruzen: "Un sistema que mide tu fuerza y te impulsa a mejorar... Esto no es algo que haya visto antes. ¿Sabes de dónde proviene?"
Naruto (negando con la cabeza): "No. Solo apareció. Pero me ha ayudado a ser más fuerte, más rápido... A aprender cosas que de otro modo no podría."
Naruto les mostró una demostración práctica. Abrió su panel, dejando que los adultos vieran las palabras flotando frente a él.
Panel del Sistema:
Nivel: 53
Fuerza: 115
Velocidad: 127
Inteligencia: 102
Resistencia: 120
Kakashi (arqueando una ceja): "Así que todo esto te ayuda a visualizar tu crecimiento... Fascinante. Pero, ¿hay riesgos?"
Naruto: "A veces las misiones son peligrosas. Si las ignoro, el sistema me castiga. Por ejemplo, una vez perdí mucha energía por no completar una misión a tiempo. Y siento que siempre está... observándome."
El Hokage golpeó suavemente su escritorio con la pipa, pensativo.
Hiruzen: "Naruto, lo que describes es un poder que podría cambiar el equilibrio del mundo ninja. Es peligroso, tanto para ti como para quienes te rodean. Pero también es una herramienta valiosa. Debes aprender a controlarlo completamente antes de depender de él."
Yamato (con seriedad): "Lo que el Hokage dice es cierto. Si el sistema puede castigarte, significa que tiene un control sobre ti. ¿Y si ese control aumenta?"
Naruto bajó la mirada. Era algo que había pensado muchas veces, pero no tenía respuestas.
Naruto: "No sé si puedo apagarlo, pero sí sé que quiero usarlo para proteger a los demás. Nunca tuve nada, y esto me dio una oportunidad... No voy a desperdiciarla."
Yugao se inclinó hacia él, su tono más suave.
Yugao: "Naruto, no estamos en tu contra. Solo queremos asegurarnos de que estés seguro. Si decides seguir usando este poder, estaremos contigo para ayudarte."
Desde ese día, sus mentores comenzaron a integrar el sistema en sus entrenamientos. Kakashi lo presionó con misiones tácticas que desafiaban su capacidad de análisis, Yamato creó entornos extremos para probar sus límites, y Yugao lo ayudó a desarrollar estrategias para compensar cualquier debilidad que el sistema pudiera tener.
Hiruzen, por su parte, tomó nota de todo en secreto, observando el crecimiento del joven Naruto con una mezcla de orgullo y preocupación.
El flashback terminó con Naruto recordando las palabras de Yugao ese día:
Yugao: "No importa cuán fuerte sea tu sistema, Naruto. Lo que realmente te hace especial es tu voluntad de seguir adelante, pase lo que pase."
Ese recuerdo lo llenó de determinación, sabiendo que, aunque su sistema era una ventaja, eran las personas a su alrededor las que lo ayudaban a convertirse en alguien verdaderamente fuerte.
Fin del Flashback.
Naruto volvió al presente con una ligera sonrisa. Sus mentores no solo lo habían ayudado a entrenar, sino que también le habían dado algo invaluable: confianza en sí mismo.
Esa noche, mientras la luna seguía brillando en el cielo, Naruto repasó sus avances:
Había aprendido a integrar las habilidades del sistema con las técnicas tradicionales.
Había desarrollado un vínculo más fuerte con Kakashi, Yamato y Yugao, quienes lo trataban como un igual, no solo como un niño.
Había encontrado un propósito claro: usar su poder para proteger a todos los que le importaban.
Sin embargo, mientras miraba la aldea desde su ventana, una sensación inquietante lo invadió. Sabía que con cada nuevo nivel, cada nueva misión, el sistema lo empujaba hacia algo más grande... y posiblemente más peligroso.
Naruto (pensando): "Sea lo que sea, estaré listo. Ya no estoy solo. Tengo un equipo, y tengo mi voluntad. Eso es lo único que necesito."
En una azotea cercana, la figura encapuchada que lo vigilaba esbozó una sonrisa fría antes de desaparecer en las sombras, dejando en el aire un silencio cargado de misterio.