18 de diciembre 1976 – Bellatrix Pov
"ve, no dejes que nadie te vea, y por el amor de Morgana, solo a los mortífagos." Serena me había dado luz verde, no la necesitaba, pero pude sentir como mi sonrisa creció ampliamente.
Me fundí con las sombras y comencé a moverme. Todo el entrenamiento que había hecho con Serena había sido útil, tratar de comprender mis nuevos poderes y como usarlos, ver que tenía tanto poder en mi cuerpo, en mis manos, era orgásmico.
Ninguno entendía por que había elegido la plantilla de Marshal D. Teach junto con la de Alucard, no se complementaban de ninguna manera, pero, la capacidad de poder agitar mi puño y hacer temblar todo Gran Bretaña? La idea de poder romper países enteros en pedazos si me empujaba todo lo que podía? era lo más cercano al éxtasis que podía alcanzar.
Y ahora estaba teniendo una nueva epifanía mientras acechaba a los idiotas que se hacían llamar mortífagos. La idea de cazar, chuparles la sangre hasta dejarlos secos y absorber sus almas para darme inmortalidad? Fue un nuevo tipo de placer. Uno que estaba más que dispuesta a disfrutar.
Kazikli Bey se materializo en mi mano izquierda y agarre mi varita con mi mano derecha mientras miraba al grupo de mortífagos, había 5 de ellos, todos distraídos mientras reían al causar destrucción por el pueblo, no había nadie más alrededor, ninguna víctima o mejor dicho, ningún testigo.
Me moví más rápido de lo que cualquier mago o bruja pudiera reaccionar, Kazikli Bey atravesó el estómago del primero sin que pudiera reaccionar, moví mi varita y con un Sectumsempra corte a otros dos lo suficiente para dejarlos incapacitados.
"q-que?!" ignore el grito incrédulo de los dos restantes, guarde ambas armas en el inventario una vez más y saque a Casull, le dispare en el pecho al cuarto mortífago y volví a guardar la pistola en el inventario y mire al quinto.
Parecía apunto de orinarse en el lugar, podía oler su miedo, pero me apunto con su varita, lento, eran terriblemente lentos comparado con Serena, me moví antes que lanzara alguna maldición, le rompí la muñeca con un simple apretón de mi mano, lo gire sin dudarlo y clave todos mis dientes sobre su cuello, no había necesidad de contenerme como con Serena.
La sangre toco mi boca al instante…
…era horrible…
Sabia horrible, detuve el impulso de alejarme de mi víctima y seguí bebiendo. Sabia horrible, muy por detrás de la ambrosia que era la sangre de Serena, pero… podía sentirlo, el alma del mago debajo de mis dientes fluir hacia mí, ser absorbida por mi cuerpo y eso… eso definitivamente era placentero.
Podría soportar el horrible sabor por ese momento donde le quitaba el alma a mis víctimas, y así lo hice, arroje el cadáver seco que tenía en mis brazos a un lado y mire a los otros cuatro restantes, todavía vivos, pero todos desangrándose, definitivamente no duraran mucho más así que fui rápida.
5 almas, ahora tenía 5 almas dentro mío, podía sentirlas, podría manipularlas podría… podría ver dentro de ellas, todo lo que eran, todo lo que sabían, todo su ser estaba desnudo para mí, era… embriagador.
Escupí la sangre asquerosa que había quedado en mi boca y miré los cuerpos debajo mío, volví a sacar mi varita del inventario, un rápido accio y sus varitas estaban dentro guardadas dentro mío, junto con el alma de sus dueños, mientras tanto convertí los cadáveres restantes en guijarros antes que mi mirada se dirigiera a otra parte del pueblo.
Había más mortífagos que cazar, más almas que absorber.
Y luego… iría a Serena para limpiarme el sabor horrible de la boca.
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27 de diciembre de 1976 – Bellatrix Pov
Estaba de pie mirando la pelea frente mío.
Había decidido utilizar mis familiares para que luche entre sí, quería poner a prueba las creaciones de Serena.
Koloss.
Una monstruosidad de piel azul y herirás abiertos que no se curaban nunca.
Serena había creado 4 más de ellos dando un total de 5 Koloss en mi repertorio, y se estaban enfrentando a los gigantes que tenía absorbidos. Los gigantes no tuvieron ninguna oportunidad.
Los Koloss eran de la mitad del tamaño que los gigantes, tres metros contra los siete metros de los gigantes. Aun así, los Koloss eran casi igual de fuerte, pero más rápidos, más peligrosos, los gigantes eran simplemente resistentes, y como ningún lado tenía armas, solo había un daño limitado que podían hacerse.
Capaz pedirle a Serena que transmute con alquimia algunas armas para ellos, las grandes espadas para los Koloss o garrotes gigantes, nunca podían fallar, podría hacerlos con transfiguración, pero serian temporales y no quiero averiguar qué pasa cuando son absorbidas por mi cuerpo, estoy segura que algo permanente puedo absorberlos nuevamente dentro mío con ellas para utilizarlos cuando los libero una vez más.
Una vez que termino la pelea, volví a meter las almas dentro de mi cuerpo, podía sentir todas las almas que tenía debajo de mi piel, todos los familiares, era fácil empujarlos abajo, suprimirlos, los cientos de almas que tenía ahora. Pero había más que quería probar, que quería ver sus límites, pero había otra cosa que probar primero, así que empuje a todos abajo, excepto con uno.
Había querido probar el cambio de forma, cambio de forma animal. Animago, era algo que me había interesado por un tiempo, la única razón por lo que no lo había hecho era por que requería demasiado tiempo y no podías decidir que animal serias, podías conseguir algo totalmente inútil.
Pero ahora, con las almas de distintos seres y animales, tenía un amplio abanico para elegir.
Y claramente elegí el colacuerno húngaro.
Fue fácil, utilizar el alma como un disfraz, un disfraz de 20 metros hecho de puro musculo salvaje y llamas. No pude evitar soltar un rugido, esto era divertido, una lástima que todavía estaba dentro de la sala de entrenamiento, no había suficiente espacio para ir a volar.
Así que cambie de forma, un cuervo, apropiado, me tomo unos segundos descubrir la mecánica para volar, pero una vez que lo logre fue… liberador de alguna manera. No era como Serena podía volar simplemente… deseándolo en cualquier momento, pero seguía siendo volar por mi propia fuerza, sin una escoba, sin nada, eso era liberador, era increíble.
Aterrice mientras cambiaba a mi forma original una vez más.
Siempre era divertido ver que cosas nuevas podía lograr, y el cambio de forma ciertamente no decepciono, ahora, había otras cosas que seguir probando antes de que Serena volviera para entrenar.
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1 de enero de 1976 – Bellatrix Pov.
"y… sobre qué quieres hablar?" pregunto Lucius mientras me miraba cautelosamente.
"sobre Serena y como es una idiota." Dije simplemente, pude ver a mi hermana y su prometido erizarse defensivamente, ambos estaban a punto de explotar en defensa de Serena, y no me molestaba, si cualquier otra persona hubiera insultado a Serena, tendría a Kazikli Bey directamente atreves de su cráneo, pero tenía que dejar claro un punto así que levante la mano para detenerlos a ambos "déjenme explicarlo."
"espero que tengas un punto Bellatrix." dijo Lucius con el ceño fruncido fulminándome con la mirada, suspire mientras me dejaba caer un asiento frente a ellos.
"amo a Serena, no importa en este momento si fue fabricado por el sello, el contrato o cualquier otra cosa, amo a Serena, destruiría el mundo por ella si fuera necesario." afirme mientras me acomodaba en mi asiento, lo dije de forma casual, tan casual que pensaría que estaba comentando sobre el clima, y así lo era, amaba a Serena y era un hecho. Ambos me miraron sorprendido "pero, así como la amo, no estoy ciega a sus defectos y Serena, es una idiota." dije simplemente.
"puedes… explicarte más?" pregunto Narcissa lentamente, asentí.
"pueden decirme honestamente, que todas las decisiones o como manejo las situaciones Serena, la mayoría de ellas, no fueron estúpidas?" el dúo hizo una mueca "empezando por su vestimenta, realmente no quiere o no le gusta destacar, pero sobresalta como un pulgar dolorido, es… inconsciente con lo que lo rodea."
"la forma que trato con Dumbledore, o mejor dicho, intento tratar con Dumbledore fue una ridiculez, y no me hagan empezar con una lista de otras cosas sobre las que hizo, por que estaríamos un rato, como decidir irse de este mundo sin resolver lo de Voldemort o Dumbledore como si estuviera escapando, como estamos ahora, podríamos resolver ambos problemas rápidamente, pero está escapando por alguna razón."
"pero, sobre todo, su decisión de contarnos todo sobre ella incluso antes de sellarnos, incluso antes de tener una salvaguarda en caso que decidiéramos traicionarla, fue el colmo de la estupidez, incluso… incluso la familia no es de confianza." hice una mueca amarga que fue repetida por el par frente mío, los tres nos quedamos en silencio.
"puede ser, realmente no … negare que había mejores formas de confrontar los hechos, pero …" dijo Lucius seriamente antes de sonreír débilmente "pero… si no lo hubiera hecho, no estaríamos aquí o sí?" pregunto suavemente y suspire.
"si… supongo que sí." Le di la razón mientras hacia una mueca "pero no cambia el hecho de que es, o por lo menos, hace estupideces, y las seguirá haciendo, porque es Serena, tarde en darme cuenta, ella no tiene la experiencia de Severus Snape adulto, solo sus recuerdos, cuando cambio a Baiser su plantilla base, y no es lo mismo, así que solo tiene sus recuerdos como Serena, una adolescente malhumorada y terca y su… pasado, por lo que no es raro que se equivoque, y mucho."
"me gusta esta Serena, no quiero que cambie." Dijo Narcissa mientras hacia un puchero, yo hice una mueca.
"yo tampoco, realmente." dije honestamente "por eso quería hablar con ustedes, quiero ayudarla." el par me miro curiosamente "estamos por ir a un nuevo mundo, y quiero ayudarla… quiero cuidarla para que no lo arruine… mucho." Desvié la mirara, realmente no quería ver la expresión que hacían ambos, el solo arrullo de Narcissa era molesto "o por lo menos, estar para ella y ayudarla cuando pasé algo."
"eres tan linda Bella." arrullo Narcissa y resople, pude sentir mis mejillas calentarse, pero lo ignore.
"como decía, quiero ayudarla, pero no puedo sola, si se tratara solo de combate, puedo hacerlo, puedo volverme más fuerte si es necesario, seguirle el ritmo a Serena y estar a su lado de pie luchando, pero… a pesar de conocer la política y sus entresijos, tengo que admitir que… no es mi fuerte ni el de mi contraparte futura, algo que necesitaremos bastante." Confese nerviosamente, pude escuchar a Narcissa jadear.
"quieres que Lucius te ayude?!" pregunto Narcissa emocionada, hice una enorme mueca y fulmine con la mirada a Narcissa, pero no lo negué, por mucho que no quisiera admitirlo, según mis recuerdos de mi futura yo, Lucius había jugado el juego durante dos décadas, había tenido al ministro y el Wizengamot en su bolsillo durante años, era bueno, ahora que tenía un poder que lo ayudaba a leer a las demás personas? Iba a ser mejor.
"ni siquiera tenías que preguntarlo Bella, lo haría de todos modos." Interrumpió Lucius con una sonrisa honesta, suspire aliviada, ese era un peso menos.
"bien… bien, bien, bien" me repetí aliviada, me puse de pie, me alisé la ropa y me aclare la garganta "no lo volveré a repetir, pero… gracias." Asentí en la dirección en ambos.
"no lo menciones." Devolvió Lucius, Narcissa chillo.
"yo también ayudare donde pueda!" agrego Narcissa alegremente, los tres sonreímos antes que me aclarara una vez más la garganta.
"muy bien, tenemos que prepararnos para un nuevo mundo."