—Tío Jefe dijo que no debería tener ceremonias contigo, así que tú tampoco deberías tenerlas conmigo.
Zhuang Qingning se rió —Cuando acabo de volver, vi que se había esparcido mucha cal en el hoyo. ¿Planeas ponerte a trabajar?
—Hmm —Zhuang Qingning asintió—. Dayong ya ha empezado. Había muchas malas hierbas y árboles pequeños creciendo en el hoyo, así que los quemamos con cal para evitar que las raíces brotaran de nuevo y dañaran el suelo. Supongo que en dos o tres días empezaremos a transportar la tierra.
—Realmente agradezco el arduo trabajo de Tío Jefe, incluso con este caldero de hierro. ¿Cuánta plata debo pagar ahora? Se lo daré primero a Tío Jefe. No puedo permitir que sigas cubriendo los costos por mí —mientras Zhuang Qingning hablaba, sacó una bolsa de dinero para contar la plata—. No es mucho dinero, considerando todo quizás esté bien pagar más tarde...