Embrich dejó de lado a la mujer llamada Sofy que había intercambiado con el en una zona segura.
El, junto con un grupo de trabajadores se movieron apresuradamente a otra sección de las casas mientras escapaban de la persecución de un grupo de soldados soviéticos.
[Mierda, esos tipos codiciosos, solo saben hacer su trabajo cuando les conbiene.]
Maldijo mientras cargaba una caja lena de suministros de regreso.
Esta era la tercera vez que los intentaban atrapar, pero su jefe ya estaba muy listo, había dado ideas para contrarrestar estos problemas.
Con contratar a algúnos de esos niños con algo de comida, es bueno dejarlos fingír jugar en varias calles importantes y vigilar que ningún soldado se aserque. Sí por algúna razon hacen esto, entonces solo tienen que levantar una pequeña vandera roja en el techo de un edificio alto.
Esas señales son desde una zona muy lejana, pero con sus hombres vigilando desde el techo del almacén, logran ver a tiempo las pequeñas banderas hechas de trapo rojo volando en el aire.
solo es necesario una, para que el vigía en el techo toque una trompeta y con esto todos escapan del lugar.
[apresúrense,esos bastardos seguro encontrarán la salída pronto]
Gritó en voz baja a sus trabajadores.
Estos movían cajas, sacos y una serie de materias.
Cuando todos salieron, embrich corrió por el interior de una casa abandonada hasta el exterior.
En un patio solitario, encontró un establo con una docena de caballos delgados atados de antemano.
Cargaron el equipaje en las espaldas de los caballos, y con cuerpos mas ligeros, corrieron del lugar.
...
En el almacén, unos 20 soldados soviéticos se habían juntado para rodear el lugar.
Un hombre que parecía ser el capitan del pequeño batallon estaba montado en un pequeño auto, con el uniforme pulcro en su cuerpo y una mirada que veía el lugar con desagrado. Se llamaba issac, bajó del pequeño camión mientras escuchaba el reporte de sus subordinados.
[Capitan, los perdímos una vez mas, son astútos, estan confabuládos con los pueblerínos sercanos, simplemente no podemos atraparlos]
Habló su subcapitán.
Issac escuchó esto y su mirada se tornó de desagrado.
***pe!*
Escupio en el suelo con desagrado.
[No pueden ir muy lejos, esta vez estábamos preparados, ¡búsquen apresuradamente sus rutas de escápe!]
Le gritó a los soldados que lo seguían, y estos se movieron a su orden, comenzando una búsqueda exaustíva.
[Ya hemos visto sus trúcos, esta chusma solo sabe huír como cucarachas, tienen caminos subterraneos en todas partes, esta vez no se me escaparán]
Maldijo mientras buscaba con odio.
No era que tuviera un odio real por los contrabandístas, el odio consistía en que estos tipos no pagaban deudas.
Junto con su llegada a la ciudad, fueron que llegaron los comerciantes de mercados negros, no era una coincidencia, había un trato entre algúnos soldados y estas organizaciónes,para coexistír entre sí, Issac no era codicioso, para esas tres organizaciones permitió obtener solo el 20% de las ganancias para que el hiciera la vista gorda y no atraparlos,, pero este nuevo grupo no parecía tener respaldo algúno, parecían un grupo de cabrónes alemanes los amenazó amablemente a darles el 60% de sus ganancias acambio de no acusarlos de ser remanentes nazis, esos tipos fueron malagradecídos, escaparon y no querían pagarle un centavo.
bviamente ellos no siguieron las reglas, merecían morír.
Los buscó durante un tiempo, varias veces casi los atrapó, pero el resultado fue nulo y esas cucarachas se escurrieron entre sus dedos.
Amenudo escapando entre callejones, ventanas y sobre todo túneles subterráneos.
Pronto, un soldado con buena vista encontró la zona por la que escaparon, y cuando el se asercó, ya se había encontrado un túnel.
[¡Deprísa!, ¡encuentren a esoss bastardos nazis y tráiganlos conmigo!]
Gritó con ira.
Varios soldados saltaron bajo tierra y se apresuraron a seguír el camino subterráneo.
Pero cuando llegaron al otro lado, ya no encontraron nada.
Issac entró en cólera, pero no pudo hacer nada.
...
..
.
Victor desapareció de su casa.No se había dado cuenta de una cosa que era muy normal en esta época, pero con el pensamiento del futuro no había pensado.
En realidad, los alemanes eran practicamente tomádos como la basura mas víl y peor que las ratas y cucarachas.
*Chicos, me ví un documental de la posguerra en alemania, y , noté que parecía que había hecho las cosas muy ligeras para el protagonista. Una nación caída, los alemanes perdieron, los hombres desaparecieron, era un país de mujeres, niños y ancianos, cada aleman encontrado pasaba por una seria rebición para ver que no tuviera aún los pensamientos nazistas,las enfermedades brotaban, los acarriados y vagabundos sin hogar rondaban por todas partes, la hambruna y pobresa, los soviéticos violaron a mas de 2,000,000 de mujeres, en cuanto a los estadounidenses, franceses y británicos, el número era incontable, estas al mismo tiempo fueron las que reconstruyeron las ciudades destruídas, "mujeres de los escombros" las llamaban.
Osea, parecía que mi novela estaba idealisando un poco su situación, así que...
Vamos un poco mas realistas
Pd: esta no es una novela historica, pero siento que mas preción para el prota suena bien.*
Justamente tras su día número 50 encerrado en un castígo en su casa, un grupo de soldados soviéticos bajaron en un auto frente a su casa, y sin tocar o decír hola, sacaron una granada y la lanzaron atravez de la ventana.
La casa que de por sí ya era pequeña y fragil, se derrumbó al suelo y se destrozó.
Esta tambien se encendió en llamas.
Estos tipos no fueron tontos, cuando la casa dejó de incendiarse, movieron los escómbros y buscaron el cuerpo calcinado, sin embargo, se llevaron una sorpresa cuando no encontraron nada.
La noticia se esparció como pólvora ardiente por toda la ciudad.
victor era bien conocido, por lo que su intento de asesinato y escape fue un tema grande de discución.
Pero esto a Victor no le importaba, el camino en su intento de entrar en la política fracasó antes de intentarlo.
No se esperaba el rasismo,, ¿que no eso en esta época era solo para los negros?, se sentía desafortunado, su intento de ir por el camino político no tenía salída y parecía que ahora solo le quedaba un camíno.
Pero esto era bueno, que se diera cuenta de esto antes de que le probocara problemas era mejor que tarde.
ahora, solo le quedaba un camíno por delante.
...
...
...
En una zona escondida de la ciudad.
El grupo de embrich se había juntado tras un largo viaje de escape.
Esta era una casa rodeada de zonas de escombros, los barrios bajos por decírlo de forma amable, pero peor que estos.
La casa era pequeña, sin embargo, aquí la gente se reunió y entraron en un lugar que obviamente no debía aceptar que tanta gente entrara en este lugar.
En realidad lo que había en el interior era una cueva.
El grupo de Embrich entró atraves de un profundo agujero que estaba en el suelo.
Pasando por una zona subterránea que se había formado en algún momento.
Embrich caminó en el túnel aún emocionado por la zona de cuevas que su jefe le había dejado ver.
Se preguntó cuando se había hecho este grupo de cuevas subterráneas, ¿tal vez fue el mismo ejército?
No lo sabía, pero con este lugar, se sintio mucho mas alibiado con su jefe.
Pasó por un largo tunel de tierra bastante alto, cuando llegaron junto a una cueva, ordenó que se dejaran los caballos en el lugar,
Esta cueva era para que los caballos se quedaran y comieran.
En esta época donde incluso el combustible escaseaba, el movimiento en caballos era lo mejor que tenían.
La cueva tenía cubos de heno con el que se alimentaban, habían cubos de agua y era espacioso.
Tras dejar que un par de hombres se quedaran a cuidar los caballos, el grupo siguió hasta otra zona un poco mas lejana, ahí había una segunda cueva que serbía para que descansaran y una salida separada para evacuar por otra zona de la ciudad.
aquí Embrich dejó a sus demas trabajadores mientras que el seguía caminando mas adelante.
finalmente llegó en una zona mas profunda.
Aquí las lámparas que iluminaban el camíno en el techo emitían solo una leve luz para asegurar que el camino fuera visible.
Cuando llegó a una zona mas profunda una voz se escuchó.
[Oye, Embrich,, ¿eres tú?, ¿porqué regresas tan temprano?]
Cuando se asercó, se encontró con un chico de cabello negro y ojos negros sentado en una caja haciendo guardia, cargando un fusíl de asalto y vestído con ropa gruesa.
Embrich asintió.
[Oye, chico, ¿como está el jefe?
Esos maldítos soldados nos persiguieron una vez mas]
Embrich miró al joven de unos 17 años, hace dos años tenía solo 14 años y no fue reclutado en la guerra perdída, ahora era un guardia de su jefe.
Estaba algo confundído, nunca supo que su jefe había conseguído un grupo de estos chicos que eran algo peligrosos.
Almenos, todos tenían una fuerza de combate que no se esperaba.
Cuando su jefe apareció con 20 de estos chicos se sintió bastante sorprendído.
el chico frente a el, llamado Marcus se levantó y asintió.
[Claro, Cristov se adelantó y ya debe haberle abisado, pasa]
Apuntando hacia atras, dejó pasar a embrich.
Este asintió y despues de saludar al chico con un arma se adelantó.
El Cristov al que se refería era un niño mas pequeño, pero este era el vigía que los acompañaban a las entregas, era un chico muy astúto y ágil, subía por las paredes como un mono y se escabuyía como una locha sin que nadie los pudiera atrapar.
Este tambien abría el camino para todos, ahora se había adelantado.
Embrich caminó hacia adelante en la cueva.
durante un tiempo, pasó atravez de otro par de cuevas repletas de cajas de suministros hasta que llegó a una mas profunda.
Con una pared hecha de cemento y una puerta vigilada por un par de chicos igualmente de cabello y ojos negros.
Embrich no saludó cuando uno de estos chicos abrieron la puerta para dejarlo entrar.
Embrich se encojió de hombros y entró en la oficina.
Cuando entró en el lugar, notó una zona de descanso pequeña, una cama en una esquína, un armario simple, un brasero, una lámpara en el techo que emitía una luz tenue y finalmente enmedio un escritorio con su jefe detrás.
Podía ver que mas allá, había una segunda puerta, pero hasta aquí llegaba este túnel, no sabía bien que había mas allá.
¿Otro túnel?, ¿un almacén?
No lo sabía, y no preguntó.
Cuando llegó al lugar, el único ojo de Victor lo miró fíjamente.
[Escuché de Cristov que otra vez tuvieron problemas]
Embrich asintió enojado.
[jefe, esos bastardos son cada vez mas arrogantes, solo llevamos un mes, pero con esta van 4 veces que nos persiguen, ahora lo llaman a usted un remanente nazi y a nuestro grupo un grupo de afines nazis que deben ser erradicados, casi nos están comparando con remanentes de la CCS o esoss bastardos que escaparon en las ratline´s]
Victor no dijo mucho.
[Entonces, dime, ¿cuando lograste intercambiar?]
Ante esto, Embrich no se quejó mas y sonrió.
[jefe, cada vez mas nos va mejor, nuestro trato es mejor que cualquier otro grupo, y mas gente biene con nosotros cada vez]
Tenía una sonrisa orgullosa, pero frunció un poco el seño.
[Pero, esto ofendió a los demas, ya había un intercambio establesído, y nosotros aumentamos el precio, ahora estamos en problemas]
Ante esto, Victor se encojió de hombros.
[como sea, eso es problema de otros, nosotros seguímos con esto]
Embrich asintió y dijo.
[Jefe, tragimos mucho, pero, ¿la ropa, y joyas, ¿como se cambian?]
Sacó de su bolsíllo interior una pequeña caja de madera y la puso en el suelo.
cuando Victor lo abrió, había algo de joyería.
dos anillos de plata, un brasalete de plata, y lo mas llamativo eran un par de aretes de oro con incrustaciones de rubí.
Se notaba que eran de gran calidad.
Mirando las cosas, lo se aseguró que todo pareciera estar en un buen estado, y luego lo regresó en su cajón.
Pensando en la pregunta de Embrich victor pensó un poco.
De hecho, había entrado en este asúnto de el mercado negro era para intercambiar su comída por algo mas, pero para que esto funcionara, necesitaba una red de suministros amplia para deshacerse de todos sus artículos que ya intercambiaron.
ahora lla tenían una gran cantidad de suministros intercambiados, ropa, zapatos, sombreros y demás cosas de buena calidad, muebles, mesas, cenizeros, joyas, y un grupo de mas artículos que dejarlos aquí sería un desperdicio y se necesitaban mover pronto lejos.
[Nos encargaremos, tenemos que encontrar un grupo de contactos para intercambiarlo fuera]
¿Quien diría que meterse en este negocio sería tan complicado?
Tomó la caja y suspiró.
[seguiremos con el precio de afuera, puedo caluclar un poco esto,, ten, toma esto, te lo mereces]
Victor sacó una caja diferente y lo puso sobre la mesa]
cuando Embrich abrió la caja, había una botella de whisky y una caja de cigarrillos]
Esto ya valía bastante en esta época, y Embrich lo tomó con felicidad.
En cuanto al oro y joyas, ¿acaso eso se puede bebér o fumar?
Obviamente no.
Por lo que abandonó las joyas sin remordimientos.
Ambos hablaron un poco mas y luego embrich salióde la oficina con pasos felices.