—De acuerdo —Lian Rong aceptó y siguió a Zhang Yongchang fuera.
Mientras tanto, Zhuang Qingning había llegado al puesto de tofu y de hecho vio a un hombre que lideraba a dos oficiales de gobierno de pie frente al puesto, con rostros que parecían bastante descontentos.
Zhuang Qingsui, en su estado de frenesí, al ver a Zhuang Qingning acercarse, rápidamente agarró su mano. —Hermana, han venido oficiales de gobierno y me han preguntado si yo era la chica que se encontró con los secuestradores. No estoy segura de lo que exactamente sucedió y sugerí que podrían haber identificado a la persona equivocada. Sin embargo, dijeron que el nuestro es el único puesto de tofu en la ciudad, y que no había posibilidad de error.
—Hermana, ¿qué está pasando y qué es esto sobre secuestradores? ¿Cuándo nos encontramos con secuestradores?
—Está bien, Qingsui. Sé al respecto y hablaré con ellos. No tengas miedo —Zhuang Qingning le dio una palmada suave a la mano de Zhuang Qingsui para consolarla.